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Suspendido el juicio de paternidad de Julio Iglesias por una prueba de ADN
Publicado
hace 5 añosen
El valenciano Javier Sánchez, que reclama ser reconocido como hijo de Julio Iglesias, ha lamentado a su salida de la Ciudad de la Justicia de València que se haya suspendido la vista en la que debía esclarecerse la supuesta paternidad del cantante. «Estoy luchando contra un gigante», ha dicho Sánchez, que ha subrayado que es «realista» y sabe «al tipo de persona» al que se «enfrenta». El valenciano ha admitido que el proceso se le está haciendo «más largo que un día sin pan», aunque tiene fuerzas «hasta el final».
Así se ha pronunciado el demandante a su salida de los juzgados valencianos, donde se ha iniciado este jueves la vista que debe dilucidar sobre la petición del reconocimiento de paternidad y que el titular del Juzgado de Primera Instancia número 13 ha suspendido para decidir sobre las dos cuestiones planteadas por Fernando Falomir, abogado defensor de Julio Iglesias.
En la sesión de este jueves, Falomir ha planteado que se trata de una cuestión ya juzgada, tal y como ya ocurriera en el juicio que sobre los mismos hechos se iba a desarrollar en Málaga, dado que, tras ser convocadas las partes, se suspendió para determinar si se trataba de un asunto ya juzgado y así se consideró, en una decisión que posteriormente ratificó la Audiencia Provincial.
Sin embargo, en esta ocasión, la defensa de Javier Sánchez cuenta con una novedad. Una prueba de ADN obtenida con restos que un detective privado obtuvo de un termo de uno de los hijos de Julio Iglesias, Julio José, y que indica que este y Sánchez serían hermanos en un porcentaje cercano al 97%.
La no validez de esta prueba es la segunda de las cuestiones planteadas por Falomir y sobre la que el juez se pronunciará previsiblemente en un plazo de cinco días. Así, en esta sesión únicamente se han planteado estas peticiones y sobre esta última ha comparecido el detective que hizo el seguimiento.
Por su parte, el letrado del demandante, Fernando Osuna, ha explicado a los medios que en la vista «no se ha analizado el fondo del asunto» porque la cuestión pasa por «si se puede destruir la cosa juzgada o no», sobre lo que considera que en este caso «no prevalece aquí, porque estamos hablando de derechos fundamentales». «Prevalece averiguar la verdad científica frente a cuestiones formales. El juzgado ha tenido dos años para estudiar si hay cosa juzgada. Es una incongruencia de carácter procesal», ha denunciado.
Osuna ha defendido que Javier Sánchez «es hijo genéticamente y biológicamente de Julio Iglesias» y, por tanto, «no tendría sentido que por cuestiones procedimientales se dijera por la justicia que no». «Eso es igual que un juez diga que el río Turia no pasa por València, pero si es que pasa por València», ha puesto como ejemplo.
En conclusión, la defensa de Sánchez considera que el juez «debe mantener su postura» porque, ha añadido, «no tendría sentido que hace casi dos años dijera que no había cosa juzgada y ahora diga todo lo contrario», puesto que «no ha habido ninguna circunstancia sorpresiva, radical o novedosa» que haya provocado no reabrir el caso.
«SON DEL MISMO PADRE, LO DICE EL LABORATORIO»
Asimismo, ha puesto en valor la prueba de ADN que «entre hermanos puede dar hasta un 97 por ciento» y en este caso «da un 96,8». Por esta razón, ha destacado el hecho de que Sánchez y Julio José Iglesias «son del mismo padre» y «eso lo dice el laboratorio» y ha afirmado que Julio Iglesias «se esconde» y «se niega a hacerse la prueba».
En cuanto al recipiente, similar a un termo, del que se extrajo el ADN de Julio José Iglesias, ha sostenido que fue obtenido en un sitio público –en una playa en la que el hijo del famoso cantante practicaba windsurf– y que está grabado cómo miró la botella que se le había caído y decidió «abandonarla». Por ello, Osuna argumenta que la obtención de la prueba está «amparada constitucionalmente».
«UN PASITO MÁS»
A su salida de la Ciudad de la Justicia de la capital valenciana, Javier Sánchez ha expresado que esta vista supone «un pasito más», aunque ha agregado que «hay que esperar» y «en cinco días tendremos resultados».
El presunto hijo de Julio Iglesias ha afirmado que está «luchando contra un gigante» pero, pese a ello, quiere «confiar en la justicia»: «Yo voy con la verdad y tengo la conciencia tranquila. Solo me queda esperar», ha manifestado.
Sin embargo, ha reconocido que este proceso se le está haciendo «más largo que un día sin pan», al tiempo que ha reivindicado que «en la justicia hay que creer siempre, y luego en Dios». «Todavía me quedan fuerzas, hasta el final», ha enfatizado.
Antes de subirse al coche que le esperaba para abandonar los juzgados y entre gritos de ánimo y miradas de los curiosos congregados, Sánchez ha concluido: «Espero que la justicia haga honor a su nombre y por fin podamos cerrar un capítulo que se está haciendo muy largo».
Javier Sánchez fue reconocido en 1992 por un juzgado de València como hijo del cantante. Sin embargo, posteriormente la Audiencia provincial, en una sentencia ratificada por el Supremo, revocó esa declaración al entender que el hecho de que Julio Iglesias no se hubiera sometido a la prueba de paternidad no era motivo suficiente para declarar esa paternidad.
El valenciano Javier Sánchez, que reclama ser reconocido como hijo de Julio Iglesias, ha lamentado a su salida de la Ciudad de la Justicia de València que se haya suspendido la vista en la que debía esclarecerse la supuesta paternidad del cantante. «Estoy luchando contra un gigante», ha dicho Sánchez, que ha subrayado que es «realista» y sabe «al tipo de persona» al que se «enfrenta». El valenciano ha admitido que el proceso se le está haciendo «más largo que un día sin pan», aunque tiene fuerzas «hasta el final».
Así se ha pronunciado el demandante a su salida de los juzgados valencianos, donde se ha iniciado este jueves la vista que debe dilucidar sobre la petición del reconocimiento de paternidad y que el titular del Juzgado de Primera Instancia número 13 ha suspendido para decidir sobre las dos cuestiones planteadas por Fernando Falomir, abogado defensor de Julio Iglesias. Cuando abandonaba los juzgados, varias personas le han deseado suerte y le han dicho que va a «ganar», mientras que otro le ha dicho «¡Vamos Julio!», a lo que este ha respondido: «Me llamo Javier».
En la sesión de este jueves, Falomir ha planteado que se trata de una cuestión ya juzgada, tal y como ya ocurriera en el juicio que sobre los mismos hechos se iba a desarrollar en Málaga, dado que, tras ser convocadas las partes, se suspendió para determinar si se trataba de un asunto ya juzgado y así se consideró, en una decisión que posteriormente ratificó la Audiencia provincial.
Sin embargo, en esta ocasión, la defensa de Javier Sánchez cuenta con una novedad. Una prueba de ADN obtenida con restos que un detective privado obtuvo de un termo de uno de los hijos de Julio Iglesias, Julio José, y que indica que este y Sánchez serían hermanos en un porcentaje cercano al 97 por ciento.
La no validez de esta prueba es la segunda de las cuestiones planteadas por Falomir y sobre la que el juez se pronunciará previsiblemente en un plazo de cinco días. Así, en esta sesión únicamente se han planteado estas peticiones y sobre esta última ha comparecido el detective que hizo el seguimiento.
Por su parte, el letrado del demandante, Fernando Osuna, ha explicado a los medios que en la vista «no se ha analizado el fondo del asunto» porque la cuestión pasa por «si se puede destruir la cosa juzgada o no», sobre lo que considera que en este caso «no prevalece aquí, porque estamos hablando de derechos fundamentales». «Prevalece averiguar la verdad científica frente a cuestiones formales. El juzgado ha tenido dos años para estudiar si hay cosa juzgada. Es una incongruencia de carácter procesal», ha denunciado.
Osuna ha defendido que Javier Sánchez «es hijo genéticamente y biológicamente de Julio Iglesias» y, por tanto, «no tendría sentido que por cuestiones procedimientales se dijera por la justicia que no». «Eso es igual que un juez diga que el río Turia no pasa por València, pero si es que pasa por València», ha puesto como ejemplo.
En conclusión, la defensa de Sánchez considera que el juez «debe mantener su postura» porque, ha añadido, «no tendría sentido que hace casi dos años dijera que no había cosa juzgada y ahora diga todo lo contrario», puesto que «no ha habido ninguna circunstancia sorpresiva, radical o novedosa» que haya provocado no reabrir el caso.
«SON DEL MISMO PADRE, LO DICE EL LABORATORIO»
Asimismo, ha puesto en valor la prueba de ADN que «entre hermanos puede dar hasta un 97 por ciento» y en este caso «da un 96,8». Por esta razón, ha destacado el hecho de que Sánchez y Julio José Iglesias «son del mismo padre» y «eso lo dice el laboratorio» y ha afirmado que Julio Iglesias «se esconde» y «se niega a hacerse la prueba».
En cuanto al recipiente, similar a un termo, del que se extrajo el ADN de Julio José Iglesias, ha sostenido que fue obtenido en un sitio público –en una playa en la que el hijo del famoso cantante practicaba windsurf– y que está grabado cómo miró la botella que se le había caído y decidió «abandonarla». Por ello, Osuna argumenta que la obtención de la prueba está «amparada constitucionalmente».
«UN PASITO MÁS»
A su salida de la Ciudad de la Justicia de la capital valenciana, Javier Sánchez ha expresado que esta vista supone «un pasito más», aunque ha agregado que «hay que esperar» y «en cinco días tendremos resultados».
El presunto hijo de Julio Iglesias ha afirmado que está «luchando contra un gigante» pero, pese a ello, quiere «confiar en la justicia»: «Yo voy con la verdad y tengo la conciencia tranquila. Solo me queda esperar», ha manifestado.
Sin embargo, ha reconocido que este proceso se le está haciendo «más largo que un día sin pan», al tiempo que ha reivindicado que «en la justicia hay que creer siempre, y luego en Dios». «Todavía me quedan fuerzas, hasta el final», ha enfatizado.
Antes de subirse al coche que le esperaba para abandonar los juzgados y entre gritos de ánimo y miradas de los curiosos congregados, Sánchez ha concluido: «Espero que la justicia haga honor a su nombre y por fin podamos cerrar un capítulo que se está haciendo muy largo».
Javier Sánchez fue reconocido en 1992 por un juzgado de València como hijo del cantante. Sin embargo, posteriormente la Audiencia provincial, en una sentencia ratificada por el Supremo, revocó esa declaración al entender que el hecho de que Julio Iglesias no se hubiera sometido a la prueba de paternidad no era motivo suficiente para declarar esa paternidad.
Fuente: Europa Press