(Lluís Sanchis).- El aumento exponencial de casos de coronavirus en la Comunitat Valenciana en la última semana apuntaba a una vuelta a las restricciones. Ximo Puig ya lo advirtió ayer, y lo ha confirmado en la rueda de prensa posterior a la reunón Interdepartamental para coordinar las medidad anticovid.
El president de la Generalitat ha expuesto las nuevas restricciones que afectarán a la Comunitat Valenciana desde el próximo viernes hasta el 25 de julio, algunas de las cuáles han de ser aprobadas por el TSJCV al afectar derechos fundamentales
El president ha hecho un llamamiento a los padres para explicar a la generación más joven la urgencia de la situación. Además, la consellera de Sanitat, Ana Barceló, ha recordado que 2 de cada 3 nuevos contagios se producen entre jóvenes de hasta 30 años. Ambos han señalado la necesidad de retomar el uso de la mascarilla.
Las medidas que afectan a derechos fundamentales se presentarán mañana por la mañana ante el TSJCV, y se espera que todas entren en vigor mañana viernes.
Cierre del ocio nocturno y de los bares a las 0.30 hasta el 25 de julio
La Comunitat Valenciana cerrará, a partir de este sábado, el ocio nocturno, que solo podrá abrir en las condiciones de los bares y cafeterías, y pedirá el aval del Tribunal Superior de Justicia para recuperar el toque de queda entre la 01.00 y las 06.00 horas y limitar las reuniones sociales.
Las medias, que entrarán en vigor la medianoche del viernes al sábado y permanecerán hasta el 25 de julio, contemplan también el adelanto en media hora del cierre de la hostelería, hasta las 00.30 horas, con un máximo de diez personas en el exterior y seis en interior (ahora eran 10 en ambos espacios).
LIMITAR LA MOVILIDAD
La intención del Consell es limitar al máximo las actividades que están generando una mayor propagación del virus en estos momentos, especialmente entre la gente joven, por lo que solicitará al TSJCV autorización para poder limitar la movilidad entre una y las seis de la madrugada.
Se trata, según Puig, de una «restricción selectiva, acotada a aquellos municipios con más riesgo epidémico», según «criterios objetivos y revisables de incidencia y positividad», que en estos momentos afectaría a unos 40 municipios que no ha detallado a la espera de recibir el visto bueno del tribunal.
El Consell también pedirá el aval de la justicia para limitar las reuniones sociales a un máximo de 10 personas en toda la Comunitat Valenciana, tanto en el ámbito privado como en el público, donde en estos momentos no existe limitación.
OCIO NOCTURNO Y HOSTELERÍA
Acompañado por la consellera de Sanidad, Ana Barceló, Puig ha lamentado «profundamente» las nuevas medidas que afectan a sectores que están haciendo un sacrificio enorme, pero ha destacado que una parte fundamental de los brotes tiene su origen en el ocio, tanto reglado como no reglado.
Así, el Consell ha acordado cerrar el ocio nocturno, que solo podrá abrir en las condiciones de los bares y cafeterías, y tendrá que cerrar a las 00.30 horas.
Ha señalado que para compensar a este sector, el pleno del Consell aprobará este viernes extender las ayudas al ocio nocturno con 4,8 millones más, con lo que el total destinado a este sector para paliar los efectos de la crisis de la pandemia será de 12,8 millones. Unas medidas que han sido muy criticadas por el sector que han clamado contra Puig.
La hostelería adelantará a partir del sábado 30 minutos su cierre, con lo que se dejará de servir a las 00.00 horas y se cerrará a las 00.30 horas, y se pondrá en marcha una campaña para aumentar la ventilación de bares, restaurantes y otros espacios de uso público, pues se trata de algo «crucial» para evitar contagios, según Puig.
El Consell ha acordado también reducir el aforo de los espectáculos masivos, que pasará de 4.000 a 3.000 personas en espacios abiertos, y de 3.000 a 2.000 en espacios cerrados, y ha recordado que no están permitidas las fiestas populares, los pasacalles ni los desfiles.
LUCHA CONTRA EL BOTELLÓN
El president ha destacado que lo que tiene efecto frente a la pandemia «no son las medidas en sí, sino su cumplimiento», y ha hecho un llamamiento a la sociedad en general, pero también a los jóvenes y a las familias, porque, según ha advertido, «la fiesta de una noche puede tener una resaca toda la vida».
En este sentido, ha anunciado que el pleno del Consell aprobará este viernes dos modificaciones legislativas para que el botellón sea considerado «falta grave» y para reducir el horario de la venta de alcohol y fijarlo hasta las ocho de la tarde, dos horas antes que ahora.
Además, en una reunión que tendrán mañana con la Delegación del Gobierno y los municipios pedirán que las fuerzas y cuerpos de seguridad actúen con la máxima vigilancia para el control de estas medidas, con el objetivo de que «nadie pueda hacer botellones en la calle» y «el que lo haga, que le salga caro».
Puig ha asegurado que la Generalitat no mirará «al lado» en esta pandemia sino «de frente», y «quiere llegar al límite de sus competencias» porque, según ha dicho, «no tener una actitud contundente ahora» podría «arruinar los próximos meses» y «sería irresponsable».
El president ha destacado que estas medidas se complementan con un refuerzo del personal sanitario, que incluye 7.300 nuevos contratos del Plan de Vacaciones y de refuerzo de verano, y la renovación de 6.053 contratos covid.
Además, ha anunciado la contratación de 450 rastreadores para reforzar el seguimiento de los casos y aliviar la carga de trabajo de los equipos de atención primaria, a los que se sumarán 50 rastreadores del Ejército.