Madrid (EFE).- El día de las elecciones generales, el 23 julio, se prevé un día “típico de verano” con tiempo estable y sin apenas lluvias, salvo algunas aisladas en el extremo norte, y con temperaturas normales para esta época del año, la más cálida del año.
Rubén Del Campo, portavoz de Aemet, ha adelantado que se alcanzarán o superarán los 30 grados de máxima en buena parte de la mitad norte peninsular, salvo en las comunidades cantábricas, donde se rondarían los 25 grados de máxima, mientras que se podrían alcanzar los 35 grados en zonas del centro y sur del país y en puntos de la depresión del Ebro, en las primeras horas de la tarde.
Durante la jornada, “tampoco se pueden descartar los 40 grados en puntos del valle del Guadalquivir”, ha detallado el portavoz, quien ha incidido en que el día electoral se encuentra dentro de la canícula, que es como se denomina al periodo más cálido del año, y que comprende aproximadamente desde el 15 de julio al 15 de agosto.
