Los italianos Måneskin se proclamaron ganadores en el que fue uno de los concursos de canciones de Eurovisión más disputados de la historia.
Suiza ganó la votación del jurado en la que Italia ocupó el cuarto lugar, pero la banda de rock italiana de 4 integrantes ganó la votación del público, anotando un total de 529 puntos y dejando a Suiza en el tercer lugar detrás de Francia.
Måneskin es una banda aclamada por la crítica con el vocalista Damiano, el bajista Victoria, el guitarrista Thomas y Ethan en la batería. Tomaron el nombre de su banda de la palabra danesa para «luz de luna», como un tributo al país de origen de su bajista Victoria.
El representante español Blas Cantó hizo una actuación perfecta, sacando petroleo de un tema que era de todo menos eurovisivo. Y una vez más, España quedo en la parte baja de la tabla, con 6 puntos y antepenúltimo. Una posición injusta para un representante impecable.