Síguenos

Valencia

Ford confirma la reducción de los turnos de trabajo nocturno en su planta de Almussafes

Publicado

en

MADRID, 7 Jun. – La firma automovilística estadounidense Ford ha confirmado en un comunicado que reducirá turnos de trabajo en su planta de Almussafes (Valencia) y Saarlouis (Alemania), como parte de su plan de reestructuración en Europa para crear un negocio sostenible y rentable.

Es la primera vez que la marca norteamericana se pronuncia sobre posibles recortes en la factoría valenciana desde que presentara su plan de transformación europeo en octubre de 2018.

La dirección de Ford España trasladó este miércoles al comité de empresa de la compañía la decisión de recortar la producción diaria en Almussafes en entre 100 y 150 coches diarios a partir de septiembre.

Con el motivo de la bajada de producción, trabajadores del turno de noche serán recolocados en el de mañana o de tarde y en labores para el lanzamiento del nuevo Kuga, parándose el sistema A (Mondeo, Galaxy, S-Max y Kuga) de montaje y dejando tan solo el sistema B (Transit Connect y Kuga).

La bajada de producción propuesta por Ford podría suponer una pérdida de la producción total de la planta valenciana de entre 13.000 y 14.000 coches en lo que resta de año, dependiendo del calendario laboral.

En este sentido, a partir de la semana que viene, el comité de empresa y la dirección de la compañía comenzarán un periodo de negociación para que no se produzcan despidos debido a un excedente de personal.

En España, la firma del óvalo emplea a unas 8.100 personas repartidas en tres turnos y creará unas instalaciones de montaje de baterías para vehículos electrificados, que se espera que estén operativas en septiembre de 2020.

Ford anunció este miércoles el cese de la actividad de su planta británica de motores de Bridgend para 2020. Las principales causas para el cierre de la factoría son el fin de la producción de motores para Jaguar Land Rover, el fin de la generación anterior de la mecánica GTDi de 1.5 litros y la reducida demanda de los propulsores de nueva generación GTDi y Pfi de 1.5 litros.

La marca estadounidense prevé gastos extraordinarios antes de impuestos de aproximadamente 650 millones de dólares (577 millones de euros) en relación con el cierre de la factoría.

Además, recortará más de 5.000 puestos de trabajo en Alemania, mientras que, desde junio, dejará de ensamblar el C-Max y el Grand C-Max en Saarlouis (Alemania) y de fabricar turismos en Rusia, lo que conllevará el cierre de dos plantas de vehículos y de una de motores. También pondrá fin a la producción de su planta de Blanquefort (Francia) a finales de agosto.

Ford eliminará alrededor del 10% de su fuerza laboral en todo el mundo, unos 7.000 empleos, para finales de agosto, como parte de su plan de reestructuración.

Fuente: (EUROPA PRESS)

Advertisement
Click para comentar

Tienes que estar registrado para comentar Acceder

Deja un comentario

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.

Valencia

El duelo de un pueblo no se gobierna con mentiras: es hora de que Carlos Mazón dimita

Publicado

en

El duelo de un pueblo no se gobierna con mentiras: es hora de que Carlos Mazón dimita
El president de la Generalitat, Carlos Mazón. EFE/ Biel Alino/Archivo

La catástrofe desencadenada por la DANA del 29 de octubre de 2024 en la Comunitat Valenciana, que dejó un lacerante saldo de más de 229 víctimas, no puede quedar impune. Más allá del dolor humano y de la reconstrucción material, está la responsabilidad política. Y en ese terreno, Carlos Mazón, presidente de la Generalitat Valenciana, acumula mentiras, contradicciones y el profundo desgarro de quienes lo perdieron todo. Por dignidad, por ética y por justicia, Mazón debe dimitir.

Una gestión inexcusable

Cuando la alerta roja estaba activada, Mazón estaba ausente del lugar que le correspondía. Según los informes oficiales, llegó al comité de crisis (CECOPI) a las 20:28 horas, cuando ya se había emitido la alerta a la población minutos antes. No fue un “error de agenda”, sino un fallo estructural que costó vidas.

Mientras Valencia vivía una riada devastadora, el presidente se encontraba en una comida privada en lugar de supervisar la emergencia. Su entorno lo justificó como una reunión de trabajo, pero el contexto lo desmiente: fue ausencia, negligencia y falta de liderazgo.

La falta de movilización de efectivos tampoco puede justificarse. Los informes cruzados detectan irregularidades en el número de bomberos y medios activados. Cuando una emergencia reclama transparencia, los datos confusos o manipulados son una afrenta.

Mentiras, contradicciones y silencio

Mazón ha intentado derivar responsabilidades hacia la Agencia Estatal de Meteorología o la Confederación Hidrográfica del Júcar, en lugar de asumir el liderazgo que su cargo exige. Cuando el caos se instala, quien gobierna debe estar al frente, no buscando culpables.

Peor aún, ha ofrecido versiones cambiantes sobre su paradero, sus llamadas y las decisiones adoptadas aquel día. La investigación judicial avanza con pruebas que desmontan la versión oficial. Cuando un líder debe explicar dónde estaba durante una tragedia, el problema ya no es circunstancial: es estructural.

Las víctimas, traicionadas

No basta con lamentar lo sucedido cuando la dignidad exige acción. Las asociaciones de víctimas han expresado su malestar y exigido respeto ante la falta de explicaciones claras. “Estar con las víctimas también implica asumir responsabilidades”, repiten familiares que aún esperan una disculpa sincera.

No es solo la ausencia inicial. Es el desfile de versiones, el silencio, la falta de empatía y la reconstrucción lenta. Mientras las familias siguen llorando, el presidente intenta sostener su imagen pública como si nada hubiera ocurrido.

La única salida digna: la dimisión

Integridad política. Quien incumple los principios básicos de responsabilidad pierde la legitimidad para seguir al frente.

Justicia para las víctimas. Pedir perdón no basta cuando no se explica con claridad, cuando no se asumen errores ni se ofrecen soluciones. Las víctimas merecen que se depuren responsabilidades reales.

Confianza institucional. La credibilidad de la Generalitat se resquebraja cuando su presidente ofrece explicaciones tardías, contradictorias y evasivas. Eso no solo afecta a Mazón, afecta a toda la Comunitat Valenciana.

Renovación del liderazgo. El desastre del 29-O no puede cerrarse con un “sigo al mando”. Hace falta un relevo que reconstruya no solo los territorios inundados, sino también la confianza de los ciudadanos.

La responsabilidad compartida

Los silencios cómplices también pesan. Los partidos que sostienen a Mazón deben preguntarse si su apoyo es ético o meramente político. Cada día que pasa sin rendir cuentas es una herida más para las víctimas y una mancha más para las instituciones.

La dimisión no sería una derrota política, sino un acto de respeto hacia los que sufrieron, hacia los que murieron y hacia toda una sociedad que exige transparencia y verdad.

La tragedia del 29 de octubre no son solo cifras. Son vidas, familias, municipios arrasados y una sociedad herida. Carlos Mazón mantuvo su comida en El Ventorro cuando la provincia se inundaba, cambió versiones cuando se investigaba y continúa en el cargo pese al clamor ciudadano.

Por integridad, por dignidad, por justicia: Carlos Mazón debe dimitir.
Y quienes lo sostienen, deberían preguntarse si su silencio también los convierte en responsables.

Continuar leyendo