El laurel es una planta perenne originaria del Mediterráneo que desprende un aroma inconfundible, se utiliza para muchos platos pero también para colocarlo debajo de la almohada.
Pero el truco más común últimamente es incluir el laurel en el rutina del sueño. Se trata de colocar unas hojas de laurel debajo de la almohada durante el día. Posteriormente, antes de ir a dormir se retiran, con el objetivo de conciliar el sueño mucho mejor y encontrarse mucho más relajado.
Quienes han probado el truco del laurel debajo de la almohada reportan un sueño más agradable y multitud de beneficios.
Tiene grandes usos en la gastronomía, pero su valía va mucho más allá. El laurel tiene decenas de beneficios para la salud que no sabías.
Laurel debajo de la almohada: sus beneficios
Uno de los más destacados es su poderoso efecto digestivo. Las hojas de esta planta contienen unas sustancias volátiles que estimulan la digestión y evitan la hinchazón o los molestos gases tras ciertas comidas. A esto se suma su acción antiinflamatoria, gracias a un compuesto presente en el laurel llamado eugenol, que previene el síndrome del intestino irritable. Estas propiedades también ayudan a reducir el dolor de los músculos y derivados de la artritis.
Poder antioxidante
Esta planta tiene un gran poder antioxidante por tratarse de una sustancia muy rica en flavonoides, ácidos fenólicos y alcaloides. Se trata de unos compuesto que protegen las células de cosas como el envejecimiento prematuro en la piel y el cabello. Además de prevenir enfermedades crónicas como afecciones cardiovasculares. Las hojas de laurel también son una gran fuente de vitamina C, clave para fortalecer el sistema inmune.
Esta planta se usa como gran remedio para combatir la tos y otras afecciones pulmonares como la bronquitis. Las propiedades expectorantes (expulsión de las flemas) y antiinflamatorias de la planta ayudan a despejar las vías respiratorias y reducir síntomas como la congestión.