Se convirtió en la década de los 80 y 90 en una de las figuras más reputadas en la televisión catalana, siendo uno de los pioneros de TV3 y brillando en programas infantiles como ‘Fes flash’, y en concursos como ‘Tres y el astrólogo’ y ‘L’auca del senyor esteve’, una obra teatral.

Toni Vall, a través de un tuit, informaba del fallecimiento del actor, aunque sin precisar las circunstancias en que se produjo su muerte. Tras ‘Tres i l’astròleg’, un concurso que contó con Joaquim Teixidor, colaboró en series de mucho éxito como ‘Farmacia de guardia’, en la que se convirtió en uno de los secundarios más conocidos por la audiencia.

No serían las únicas tramas por las que pasaría Guinyol, pues también recorrió varios rodajes, en series como ‘Los ladrones van a la oficina’, ‘Makinavaja’ y ‘Blasco Ibáñez’, aunque también participó en algunos episodios de ‘Hermanas’ y ‘Manos a la obra’. A ello le siguieron papeles secundarios en ‘Compañeros’, ‘Sin tetas no hay paraíso’, ‘Ana y los 7’, ‘La casa de los líos’ y ‘El Botones Sacarino’, lo que le hizo brillar entre los 90 y los 2000.

Una de sus apariciones más recordadas fue en los inicios de ‘La que se avecina’. En su estreno en Telecinco, Guinyol interpretó al jefe de la venta de los pisos de Mirador de Montepinar y que, como recordarán los fans de la series, le provocó un disgusto con Maritere e Izaskun, que se colaron como okupas en el bajo izquierda del edificio.