Psicología
Psicología del color: ¿cómo influye lo que vistes en la percepción de los demás?
Publicado
hace 4 semanasen

La psicología del color es un campo fascinante que explora cómo los colores que elegimos para vestir pueden influir en la percepción que los demás tienen de nosotros. En este artículo, analizaremos cómo diferentes tonalidades pueden evocar emociones y comportamientos, afectando nuestras interacciones sociales y profesionales. Descubre cómo una simple elección de vestimenta puede tener un impacto significativo en la opinión de los demás y aprende a utilizar el color a tu favor.
Colores y percepciones: lo que transmiten
Cada color tiene asociaciones psicológicas específicas que provocan respuestas emocionales en quienes nos rodean. A continuación, un desglose de algunos colores y las impresiones que suelen generar:
1. Negro: Poder y sofisticación
El negro es un color atemporal que se asocia con el poder, la autoridad y la elegancia. Cuando llevas ropa negra, puedes transmitir seriedad y profesionalismo. Este color es común en entrevistas de trabajo, eventos formales y entornos donde es importante proyectar confianza y control. Sin embargo, un exceso de negro también puede dar la impresión de frialdad o inaccesibilidad.
2. Blanco: Pureza y simplicidad
El blanco simboliza limpieza, pureza y simplicidad. Usar ropa blanca transmite una imagen de frescura y claridad, lo que puede ser ideal en situaciones en las que deseas parecer accesible y confiable. El blanco es una opción popular para entrevistas de trabajo o presentaciones, ya que proyecta neutralidad y profesionalismo.
3. Rojo: Pasión y energía
El rojo es el color de la pasión, el amor y la energía. Cuando vistes de rojo, puedes atraer atención y proyectar una personalidad segura y vibrante. Este color también puede generar una percepción de poder y dominio, aunque en ocasiones puede parecer agresivo. Es ideal para situaciones en las que quieres destacar o hacer una declaración de confianza.
4. Azul: Confianza y tranquilidad
El azul es uno de los colores más usados en el ámbito profesional, ya que está asociado con la confianza, la calma y la lealtad. Vestir de azul transmite estabilidad y seguridad, lo que lo convierte en una excelente opción para entrevistas y reuniones laborales. El azul oscuro, en particular, sugiere liderazgo y autoridad, mientras que los tonos claros inspiran tranquilidad.
5. Verde: Equilibrio y serenidad
El verde está relacionado con la naturaleza, la serenidad y el equilibrio. Usar ropa verde puede hacer que los demás te vean como alguien relajado y accesible. Es un color que induce calma, por lo que es útil en situaciones donde el objetivo es reducir la tensión o mostrar empatía. Además, el verde oscuro puede simbolizar riqueza y estabilidad financiera.
6. Amarillo: Alegría y creatividad
El amarillo es el color de la alegría, la creatividad y el optimismo. Si llevas ropa amarilla, puedes proyectar una personalidad cálida y entusiasta. Sin embargo, debido a su intensidad, el amarillo puede resultar abrumador si no se usa con moderación. Es ideal para eventos donde quieras destacar por tu energía y creatividad, pero no tanto en contextos serios o formales.
7. Gris: Neutralidad y profesionalismo
El gris es un color neutral que transmite sofisticación y discreción. Usar gris en la ropa puede hacer que te perciban como una persona madura, profesional y fiable. Este color es ideal para entornos laborales donde se valora la imparcialidad, pero puede parecer aburrido si no se combina con toques de color.
8. Naranja: Entusiasmo y extroversión
El naranja está asociado con la energía, el entusiasmo y la extroversión. Cuando llevas ropa naranja, puedes parecer vibrante y accesible, pero al igual que el rojo, puede ser un color demasiado intenso si se usa en exceso. Es ideal para eventos sociales y creativos donde quieras proyectar dinamismo y confianza.
9. Púrpura: Creatividad y lujo
El púrpura es el color de la realeza y el lujo, pero también está relacionado con la creatividad. Usar ropa de color púrpura puede proyectar una imagen sofisticada y artística, lo que es ideal en entornos creativos o culturales. Sin embargo, los tonos oscuros de púrpura pueden parecer demasiado formales o distantes si no se equilibran con otros colores.
10. Rosa: Amabilidad y sensibilidad
El rosa se asocia con la amabilidad, la sensibilidad y la empatía. Al vestir de rosa, puedes proyectar una imagen cálida y acogedora, especialmente si usas tonos suaves. Es un color que funciona bien en situaciones donde quieres mostrar tu lado más accesible o emocional.
¿Cómo elegir los colores adecuados según la ocasión?
Es importante tener en cuenta el contexto cuando eliges los colores que llevarás. Para un entorno profesional, los colores más oscuros como el negro, gris o azul marino son ideales para transmitir autoridad y seriedad. En cambio, si te encuentras en un entorno creativo o social, puedes optar por colores más brillantes como el rojo, naranja o amarillo, que proyectan energía y entusiasmo.
Conclusión
Los colores no solo reflejan nuestra personalidad, sino que también afectan la forma en que los demás nos perciben. Ya sea que desees transmitir profesionalismo, energía, confianza o empatía, la elección de los colores adecuados puede marcar una gran diferencia en las impresiones que causas en los demás.
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Psicología
Señales de alarma del suicidio: cómo detectarlas y actuar a tiempo
Publicado
hace 1 semanaen
7 septiembre, 2025
Cada 10 de septiembre se conmemora el Día Internacional para la Prevención del Suicidio, una jornada que busca visibilizar un problema que sigue siendo un tabú social y que provoca cada año miles de muertes evitables en todo el mundo. En España, según los últimos datos del Instituto Nacional de Estadística, más de 4.000 personas se quitan la vida cada año, lo que convierte el suicidio en la primera causa de muerte externa, muy por encima de los accidentes de tráfico.
El lema elegido para 2025 es “Changing the Narrative on Suicide” (Cambiando la narrativa sobre el suicidio). El objetivo es claro: romper con el silencio, desmontar mitos y generar un diálogo abierto que ayude a prevenir y a acompañar a quienes atraviesan un sufrimiento intenso.
Hablar del suicidio no lo provoca: un mito que hay que superar
Los psicólogos valencianos Enric Valls y Gracia Vinagre insisten en la importancia de hablar abiertamente sobre el suicidio. Valls recalca que no se trata de inducir, sino de informar, sensibilizar y concienciar: “Hablar es abrir salidas de emergencia. Si preguntamos y escuchamos, estamos dando a la persona la oportunidad de expresar su sufrimiento”.
Por su parte, Vinagre recuerda que el mito de que hablar del suicidio aumenta el riesgo es falso: “Cuando no se habla, quienes tienen ideas suicidas no se atreven a contarlo por miedo al juicio. Eso les deja aún más aislados y sin ayuda”.
Factores de riesgo y señales de alarma
La presidenta de la Federación de Salud Mental de la Comunitat Valenciana, Rosa Bayarri, advierte que el suicidio no responde a una única causa ni afecta a un solo grupo social. Entre las situaciones con mayor prevalencia se encuentran:
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Jóvenes que no ven futuro ni oportunidades.
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Personas desempleadas o en situación de calle.
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Reclusos y personas privadas de libertad.
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Víctimas de violencia machista.
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Niños y adolescentes víctimas de acoso escolar.
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Personas que sufren homofobia, racismo o discriminación.
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Quienes padecen trastornos de salud mental graves.
Las señales de alarma incluyen cambios drásticos de conducta, aislamiento social, verbalizaciones sobre la muerte, pérdida de interés en actividades cotidianas, consumo abusivo de alcohol o drogas y conductas de riesgo.
El suicidio: acabar con el dolor, no con la vida
Enric Valls explica que, desde el punto de vista cognitivo, el suicidio no significa querer morir, sino “acabar con una situación insoportable de dolor”. Por eso, recalca, la clave está en mostrar que hay alternativas y muchas formas de aliviar el sufrimiento: ampliar redes sociales, pedir ayuda profesional o incluso ayudar a otros para encontrar sentido.
Gracia Vinagre añade que simplemente escuchar puede ser un acto preventivo: “Si alguien habla de suicidio y la otra persona responde con silencio o indiferencia, la sensación de aislamiento se multiplica. Pero si se aborda el tema con comprensión, se abre una puerta a la esperanza”.
El papel de los medios de comunicación
El Ministerio de Sanidad elaboró en 2020 una guía de recomendaciones para el tratamiento del suicidio en los medios. En ella se insiste en dos ideas clave:
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El silencio informativo no es una opción, porque invisibiliza el problema.
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El sensacionalismo tampoco lo es, ya que puede generar un efecto imitación.
Los expertos apuntan al efecto Papageno: mostrar testimonios de personas que han superado crisis suicidas y han encontrado alternativas puede tener un potente efecto preventivo.
Un problema social, no individual
Las asociaciones insisten en que el suicidio no puede entenderse como un problema exclusivo del individuo o de su familia, sino como un problema social que requiere respuestas colectivas. La prevención pasa por reforzar los servicios de salud mental, garantizar atención inmediata en situaciones de crisis y promover campañas de sensibilización permanentes.
En 2025, el Gobierno de España ha puesto en marcha el Plan Nacional de Prevención del Suicidio 2025-2027, que incluye la creación de un registro nacional de datos, un observatorio estatal, autopsias psicológicas y protocolos de intervención en colegios, centros de salud y residencias. Además, se han destinado más de 17 millones de euros a programas específicos de prevención.
Un reto añadido: jóvenes y nuevas tecnologías
Los expertos advierten de un reto emergente: el uso de inteligencia artificial y chatbots por parte de adolescentes y jóvenes en crisis. Aunque pueden ofrecer compañía, a veces refuerzan las ideas suicidas en lugar de contrarrestarlas. Por ello, se pide que estas herramientas estén programadas para derivar a recursos profesionales y no para validar decisiones de riesgo.
Cómo ayudar desde el entorno
La prevención del suicidio empieza en lo cotidiano. Los especialistas recomiendan:
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Escuchar sin juzgar a la persona en crisis.
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Preguntar directamente si tiene pensamientos suicidas.
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Ofrecer apoyo emocional con gestos sencillos: mirar a los ojos, abrazar, acompañar.
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No minimizar su dolor ni responder con frases hechas.
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Facilitar recursos de ayuda profesional.
Recursos de ayuda inmediata
Las personas en crisis y sus allegados pueden recurrir a diferentes recursos de apoyo disponibles las 24 horas del día:
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Teléfono 024: línea de atención nacional para la prevención del suicidio.
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112: número de emergencias para situaciones de riesgo inminente.
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Teléfono de la Esperanza: 717 00 37 17.
Conclusión: hablar salva vidas
El Día Internacional para la Prevención del Suicidio 2025 nos recuerda que nadie quiere morir, sino dejar de sufrir. Hablar, escuchar y actuar son las claves para ofrecer alternativas y esperanza. Romper el tabú es el primer paso para que miles de personas encuentren una salida distinta al dolor.
✅ Metadescripción SEO: El 10 de septiembre se celebra el Día Internacional para la Prevención del Suicidio 2025. Expertos en salud mental reclaman hablar del suicidio sin tabúes, detectar señales de alarma y ofrecer apoyo. En España, más de 4.000 personas se quitan la vida cada año.
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