No obstante, Tamayo ha señalado que durante este verano habría que hablar «de calor más de que lluvias».
Respecto a los incendios forestales, ha señalado que, aunque habrá días soleados y con viento, la lluvia humedecerá el suelo y será más difícil la propagación del fuego, y ha subrayado que se ha reducido el déficit hidrológico a más de la mitad, desde el 41 por ciento a principios de mayo hasta el 20 % a principio de junio.
Preguntado por si este verano tendremos vientos de poniente y noches tropicales, ha indicado que si se mantiene la tendencia los seguiremos teniendo, aunque ha matizado que ha habido días sin poniente pero si de calor y otros con poniente y un poco más fríos.
Núñez ha recordado que la temperatura del mar es uno de los factores que darán lugar a un verano cálido, aunque ha señalado que en estos momentos se encuentra entre los 22 y 23 grados, dos más de los que corresponde a junio y con brisas en el litoral, y el pasado año se llegó a los 30 grados, una cifra «excepcional, de récord».