Fallas
El Ayuntamiento de València presenta las bases para la contratación de las fallas municipales de 2019
La Junta de Gobierno Local del Ayuntamiento de València ha aprobado este viernes las bases para la contratación de las fallas municipales del año que viene, consensuadas por tercer año consecutivo con el Gremio de Artistas Falleros. El concejal de Cultura Festiva, Pere Fuset, ha destacado el mantenimiento de la apuesta por los materiales sostenibles y ha confirmado que continuará siendo un jurado despolitizado el encargado de elegir los proyectos entre todos los que se presenten entre los próximos 23 de abril y 7 de mayo.
Fuset ha destacado la importancia de aprobar “unas bases consensuadas un año más con el Gremio de Artistas Falleros” en las que habrá “una concepción de la falla como arte y elemento central de la fiesta”. Además, ha indicado que el presupuesto aumentará hasta los 205.000 euros para la falla grande y hasta los 28.500 euros para la falla infantil. Este incremento ha permitido cubrir algunas de las reivindicaciones históricas de las artistas y los artistas falleros, como la cobertura de los gastos de la grúa para la plantà de la falla grande o los elementos decorativos de las dos fallas municipales.
Este año, el jurado que elija las fallas municipales de 2019 volverá a ser un jurado técnico despolitizado, con representantes del mundo artístico, fallero y creativo, “en cuya constitución queremos que se procure la paridad de género”. Estas serán las terceras fallas seleccionadas por un jurado de estas características con el objetivo de poner en valor la selección de las fallas según criterios artísticos. En los últimos años los han integrado representantes propuestos por entidades como la Interagrupación, el Círculo de Bellas Artes o la Federación de Fallas Innovadoras, entre otras.
Fuset también ha destacado que el proceso de valoración de artistas, trayectorias y proyectos sustituye la antigua presentación de bocetos, con grandes costes para los artistas interesados en plantar las fallas municipales. “No solo solucionamos un problema que lamentaban continuamente las y los artistas falleros, sino que, además, les damos la oportunidad de exponer y defender sus proyectos ante los jurados que tienen que seleccionar las próximas fallas municipales”, ha afirmado Fuset.
El pasado 28 de junio, Lucía Andrés Zarapico y Javier Donat Sendra unieron sus vidas en una boda inolvidable, repleta de detalles con historia, amor por las tradiciones valencianas y un estilo muy personal. Una celebración que combinó emoción, elegancia y raíces profundas en cada gesto.
Ceremonia religiosa en la Basílica San Vicente Ferrer
El enlace tuvo lugar en la Basílica San Vicente Ferrer de Valencia, un lugar muy especial para la pareja. Javier es antiguo alumno del colegio Dominicos, y el sacerdote que ofició la ceremonia, el Padre Antonio Roy, es amigo cercano tanto de él como de su padre. Además, el hermano de Lucía también se casó allí hace una década, haciendo aún más simbólico este lugar.
La ceremonia fue amenizada por Harmonic Trio y una soprano, culminando con el Himno de la Coronación de la Virgen de los Desamparados, un homenaje a la patrona de Valencia. El ramo de novia, una delicada composición de azucenas y rosas rosas realizado por El Atelier de la Flor, incluía una medalla de cerámica de la Virgen elaborada por By Paloma, añadiendo un toque espiritual y artístico.
La madrina, Antonia Sendra (madre del novio), y el padrino, Manuel Andrés (padre de la novia), acompañaron a la pareja en uno de los momentos más especiales de sus vidas. Los pajes, Lucas Fernández, Ana Andrés (encargada de los anillos) y Manu Andrés (arras), aportaron ternura y tradición. Las arras de oro utilizadas fueron las mismas que usaron los padres de la novia hace 48 años.
Celebración en la Finca del Canónigo (Miguel Martí)
Tras la emotiva ceremonia, la celebración continuó en la espectacular Finca del Canónigo, de la mano del reconocido chef Miguel Martí, donde más de 200 invitados compartieron la alegría de la pareja.
Destacó la presencia de casi 100 falleros de la Falla del Regne, a la que ambos pertenecen, así como amigas de la corte infantil de Lucía y Falleras Mayores Infantiles de Valencia. No faltó su Fallera Mayor, Elena Muñoz, junto a toda su familia.
Uno de los momentos más impactantes fue el castillo de fuegos artificiales, que iluminó el cielo en honor a los novios. El primer baile se realizó al ritmo de «Noche de bodas» de Sabina y Serrat, una elección que emocionó a todos los presentes, dando inicio a una fiesta vibrante bajo el hashtag que lo resume todo: #tincelcorencésflama.
Un look de novia muy personal
Uno de los elementos más especiales del gran día fue el vestido de Lucía, diseñado por ella misma junto al diseñador , recientemente fallecido, Enrique Marzal, en un proceso lleno de cariño y complicidad. Las telas y acabados fueron seleccionados con esmero y confeccionados con amor por Pilar y Amparo Bonilla, quienes también guardaban un vínculo especial con Enrique.
La imágen de la boda, una simpática caricatura creada por los artistas Ceballos y Sanabria, aportó un toque divertido y único a toda la papelería y decoración.
Luna de miel en Nueva York y Miami
Tras la boda, la pareja emprendió su luna de miel en Nueva York y Miami, comenzando esta nueva etapa con la misma ilusión y energía que marcaron su gran día.
Las imágenes que inmortalizan cada instante mágico de esta boda son obra del equipo de Por Parte de la Novia, además de algunas fotos particulares que capturan la esencia de un día tan especial.
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