La Comunitat Valenciana tiene, sin duda, algunas de las localidades y de los parajes más bellos de España y del mundo. Hay mucho que ver y pueden aprovecharse infinidad de fines de semana y días festivos para visitarla, sin riesgo de cansarnos o aburrirnos. Pero también es interesante conocer algunas tierras que, estando relativamente cerca, tienen mucho que ofrecer al visitante.
Por ejemplo, tan sólo cruzar el límite con las tierras catalanas, encontramos la zona del Delta del Ebro. Una región que destaca por muchos de sus atractivos, como las zonas naturales, la gastronomía o unas playas tranquilas y sin masificar, entre otros. Por eso, una escapada de fin de semana al Delta de l´Ebre puede ser una gran opción para planificar a corto o medio plazo.
Lo primero, es escoger una buena época del año para programar la visita. Lo más habitual es recomendar al viajero que escoja meses en los que no coincida con muchos turistas, fuera de la temporada alta. Y lo cierto es que, como en otros lugares, el Delta tiene tendencia a concentrar las visitas en periodos estivales, pero sus playas pueden encontrarse muy tranquilas y poco transitadas incluso en las semanas centrales del verano.
Por tanto, julio y agosto no tienen porqué ser meses inadecuados para este viaje. Al contrario, es una ocasión para disfrutar de la costa sin los inconvenientes de las aglomeraciones. Por supuesto, ésta no es la única actividad de la que nos puede deleitar la tierra del sur de Tarragona. La desembocadura del Ebro es un auténtico espectáculo visual; especialmente, al atardecer. Y presenta una reserva natural de impresión.
Una buena opción puede ser recorrer la zona con uno de los cruceros. Por ejemplo, para adentrarse en alguna de las bahías o para visitar una “musclera”. No siempre es necesario escoger el crucero, ya que la salida en kayak también es posible y permite combinar naturaleza y aventura. La elección dependerá de las preferencias particulares, aunque ambas alternativas son muy interesantes.
Y, hablando de actividades relacionadas con el agua, para los apasionados de la caña y el sedal esta tierra también tiene sus atractivos. Un día de pesca, como los que inspiran algunos populares juegos de Betway online casino y otras plataformas digitales, puede ser un perfecto plan en el Delta. Eso sí, conviene consultar las restricciones y los requisitos normativos. Una posibilidad interesante es contactar con un chárter de pesca de la zona.
Claro que no todos comparten esta afición y, por supuesto, también hay otras formas de acercarse a la naturaleza y la fauna del Delta. Por ejemplo, mediante una visita al Ecomuseo del Parque Natural. Un espacio muy ilustrador para entender la diversidad de la región y la formación de los sistemas agrícolas, que han dado lugar a una de las producciones de arroz más populares dentro y fuera de nuestras fronteras.
Ya que hemos mencionado el arroz, y dado que en Valencia, de esta materia prima, sabemos un poco, no está de más ir a probar su gastronomía. Una cocina que va más allá de las paellas e incluye todo tipo de pescado y marisco, además de unas verduras de primera categoría. Sant Carlos de la Ràpita agrupa una buena cantidad de restaurantes destacados; así como Deltebre y otras poblaciones.
Antes de deleitarnos con sus exquisitos platos, tal vez sea una buena idea avivar el hambre con algo de ejercicio. Y, para ello, un poco de senderismo o cicloturismo por las rutas verdes puede funcionar perfectamente. No faltan estos recorridos en las tierras del Ebro; desde los arrozales a los caminos que llevan a playas como la de Riumar. Hacer una parada en una de las casetas para avistamiento de aves también es imprescindible.
Otro elemento importante, para disfrutar de la cultura de la zona, es aprovechar las fechas de la visita, haciéndolas coincidir con las fiestas populares o celebraciones especiales. Así, en junio podemos encontrar la Fiesta de la Cofradía de Pescadores de Sant Jaume d’Enveja; en agosto, la verbena playera en Riumar y la Procesión Marinera de Sant Carles; en septiembre, la Fiesta del Arroz en Deltebre. Y sólo es una pequeña muestra.
Con estas líneas hemos destacado unos cuantos atractivos de esta zona; pero son muchos más y vale la pena descubrirlos. Especialmente, cuando el Delta del Ebro está tan cercano y se le puede sacar mucho partido a una escapada de fin de semana.