El consumo de platos preparados de supermercado está sustituyendo poco a poco al del tradicional tupper que se trae a la oficina. Básicamente por comodidad, pero también por precio: no es difícil encontrarlos en el lineal de refrigerados por menos de 3 euros. La cuestión es si desde un punto de vista nutricional resultan una comida completa y saludable.
Para averiguarlo, la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) ha analizado 10 lasañas adquiridas en la sección de platos preparados refrigerados de varias cadenas de supermercados como Mercadona o El Corte Inglés, o marcas tan reconocidas en el sector de la alimentación como Dunany. Los resultados del análisis revelan importantes diferencias entre las lasañas analizadas
Frente a productos de buena calidad, elaborados con ingredientes como los que se usan en casa, bien cocinados y ricos, hay otros muy mediocres, con ingredientes industriales y muchos aditivos: emulsionantes, conservantes, acidificantes, colorantes, agentes de textura.
No obstante, todos tienen en común el exceso de dos potenciadores naturales del sabor, como son la sal y el azúcar: 3,3 y 10,6 gramos de media por ración, respectivamente; además de una elevada presencia de grasas saturadas, pese a que solo una lasaña emplea mantequilla para la elaboración de la bechamel.
Las tres mejores: Mercadona, Dunany y El Corte Inglés
Lo cierto es que las mejores valoraciones en degustación, realizadas por un panel de cata profesional, coinciden con los tres productos mejor valorados del análisis, tal y como se explica en la revista OCU Salud de febrero.
- Lasaña boloñesa de Hacendado. Precio: 2,65 euros/envase 350 gramos. A favor: La única lasaña sin aditivos; y muy buena valoración en degustación. En contra: La cantidad de sal podría ser menor.
- Lasaña boloñesa Dunany. Precio: 2,75 euros/envase de 350 gramos. A favor: La única lasaña que emplea mantequilla; muy buena valoración en degustación; buen procesado. En contra: Bastante sal y aditivos.
- El Corte Inglés. Precio: 2,97 euros/envase de 400 gramos. A favor: La mejor nota en degustación; su grado de procesado es aceptable. En contra: Demasiados aditivos, la cantidad de sal podría ser menor.
Ahora bien, aun priorizando las mejores lasañas del análisis, la OCU apunta que no son platos demasiado equilibrados, por lo que deberían consumirse solo de vez en cuando, combinándolas con algo de fruta y verdura. Y recuerda, que, una vez calentados, los restos no deberían guardarse más de dos días.
El sérum reparador de Mercadona que tiene la misma fórmula que el de Dior que cuesta 300€