València, 28 feb (OP/EFE).- El alcalde de València, Joan Ribó, ha informado este lunes de que el Consistorio ha aprobado una ayuda extraordinaria y urgente de 200.000 euros y prepara albergues y otras instalaciones municipales para la acogida de refugiados ucranianos.
“València es una ciudad refugio y continuará siéndolo”, ha asegurado Ribó en un comunicado, y ha informado de que, “además de la partida ordinaria” de la Concejalía de Cooperación al Desarrollo y Migración, está prevista “una ayuda extraordinaria de 200.000 euros más, porque esto evidentemente nadie lo había previsto ni se imaginaba que iba a pasar”.
Junto con el apoyo económico, Ribó ha destacado la habilitación otros recursos, como la ampliación del casal de acogida que el Ayuntamiento dispone en Rocafort, que se puso en marcha en 2013 para ofrecer alojamiento y manutención a la población migrante que, por diversas circunstancias, se encuentran en la ciudad y no tienen un domicilio estable.
Sobre el número de personas que acogerá València, el alcalde ha aclarado: “Esto es imposible de predecir, porque depende mucho de la duración del conflicto, que yo querría que se acabara ya, a ser posible hoy”.
En ese sentido, se ha referido a las distintas situaciones que se producen; por ejemplo, “un grupo de alumnos ucranianos que estaban de viaje por España y no pueden volver” a su país y a quienes se les va a buscar un lugar de acogida.
«Queremos hacer las cosas de una forma articulada con la Comunidad Autónoma y el Estado, con normalidad y siguiendo las normas”, ha añadido Ribó, quien ha recordado que “la entrada de estas personas está controlada por el Estado» y el Ayuntamiento, «evidentemente», será «riguroso con esto, pero con una voluntad de refugio”.
Finalmente, el alcalde ha incidido en el “no en la guerra, no a ninguna guerra, no a la guerra de Ucrania”.
València acoge a 90 ucranianos que huyen de la guerra
La responsable municipal de Migración ha detallado cómo se ha ido produciendo la llegada de ciudadanos ucranianos en las últimas semanas. “Han llegado progresivamente por avión y en las últimas semanas hemos recibido varias familias. Tras el cierre del espacio aéreo están desplazándose también en coche. Casi todos los ucranianos que vienen están huyendo de la situación, aumentando el número de familias de acogida. Desde las últimas semanas, de 150 personas con ese perfil de acogida, 90 son de Ucrania”.
Pero hay diversas situaciones: “Hay otro tipo de perfiles, como el grupo de jóvenes que estaban haciendo una ruta por España, se quedaron en València y las familias les han dicho que no vuelvan. Llegaron el viernes. Ha sido complicado conseguir que contacten con sus familias porque en algunas zonas no había red o estaban encerrados en búnkeres, pero es importante que hayan podido localizarles para saber que están bien. Aunque la situación es de una enorme incertidumbre”.
También hay refugiados rusos que han salido de su país por la ausencia de libertad sexual. Ibáñez ha explicado: “Hace unos meses vinieron de Rusia una pareja de mujeres y recientemente hemos acogido a una chica perseguida por pertenecer al colectivo LGTBI. Ese perfil de rusos que defiende sus derechos sociales también está llegando y todos dicen que Putin no les representa. Además, están preocupados porque no se genere odio hacia la población rusa, porque consideran que lo que está pasando es una locura. Me gustaría subrayar que se ha generado una gran solidaridad entre las personas ucranianas y rusas acogidas”.
La concejala desconoce una estimación en torno al número de personas que puedan llegar en las próximas semanas, pero ha señalado: “Salvo estos chicos que les pilló aquí, el resto viene consciente de la necesidad de huir de la situación en su país. Estamos intentando dar respuesta a todos y pensando en ampliar nuevos espacios y recursos porque sabemos que en las próximas semanas es muy probable que lleguen más”.
La concejala Maite Ibáñez ha destacado la coordinación con la Generalitat y el gobierno de España, “aunque somos conscientes de que la primera puerta de acceso a la ciudad es el Centro de Acogida de Inmigración”, y también ha puesto de relieve la coordinación con otras entidades como Cruz Roja.