No es raro encontrar un mismo producto en varios formatos diferentes, como los llamados ‘pack ahorro’ o ‘pack familiar’ pero, ¿son realmente más baratos? Las marcas y grandes empresas responden así a las necesidades de cada tipo de consumidor en base al número de miembros en la familia, sus preocupaciones medioambientales (son preferibles los productos con más contenido por cantidad de envase) o por una simple cuestión de almacenaje doméstico.
El caso es que, en la mayoría de ocasiones, los formatos grandes suelen considerarse de ahorro y así lo publicitan muchos fabricantes. Pero, ¿realmente se ahorra con estos productos?
¿El pack ahorro es más barato?
La Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) ha desmentido esta estrategia de los grandes supermercados. En muchos casos, sobre todo en los grandes hipermercados, el precio del formato grande no solo no es más barato, sino más caro… ¡hasta un 82% más!
Por eso, antes de meter el producto en el carrito, la entidad española recomienda comparar su precio por unidad de medida (kilo, litro, por dosis, por rollo… en función del producto), que es un dato obligatorio, con el precio del formato teóricamente más caro.
En caso de que no hubiera ahorro y se anuncie como tal, la organización anima a que todos los consumidoes denuncien la situación a través de su campaña #NoCuela. En esta situación OCU aconseja: hacer una foro a los precios y pedir la hoja de reclamaciones. También se puede reclamar a través de su página web.
OCU afirma que el tamaño más grande no siempre es el más recomendable. Y considera tener en cuenta algunos aspectos ajenos al precio: el aceite de oliva, por ejemplo, va perdiendo sus propiedades organolépticas una vez abierto; mientras que los cosméticos, por su parte, pierden calidad.
El concepto de «pack ahorro» o «oferta en paquete» en los supermercados puede variar en términos de su rentabilidad y beneficio para los consumidores. En muchos casos, los packs de productos pueden ofrecer precios más bajos por unidad en comparación con la compra de los mismos productos por separado. Esto se debe a que los minoristas pueden aprovechar economías de escala y reducir costos de empaquetado.
Es importante tener en cuenta algunos aspectos:
Cantidad necesaria: Asegúrate de que realmente necesitas la cantidad de productos incluidos en el pack. Comprar grandes cantidades de productos que no vas a consumir antes de que caduquen puede resultar en desperdicio y no ser una opción económica.
Comparación de precios: Compara el precio total del pack con el costo de comprar los productos individualmente. A veces, los minoristas pueden ofrecer ofertas engañosas, y es posible que no siempre sea más barato comprar el paquete.
Calidad y preferencias: Verifica si la calidad de los productos en el pack es la misma que la de los productos individuales. Además, asegúrate de que los productos incluidos en el pack sean de marcas o variedades que realmente prefieras.
Ofertas temporales: Algunas ofertas de paquetes ahorro pueden ser temporales o promociones específicas, por lo que es posible que no estén disponibles todo el tiempo.
Fecha de caducidad: Verifica las fechas de caducidad de los productos en el pack para asegurarte de que podrás consumirlos antes de que venzan.
En resumen, los packs ahorro pueden ser una opción económica, pero es esencial evaluar cuidadosamente si se adaptan a tus necesidades, preferencias y hábitos de consumo antes de decidir comprarlos.