València, 3 ago (EFE).- La Conselleria de Sanidad prepara un protocolo específico sobre pinchazos para sumisión química tras los casos de denuncias que se están registrando, y que complementará el actual Protocolo de atención integral, sanitaria y judicial a víctimas de agresiones sexuales de la Comunitat Valenciana.
Sanidad ha constatado algunos casos de mujeres que han acudido a centros hospitalarios de la Comunitat reportando haber sentido un pinchazo, según han indicado a EFE fuentes de la Conselleria.
En estos momentos se aplica el Protocolo de atención a víctimas de agresiones sexuales de 2019, que recoge todos los casos de delitos contra la libertad e indemnidad sexual (agresión sexual, abuso y acoso a mayores y menores de 18 años), los órganos competentes jurídicos, policiales y de apoyo a las víctimas, los derechos de estas, las obligaciones de quienes intervienen a nivel sanitario y judicial y el procedimiento de asistencia sanitaria hospitalaria, extrahospitalaria, atención a menores y el procedimiento para denunciar una agresión sexual.
En él también se contempla la asistencia médica inicial preferente cuando hay sospecha de intoxicación o uso de sustancias facilitadoras de asalto sexual o drogas de sumisión química, en cuyo caso se debe comunicar al personal médico-forense para que valore la necesidad de que se obtengan muestras de sangre y orina antes de su llegada y asegurando la cadena de custodia de las mismas.
COLEGIO DE ENFERMERÍA
El Colegio de Enfermería de Valencia ha pedido a Sanidad que acelere el protocolo contra la sumisión química ante el «alarmante aumento de denuncias de pinchazos» y la concentración durante el mes de agosto de fiestas populares y festivales de música en las que se produce aglomeración de jóvenes.
Este Colegio considera que el documento es imprescindible tanto para las víctimas de las agresiones porque definirá cómo actuar en caso de que una mujer requiera asistencia, como para los enfermeros y el resto de profesionales sanitarios, según recoge en un comunicado, en el que añade que debe establecerse una coordinación muy estrecha entre los servicios sanitarios y los judiciales para descartar «situaciones de psicosis o bulos».
Desde el Colegio de Enfermería de Valencia se pide que se acorten los plazos para que la citada guía llegue antes de que finalice el verano y que se amplíe el Protocolo de Atención Integral, Sanitaria y Judicial a Víctimas de Agresiones Sexuales de la Comunitat Valenciana con la inclusión de la nueva realidad de estupefacientes que se utilizan para la sumisión química como la burundanga (escopolamina) o el éxtasis líquido.
Alerta de que en menos de 48 horas la Comunitat Valenciana «ha registrado al menos siete denuncias, según publican varios medios de comunicación», y aunque, hasta la fecha, todas las víctimas que han acudido a un hospital han obtenido análisis limpios, solicita mayor celeridad en la elaboración del protocolo por las aglomeraciones de jóvenes.
Según han informado a EFE fuentes de la Guardia Civil y la Policía Nacional, se han iniciado investigaciones tras recibir varias denuncias de mujeres de posibles casos de sumisión química por pinchazos sufridos en espacios de ocio en Xàtiva (Valencia) y en La Vall d’Uixó (Castellón).
El Colegio de Enfermería también pide que se contemple la enfermera de zona de ocio (o de discoteca) como figura para dar cobertura de cuidados a este tipo de atenciones, y reclama su presencia en las reuniones de trabajo de formación con los empresarios del sector del ocio, además de participar en la definición del Plan Director para centros educativos (con la enfermera escolar) en los que se debe formar a los jóvenes y prevenir cualquier tipo de agresiones sexuales.
EMPRESARIOS OCIO
La Federación de Ocio (Fotur) ha asegurado a EFE que también está a la espera de una guía específica para saber cómo actuar ante los casos de pinchazos, y ha recordado que en los locales de ocio los profesionales de seguridad privada ya prestan atención y protección a la víctima ante cualquier incidente.
Hasta el momento, Fotur no tiene conocimiento de ningún caso de pinchazo, según se ha puesto de manifiesto en las últimas reuniones mantenidas entre sus miembros.
Fotur recuerda que actualmente se registran las bolsas de los asistentes a los locales por medidas de seguridad y con el fin de evitar la entrada de cualquier elemento que pueda ser peligroso.
«Los espacios de ocio deben ser seguros, no de miedo», ha asegurado a EFE su presidente, Víctor Pérez, que ha insistido en que los guardias de seguridad privada contratados por las empresas de ocio ofrecen atención y protección a las víctimas.
PROTOCOLO DE ATENCIÓN
El Colegio de Enfermería de Valencia ha señalado que son las enfermeras los profesionales que deben tomar las muestras para los análisis toxicológicos (con muestras de sangre y orina) y para detectar la exposición a material biológico.
Y por ello, deben conocer de primera mano el protocolo, que también debe incluir profilaxis de posexposición (PEP) –tomar medicamentos contra el VIH dentro de las 72 horas posteriores a una posible exposición a hepatitis C (VHC), sida (VIH) y otras enfermedades que se puedan haber contraído por el estado de la aguja-.