Lo que se ha vivido en el espacio ‘First Dates’ no había pasado nunca. El popular espacio de televisión en el que las personas acuden a cenar con una cita a ciegas en busca del amor ha vivido uno de los momentos más incómodos de su historia.
Carlos Sobera con enorme sangre fría recibía a David una persona un tanto peculiar debido a su look y una voz en falsete provocada por una supuesta enfermedad. El hombre llegaba con el pelo largo, gafas, una barba que se había teñido de azul y rojo y una voz chillona e impostada.
Con la misma sangre Carlos Sobera le preguntó el tipo de relación que buscaba, y éste respondió que «una aventura», y acto seguido el presentador le pidió que mirara una tablet que tenían preparada para él, una sorpresa que no se esperaba el impostor.
En las imágenes se ve a él mismo en el programa, con distintos aspectos totalmente e identidades diferentes, totalmente irreconocible. Se había ido cambiando de nombre, de profesión y de hobbies logrando engañar al casting del programa, hasta en tres ocasiones anteriores, en las que le buscaron citas para sus distintas personalidades pero siempre sin éxito.
«¿Quién eres realmente y qué te pasa?» le preguntó Sobera ya serio al soltero al que por arte de magia le volvió su voz original y respondió: «Soy Jesús y soy artista en general pero no sé qué soy». Una explicación que no convenció al presentador: «¿Te das cuenta de que has jugado con el prestigio de First Dates? Nosotros estamos aquí no para hacer tonterías, sino para que la gente encuentre el amor. Has jugado con la gente que se ha citado contigo. Sinceramente creo que, salvo que estuvieras enfermo, no tienes ninguna justificación«.
El impostor descubierto reconoció lo ocurrido y trató de disculparse: «Os pido disculpas a todo el equipo, sé que es difícil aceptarlas por lo que he hecho. Me gustaría pedir disculpas a las personas que estuvieron aquí. Es un programa de citas de verdad, lo he comprobado todas las veces que he venido. Siempre había personas nerviosos al esperar su cita…».
«Fue una broma de muy mal gusto. No tiene ningún sentido. Páralo ya y déjales en paz, como te voy a pedir que nos dejes en paz a nosotros. Has jugado con el prestigio de este programa pero te digo más, estabas jugando también con el trabajo de la gente que está aquí currando. Hacemos esto en serio, tío, porque creemos en ello. Siempre hay voces que dicen ‘son actores los que vienen’ y tú lo único que has hecho es echarnos mierda encima con tu actitud».
Sobera le transmitió lo dañino que es tener a personas como Jesús en el formato no solo por el espacio sino por la gente que acude allí en busca de algo real.
Antes esto el impostor aseguró que «en absoluto aquí hay actores, lo he hecho por mi propia cuenta», pero Sobera le interrumpió: «Esto no se lo va a creer la gente porque lo digas tú, que no tienes ninguna credibilidad, siento decírtelo así. Si no porque lo demostramos día a día y lo vamos a seguir demostrando. Te invito a salir«, dijo y le acompañó a la puerta. Ambos se dieron la mano y el presentador regresó a la barra para animar a su equipo: «Vamos a seguir con lo nuestro».
