La vida y la carrera de Marina Barceló, acróbata mallorquina de 27 años, se truncaron el pasado sábado en Bautzen, al este de Alemania. La joven artista, contratada para la gira del Paul Busch Circus, perdió la vida al precipitarse desde unos cinco metros de altura durante su número de trapecio. El accidente ocurrió a las 17.45 horas, ante casi un centenar de espectadores, muchos de ellos familias con niños, que presenciaron la escena en estado de shock.

Marina se encontraba realizando una actuación en solitario sin cuerda de seguridad, algo permitido y habitual en artistas experimentados. Durante un salto perdió el equilibrio y cayó al suelo, muriendo en el acto sin que los equipos de emergencia pudieran salvarla.

Tras el accidente, muchas personas abandonaron la carpa del circo y regresaron a sus casas. El portavoz de la policía instó a los testigos a ponerse en contacto con la línea de atención telefónica, recalcando que, sobre todo en el caso de los niños, es importante ayudarlos antes de que se genere un trauma. Las autoridades locales activaron un dispositivo especial de apoyo psicológico para atender a los testigos y empleados del circo, con especial énfasis en los menores.

Reacciones oficiales y del sector circense

Según la policía, el circo había ofrecido su primera función el viernes y tenía previstas otras para los días posteriores. Sin embargo, ahora se da por hecho que la carpa será desmontada, tal y como apuntó el portavoz policial.

El presidente de la Asociación Alemana de Circos, Ralf Huppertz, calificó lo ocurrido de trágico accidente. “Es una experiencia terrible, un shock, sobre todo para los visitantes y los niños”, declaró. Recordó que no existen precedentes recientes de accidentes mortales de una acróbata, aunque sí lesiones graves.

Huppertz añadió que la profesión de acróbata conlleva riesgos y que, en determinadas actuaciones, no es posible garantizar la seguridad al cien por cien. “Los acróbatas asumen riesgos que ellos mismos calculan y evalúan, pero también son conscientes de ello”. Subrayó además que “en realidad, cinco metros no es una altura especial para los acróbatas, que están bien entrenados y son musculosos”. A su juicio, la mujer debió de tener muy mala suerte o caer sobre un obstáculo.

La policía clasifica el siniestro como un accidente laboral. De momento no hay indicios de culpa ajena y es poco probable que los haya, dado que suelen ser los mismos acróbatas quienes se responsabilizan del montaje de sus equipos, explicó el portavoz policial.

El alcalde de Bautzen, Karsten Vogt, también se mostró consternado: “En nombre de la ciudad, expreso mi más sincero pésame a los familiares y allegados. Nuestros pensamientos están con las familias y con todos los afectados por este grave accidente”.

La trayectoria artística de Marina Barceló

Natural de Mallorca, Marina acumulaba más de diez años de experiencia en el mundo del circo, con formación en múltiples disciplinas acrobáticas. En sus redes sociales solía compartir imágenes de sus ensayos y actuaciones; en una de sus últimas publicaciones se la veía volando sobre el trapecio con la frase: “Merece la pena cada segundo”.

Su carrera internacional la llevó a escenarios de España, Andorra, Polonia y Alemania. En su propia página web se presentaba como acróbata, bailarina y artista de circo, con especialización en funambulismo, rutinas aéreas y otras disciplinas circenses.

Además de su capacidad técnica, destacaba por su faceta interpretativa. Explicaba que disfrutaba encarnando personajes que “transportan al público a mundos mágicos”, como cuando representó a La Sirenita en un acuario real.

El impacto en la comunidad circense y en redes sociales

El fallecimiento de Marina Barceló ha sacudido a la comunidad circense alemana y española. El presidente de la Asociación Alemana de Circos volvió a remarcar que se trata de un “terrible shock” y que accidentes mortales de este tipo son extremadamente raros.

El Paul Busch Circus canceló todas sus funciones tras la tragedia y colocó un mensaje de duelo en la taquilla. En Instagram, amigos y compañeros la recuerdan como una artista apasionada, con “amor y luz” en cada actuación.

En su última publicación en redes sociales se acumulan decenas de mensajes de pésame y cariño. Algunos expresan su incredulidad: “Marina… descansa en paz, bonita. Me quedo con todos esos momentos que vivimos. Ahora brillarás aún más ahí arriba”. Otros subrayan su talento y personalidad: “Siempre recordaremos tu bonita sonrisa y tu entusiasmo por la vida” o “Vuela muy alto, Marina”.

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