València, 10 feb (EFE).- La ciudad de València pondrá en marcha un sistema inteligente de cierre electrónico en los contenedores marrones, que identificará al usuario mediante una tarjeta o aplicación y permitirá reducir el porcentaje de materiales impropios que se depositan.
La policía de la basura: detrás de los que no reciclan
La Junta de Gobierno Local ha aprobado este viernes aceptar la ayuda de la Unión Europea para el proyecto -que asciende a 700.000 euros de los fondos europeos Next Generation-, que cuenta con un presupuesto de 3,7 millones de euros y se implementará por fases, según fuentes municipales.
El vicealcalde y concejal de Ecología Urbana, Sergi Campillo, ha indicado que este sistema, además de mejorar la separación de residuos orgánicos, abre la posibilidad de «premiar los comportamientos positivos» de la ciudadanía, como sucede cuando el vecindario acude a los ecoparques de la Entidad Metropolitana de Tratamiento de Residuos (EMTRE).
Campillo ha informado asimismo de que el Ayuntamiento también ha obtenido otra subvención comunitaria para comprar 40 compostadoras de biorresiduos, que serán distribuidas entre comunidades escolares y gestoras de huertos urbanos.
Los fondos Next Generation aportan 25.109 euros de una inversión total de 74.052 euros y esta medida facilitará el tratamiento «in situ» de la basura y ahorrará desplazamientos, ha añadido.
Estas dos líneas de ayudas se suman a los 100.000 euros que el Consejo Europeo de Innovación concedió a València después de quedar entre las tres ciudades finalistas para ser Capital Europea de la Innovación 2022.
Como ya se hizo en 2020, el premio se destinará a la innovación, en línea con los objetivos de las Missions València 2030.
Por otro lado, Campillo ha recordado que a partir de la semana que viene ya no será obligatorio solicitar cita previa y tampoco habrá limitación de aforo para acceder a los servicios municipales de atención a la ciudadanía, dos medidas que se establecieron a causa de la pandemia. EFE
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