Castelló/València 22 feb (EFE).- El president de la Generalitat, Ximo Puig, ha anunciado este lunes que, si continúa la tendencia a la baja de la incidencia de casos de covid, la reapertura de las terrazas en la hostelería podría ser una de las medidas que se podrían adoptar a partir del 1 de marzo, «pero no hay que especular».
Así lo ha explicado Puig tras ser preguntado por los medios sobre la apertura de la hostelería a partir del 1 de marzo, fecha en la que concluye la prórroga de las actuales restricciones, al tiempo que ha avanzado que este jueves se reúne la Comisión Interdepartamental de la Generalitat para la Prevención y Actuación ante la Covid-19 y en ella «se tomarán las decisiones».
«Si continúa la tendencia de bajada de la incidencia lo lógico será flexibilizar las restricciones, pero no cabe especular. Debemos adoptar estas decisiones con rigor, precaución y prudencia», ha manifestado el president.
Puig ha expresado que «las restricciones han demostrado ser útiles para frenar la pandemia» y ha recordado que la Comunitat «ha bajado más de 1.000 puntos en unas pocas semanas de incidencia acumulada, pero todavía estamos alrededor de 300, y nuestro objetivo es llegar a 50».
«Estamos mejor, pero no estamos bien», ha reivindicado el president de la Generalitat, quien ha pedido «prudencia» en la desescalada.
«Existe la incertidumbre de una cuarta ola por la cepa británica que podría complicar la salida de la pandemia, y hasta que no tengamos garantías de superación de la pandemia, creo que es importante que trabajemos juntos», ha continuado.
En cuanto a la vacunación, Puig ha asegurado que esta semana se empezará a vacunar a los mayores de 80 años y que en las próximas semanas se estudiará el plan de infraestructuras para que esté «todo preparado» cuando se tenga las dosis para el plan de vacunación masiva a partir de abril.
Los hosteleros rechazan reabrir sus establecimientos únicamente con terrazas
Por su parte la Coordinadora Empresarial de Ocio y Hostelería de la Comunidad Valenciana (CEOH) rechaza una apertura parcial, a partir del próximo lunes, que sólo permita levantar la persiana a los locales que cuentan con terraza.
Para la CEOH, esto significaría llegar al mes de abril con la quiebra de más de 8.000 establecimientos sin terraza y apuesta por una desescalada que permita abrir los interiores de forma viable y fórmulas que permitan garantizar la máxima seguridad.
Esta organización ha trasladado su posición por escrito a la consellera de Sanidad y el secretario autonómico de Turismo, Frances Colomer.
La Coordinadora ha vuelto a reclamar al Consell que le levante el veto y «castigo por ser una de las voces del sector más críticas» y ha insistido en pedir su integración a la mesa de negociación.
“Es inconcebible que ahora dejen fuera a una organización de carácter autonómico, constituida formalmente, y que representa a 16 asociaciones de las tres provincias”, señalan.
De la misma manera, reprochan a los miembros del Consell que lancen «globos sonda» de cómo y cuándo será la reapertura, a través de los medios de comunicación sin haber consensuado ni concretado una propuesta clara ni tomado una decisión definitiva, ni en la citada mesa de diálogo ni en el seno del mismo Consell».
“En estos momentos, la falta de decoro por parte de los políticos, actuando a golpe de titulares, está generando una enorme preocupación y desesperación entre los hosteleros, para quienes las decisiones que se tomen los próximos días serán claves».
Ante «el ninguneo» por parte del ejecutivo valenciano, la Coordinadora presentará mañana, por registro de entrada, sus propuestas para que «sentados o no en la mesa» se escuchen sus propuestas.
Unas propuestas, avanzan, que pasan por la reapertura de terrazas con un criterio de aforos unificados en toda la Comunitat Valenciana, que no cree agravios comparativos ni discriminaciones y la apertura de los interiores de los locales utilizando herramientas tecnológicas para que los espacios cerrados sean seguros.
Además, reclaman «la inminente aprobación de una segunda fase del Plan Resistir, con una dotación de 500 millones de euros para el sector de la hostelería y el ocio, así como campañas de comunicación para recuperar la confianza del público tras meses con el foco de los contagios puesto en los establecimientos hosteleros».