Dakar, 9 abr (EFE).- El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, garantiza que el plan de vacunación contra el coronavirus previsto en España se cumplirá tanto contando con las dosis de AstraZeneka como sin ellas y, por tanto, a finales de septiembre podrá ya estar inmunizada la práctica totalidad de la población.
Sánchez ha ratificado las previsiones del Gobierno para el proceso de vacunación en una conversación informal con los periodistas que cubren la gira que está realizando por África y que concluye este viernes en Senegal.
Las decisiones que se están sucediendo en torno a la inoculación de la vacuna de AstraZeneka y que han llevado ahora al Ministerio de Sanidad y a las comunidades a permitir sólo su uso en personas de entre 60 y 69 años, no van alterar los planes del Ejecutivo, según Sánchez.
A la espera de las medidas que se puedan adoptar en el futuro sobre esta vacuna, el presidente del Gobierno considera que, aunque hubiera que prescindir totalmente de ella, eso no influiría en el cumplimiento de los plazos previstos.
De acuerdo con sus cifras, si se cuenta con AstraZeneka, España tendría 87 millones de dosis de vacunas desde abril hasta septiembre, y sin ella serían 78 millones.
Una diferencia de nueve millones que no impediría que la mayoría de la población hubiera recibido ya la pauta completa (de una o dos dosis según la vacuna de que se trate) a finales de septiembre.
Por ello, Sánchez ve posibilidades de mejorar incluso la previsión que ratificó el pasado martes en su comparecencia tras la reunión del Consejo de Ministros de que a finales de agosto estarían vacunados el 70 por ciento de los ciudadanos.
«El calendario que di es el más conservador», asegura el jefe del Ejecutivo.
Además, recalca que si no se hubiera podido vacunar con AstraZeneka en el primer o el segundo trimestre del año, sí habría afectado a los planes previstos, pero ya no ahora cuando se usan también las de Pfizer y Moderna y se está a la espera de otras como las de Jansen (que estará disponible a partir de mediados de este mes) y la de CureVac.
Respecto a los problemas que está habiendo con la vacuna de AstraZeneka, remite a las decisiones de la Agencia Europea del Medicamento y recalca que hay que analizar riesgos y beneficios.
Sánchez reitera asimismo que el Gobierno trabaja con la intención de que, a partir del 9 de mayo, ya no haya estado de alarma porque el proceso de vacunación se acelera y ya no es necesario el mismo nivel de restricciones.
Pero aunque ese es el escenario previsto, defiende esperar a conocer la evolución de los datos y los posibles efectos en ellos que puede haber tenido la Semana Santa.
Recuerda que hay territorios con una incidencia mayor, como Madrid, donde el número de camas covid en los hospitales dobla la media, y afirma que el problema de esta comunidad es que no registra todos los contagios.
Ante la posibilidad de que algunos territorios soliciten seguir manteniendo restricciones una vez que concluya el estado de alarma, emplaza a esperar la evolución de los acontecimientos.
Pero sí hace hincapié en que es muy difícil convertir algo extraordinario en ordinario.
Sánchez destaca también la rendición de cuentas que ha ido dando el Gobierno en todo momento durante los estados de alarma y recuerda que el próximo 14 de abril volverá a comparecer en el Congreso.
Frente a ello, señala que le gustaría saber cuántos presidentes autonómicos han comparecido en sus respectivos parlamentos para dar cuenta de la cogobernanza durante la pandemia.