Los testigos presenciales del incidente intentaron detener la agresión sin éxito, lanzando sillas y bancos en un esfuerzo infructuoso. Sin embargo, la dinámica cambió cuando el propietario del bar, al escuchar los gritos, alzó la voz desde la ventana suplicando que cesara la violencia. Fue en ese preciso instante cuando Eloy detuvo sus acciones, soltó el cuchillo y se dirigió al baño para lavarse las manos. Allí permaneció encerrado hasta la llegada de las fuerzas policiales, quienes lo detuvieron. Paralelamente, los equipos médicos atendieron a la víctima y la trasladaron con vida al Hospital Reina Sofía. Lamentablemente, a pesar de los esfuerzos, la víctima falleció antes de que pudieran realizar una intervención quirúrgica para tratar las graves heridas sufridas.
Los círculos de amistades y conocidos de ambas partes no pueden creer lo sucedido. Han expresado su incredulidad ya que Eloy y la víctima mantenían una relación cercana y amistosa durante muchos años. Además, Eloy siempre fue considerado como una persona tranquila, educada y abstemia.
El viernes pasado, día 18, Eloy compareció ante el juez. Optó por guardar silencio durante el procedimiento y posteriormente fue trasladado a la sección psiquiátrica de la prisión de Alcolea.
Su cita en el programa
El presunto asesino tuvo un paso fugaz por la televisión cuando, durante el pasado mes de junio, participó en el programa “First Dates”.Se presentó como un militar que había pasado seis años en la unidad canina, adiestrando perros para el ejército y posteriormente regresó a casa donde pasaba la mayor parte del tiempo y llevaba una vida solitaria. Su cita fue con Mercedes, una sevillana de 40 años con quien no tuvo demasiada química y prefirieron ambos levantarse de la mesa.