Madrid, 9 dic (EFE).- La Secretaría General de Instituciones Penitenciarias ha acordado el traslado de cinco etarras a cárceles del País Vasco, entre ellos Jon Joseba Troitiño por los atentados en los hoteles Bahía de Alicante y Nadal del Benidorm, por lo que aún quedan en prisiones del resto de España un total de 108 reclusos de la banda terrorista.
Troitiño fue condenado a 268 años de cárcel por esos atentados en junio de 2003, que causaron 14 heridos, y será trasladado desde Logroño mientras que otra de las etarras beneficiadas es Lexuri Gallastegi Sodupe, que será dirigida desde Zaragoza a una prisión vasca y que cumplirá las tres cuartas partes de la condena en junio de 2031.
Gallastegi está condenada, entre otros delitos, por el atentado en 2001 contra el subsecretario general de Policía Científica Juan Junquera, en el que este y otras 96 personas resultaron heridas.
Por su parte, Gorka Joseba Lupiañez cumplirá el resto de su condena en una prisión vasca cuando sea trasladado desde la de Logroño.
Fue condenado por secuestrar a una familia española en Francia y robar su autocaravana, que fue cargada por otros etarras con explosivos y explosionada en Castellón el 26 de agosto de 2007.
José María Novoa Arroniz se encuentra ahora en León y seguirá cumpliendo su condena en Euskadi por el asesinato en Vitoria en 1998 del subteniente de la Guardia Civil Alfonso Parada Ulloa.
Novoa era una de los terroristas integrantes de la denominada «caravana de la muerte», dos furgonetas bomba que tenían como destino Madrid.
Mientras, Zigor Blanco, ahora en Asturias, será trasladado al País Vasco para terminar de cumplir su condena de 22 años por un ataque con cóctel molotov a una patrulla de la Ertzaintza en Portugalete (Bizkaia) en 2001.
Una vez más, la Asociación Víctimas de Terrorismo (AVT) ha criticado, en un comunicado, estos traslados, con los que Pedro Sánchez ha retomado «su agenda carcelaria para continuar con su hoja de ruta y llenar las cárceles del País Vasco y Navarra de presos etarras».
Según sus cálculos, alrededor del 50 por ciento de los presos de ETA están ya en País Vasco (73) y Navarra (13).
«Estos traslados no hacen otra cosa que evidenciar lo que desde la AVT llevamos denunciando desde hace mucho tiempo: presos por presupuestos», concluye la asociación.