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Salud y Bienestar

¿Te sientes sin energía? Así puedes combatir la astenia primaveral de forma natural

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astenia primaveral
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Con la llegada de la primavera muchas personas experimentan un curioso fenómeno: en lugar de sentirse renovadas por el buen tiempo, sufren un bajón anímico y físico difícil de explicar. Si te preguntas “¿por qué estoy tan cansado últimamente?”, es posible que estés atravesando lo que se conoce como astenia primaveral.

Aunque no está considerada una enfermedad en sí, la astenia primaveral es un trastorno temporal del estado de ánimo que aparece con los cambios estacionales, especialmente al inicio de la primavera. Afecta tanto al cuerpo como a la mente, y se manifiesta con una sensación persistente de fatiga, apatía o falta de motivación, incluso después de haber descansado.


¿Qué es la astenia primaveral y por qué aparece?

La astenia primaveral es una respuesta del organismo a los cambios ambientales, como el aumento de las temperaturas, la variación de las horas de luz solar, la presión atmosférica y el ritmo circadiano.

Durante este periodo, el cuerpo necesita adaptarse a nuevos ritmos y eso puede provocar una alteración temporal de la producción de hormonas como la serotonina, la dopamina o la melatonina, lo que influye directamente en nuestro estado de ánimo, energía y descanso.


Los seis síntomas más comunes de la astenia primaveral

Aunque no todos experimentan los mismos efectos, los síntomas más habituales incluyen:

1. Cansancio físico y mental persistente

Aparece incluso después de haber dormido suficiente, y puede durar varios días o semanas.

2. Dificultad para concentrarse

Las tareas cotidianas parecen más difíciles y se reduce el rendimiento intelectual.

3. Alteraciones del sueño

Insomnio, despertares nocturnos o sueño poco reparador son frecuentes.

4. Apatía o falta de motivación

Desinterés por actividades que normalmente generan entusiasmo.

5. Irritabilidad y cambios de humor

La sensibilidad emocional aumenta, favoreciendo los altibajos anímicos.

6. Dolor de cabeza o malestar general

Algunas personas sienten presión en la cabeza, pesadez o síntomas similares al resfriado sin causa aparente.


¿Cómo combatir la astenia primaveral de forma natural?

La buena noticia es que, al ser un trastorno pasajero, se puede mitigar e incluso prevenir con algunos hábitos saludables y remedios naturales. Aquí te contamos cómo:

1. Ajusta tus horarios de sueño

Respeta las horas de descanso y procura dormir entre 7 y 8 horas. Evita pantallas al menos una hora antes de irte a dormir.

2. Apuesta por una alimentación equilibrada

Aumenta el consumo de frutas, verduras de temporada, frutos secos y alimentos ricos en triptófano (como plátano, huevos o legumbres), que favorecen la producción de serotonina.

3. Exposición a la luz natural

Aprovecha las horas de sol para salir a caminar o hacer ejercicio al aire libre. Esto ayuda a regular el reloj biológico y mejora el estado de ánimo.

4. Ejercicio moderado y constante

No hace falta machacarse en el gimnasio: una caminata diaria, yoga o natación pueden ser suficientes para activar el organismo y liberar endorfinas.

5. Hidratación constante

Beber agua con frecuencia ayuda a mantener el equilibrio energético y evitar la sensación de fatiga.

6. Infusiones y suplementos naturales

Tisanas de ginseng, jalea real, rodiola o valeriana pueden ayudarte a recuperar la vitalidad. Consulta siempre con un profesional antes de tomar suplementos.


¿Cuándo consultar a un médico?

Si los síntomas se prolongan más allá de dos o tres semanas, o interfieren seriamente en tu calidad de vida, es recomendable acudir a un profesional. En algunos casos, el cansancio persistente puede estar relacionado con otras patologías como la anemia, el hipotiroidismo o incluso cuadros depresivos.

La primavera es sinónimo de luz, color y renovación. Si tu cuerpo necesita unos días para adaptarse, dale el tiempo y el cuidado que merece. Adoptar rutinas saludables, mantener una actitud positiva y entender lo que ocurre en tu organismo te ayudará a superar la astenia primaveral y disfrutar al máximo de esta estación.

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¿Cuáles son los síntomas de un infarto?

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sintomas infarto

Los síntomas de un infarto son variados. El ataque cardíaco se produce cuando se bloquea o se reduce gravemente el flujo de sangre que va al corazón. Por lo general, la obstrucción se debe a una acumulación de grasa, colesterol y otras sustancias en las arterias del corazón (coronarias). Los depósitos de grasa que contienen colesterol se llaman placas.

El proceso de acumulación de placas se llama ateroesclerosis.

A veces, una placa puede romperse y formar un coágulo que bloquea el flujo de sangre. La interrupción del flujo de sangre puede dañar o destruir una parte del músculo cardíaco.

El ataque cardíaco también se conoce como infarto de miocardio.

Si se produce un ataque cardíaco, es necesario recibir tratamiento de inmediato a fin de evitar la muerte. Llama al 911 o busca atención médica de emergencia si crees que estás teniendo un ataque cardíaco.

Síntomas de un infarto

Los síntomas de un ataque cardíaco varían. En algunas personas, estos síntomas son leves. Otras personas tienen síntomas graves. Algunas personas no presentan síntomas.

Los síntomas frecuentes de un ataque cardíaco incluyen:

  • Dolor en el pecho que puede sentirse como presión, opresión, dolor, o sensación opresiva o de dolor.
  • Dolor o molestias que se propagan al hombro, al brazo, a la espalda, al cuello, a la mandíbula, a los dientes o, a veces, a la parte superior del abdomen.
  • Sudor frío.
  • Fatiga.
  • Acidez estomacal o indigestión.
  • Aturdimiento o mareos repentinos.
  • Náusea.
  • Falta de aire.

Las mujeres pueden tener síntomas atípicos, como dolor punzante o breve en el cuello, el brazo o la espalda. A veces, el primer síntoma de un ataque cardíaco es un paro cardíaco repentino.

Algunos ataques cardíacos se producen de repente, pero muchas personas tienen signos y síntomas de advertencia horas, días o semanas antes. El dolor en el pecho o la presión (angina) que persiste y no desaparece con el descanso puede ser un signo de alarma temprano. La angina de pecho es el resultado de un descenso temporal del flujo sanguíneo hacia el corazón.

Cuándo debes consultar con un médico

Busca ayuda de inmediato si crees que estás teniendo un ataque cardíaco. Adopta las siguientes medidas:

  • Llama a emergencias. Si crees que estás teniendo un ataque cardíaco, llama inmediatamente al 911 o al número de emergencia local. Si no tienes acceso a servicios médicos de urgencia, pídele a alguien que te lleve al hospital más cercano. Conduce solamente si no queda otra opción.
  • Toma nitroglicerina si te la recetó el proveedor de atención médica. Tómala según las instrucciones mientras esperas la ayuda de emergencia.
  • Toma aspirina, si el médico lo recomienda. El consumo de aspirina durante un ataque cardíaco podría reducir el daño cardíaco al evitar que la sangre forme coágulos.La aspirina puede interactuar con otros medicamentos, así que no la tomes a menos que el proveedor de atención médica o el personal médico de emergencia te lo indiquen. No retrases la llamada al 911 para tomar aspirina. Llama primero al número de emergencias.

Qué hacer si ves que una persona podría estar teniendo un infarto

Si una persona está inconsciente y piensas que está teniendo un ataque cardíaco, primero llama al 911 o al número local de emergencias. Luego, verifica si la persona está respirando y si tiene pulso. Si la persona no respira o no le encuentras pulso, comienza a realizarle reanimación cardiopulmonar (RCP).

  • Si no has recibido capacitación para la reanimación cardiopulmonar, realiza la reanimación solamente con las manos. Es decir, presiona el pecho de la persona con firmeza y rapidez (entre 100 y 120 compresiones por minuto).
  • Si has recibido capacitación para la reanimación cardiopulmonar y te sientes seguro de poder hacerlo, comienza con 30 compresiones en el pecho antes de hacer dos respiraciones de rescate.

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