Cinco reclusos de alta peligrosidad han logrado escapar de la prisión de Vale de Judeus, situada a unos 70 kilómetros de Lisboa, Portugal. Según Luís Neves, director de la Policía Judicial, estos individuos representan una amenaza significativa debido a su violencia y habilidad para moverse con rapidez. «Haremos todo lo posible para mantenerlos bajo custodia, incluso si eso implica utilizar medidas extremas», comentó Neves. Las autoridades han intensificado los controles en carreteras y aeropuertos y están considerando el cierre de fronteras. Se han difundido imágenes de los fugitivos y se ha alertado a la población para su localización.
La fuga ocurrió el sábado por la mañana a las 10:00 hora local. La prisión de Vale de Judeus, con una capacidad para 560 internos, se convirtió en el escenario de esta operación de evasión. Los cinco reclusos, asistidos por tres cómplices que esperaban con dos vehículos, lograron escapar mientras los guardias se encontraban ocupados con las visitas matutinas. Usaron una escalera para sortear un muro de seis metros de altura, y la ausencia de los presos solo se detectó casi una hora después, cuando debían regresar a sus celdas.
Herminio Barradas, presidente de la Asociación de Jefes del Cuerpo de Guardia Penitenciario (ASCCGP), ha calificado a los fugados como «bien equipados» y «determinados», y ha señalado deficiencias en la seguridad como causantes de la fuga. La prisión no cuenta con torres de vigilancia y, en el momento de la fuga, había solo 20 guardias en servicio, la mitad del personal recomendado para prisiones de alta seguridad. Rui Abrunhosa, director general de los servicios penitenciarios, desmiente esta cifra y asegura que estaban presentes 33 guardias. La falta de detección temprana de la fuga también retrasó la alerta a las autoridades. Neves ha indicado que la identificación de los cómplices aún está en curso y advierte que la investigación es compleja y detallada.
Las autoridades han intensificado la cooperación internacional en la búsqueda de los fugitivos. Manuel Vieira, secretario general adjunto del Sistema de Seguridad Interna de Portugal, ha afirmado que se han movilizado todos los recursos disponibles y se ha alertado a las autoridades de todo el espacio Schengen y Europa, incluidas Europol e Interpol. Durante la noche del sábado, la Policía Judicial realizó un registro exhaustivo de la prisión y está investigando las comunicaciones de los fugitivos.
Identidad de los Presos Fugados
Entre los reclusos que se han evadido se encuentran Mark Camero Roscaleer, un británico de 39 años condenado por robo y secuestro; Rodolf Lohrmann, un argentino sentenciado a más de 18 años por robo, hurto y lavado de dinero, quien esperaba ser extraditado a Argentina; un georgiano con una condena de 7 años por delitos violentos, robo y falsificación; y dos portugueses condenados a 25 años por cargos de asociación criminal, tráfico de drogas, rapto, extorsión, blanqueo de capitales y secuestro.
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