Síguenos

Fallas

Fallece Carmen Bueso, alma de «Flor» y referente histórico de la indumentaria valenciana

Publicado

en

Fallece Carmen Bueso
Carmen Bueso

La indumentarista que marcó una época deja un legado imborrable en el arte de vestir a las falleras mayores y cortes de honor de València

VALÈNCIA, 29 MARZO 2025 – La indumentaria tradicional valenciana está de luto. Carmen Bueso, conocida por todos como Carmen “Flor”, ha fallecido dejando un vacío imposible de llenar en el corazón de las Fallas. Su nombre ha estado unido durante décadas a la elegancia, la excelencia artesanal y el profundo respeto por la tradición. Con su partida, València pierde a una de las figuras más queridas y relevantes del mundo fallero.

Aunque recientemente se había jubilado tras cerrar su tienda de la calle Conde Altea, su legado sigue vivo en cientos de trajes que continúan desfilando por la ciudad cada mes de marzo. Su marca, “Flor. Carmen Bueso”, fue sinónimo de calidad, estilo y cariño por los detalles.

De una paquetería de barrio a vestir a las falleras mayores de València

El germen de su trayectoria profesional nació en la Paquetería Flor, un pequeño comercio junto al Mercado de Colón gestionado por la familia de su esposo, Manuel Flor. En su acogedora esquina de Conde Salvatierra, Carmen comenzó haciendo composturas y arreglos, hasta que un día decidió ir más allá: empezó a confeccionar trajes a medida con un pequeño equipo en Benimàmet, mucho antes de que el concepto de “tienda de indumentaria fallera” estuviese consolidado.

Su trabajo pronto se hizo conocido entre clientas exigentes del Pla del Remei y la Gran Vía, y su habilidad con el hilo y la aguja la catapultó a lo más alto del sector.

El espolín «Soto» y un momento para la historia

Uno de los momentos más emblemáticos de su carrera llegó en 1999, cuando su sobrina, Lola Flor Bustos, fue proclamada fallera mayor de València del año 2000. Fue Carmen quien la vistió de arriba a abajo, confeccionando con su equipo en Benimàmet el histórico espolín “Soto” de color paja, tejido por Garín. Fue, además, el último traje de exaltación no entregado por el Ayuntamiento, en una época en la que las falleras mayores aún vestían trajes confeccionados por familiares o indumentaristas de confianza.

Ese momento marcó el paso de Carmen Bueso de modista a icono.

Lola Flor

El salto a su tienda en Conde Altea y una clientela de élite fallera

Con el nuevo milenio, Carmen decidió dar un paso más y abrir su propia tienda bajo su nombre: “Flor. Carmen Bueso”. Durante más de dos décadas, este espacio fue referente indiscutible en el sector de la indumentaria valenciana, por donde pasaron falleras mayores como Sara Martín, Lucía Gil, Gloria Martínez, Marta Reglero, Nela Ayora o Inmaculada Asensi, así como decenas de componentes de las cortes de honor.

Incluso fue pionera en diseñar los primeros justillos para la “dansà” en el año 2008, cuando esa prenda no era aún habitual.

La tradición familiar también continuó con las nuevas generaciones: su sobrina nieta, Lola López Flor, hija de la fallera mayor del año 2000, fue componentede la corte de honor infantil de 2024. Un legado que se ha transmitido con orgullo y pasión.

Una jubilación que no pudo disfrutar

En 2024, Carmen bajó la persiana de su tienda con la satisfacción del deber cumplido. Se retiraba para disfrutar de una merecida jubilación, traspasando el negocio y cerrando un capítulo brillante de su vida. Lamentablemente, su fallecimiento prematuro ha impedido que disfrute plenamente de esa nueva etapa.

GALERÍA| La espectacular indumentaria de los hijos de Lola Flor

Reconocimiento en vida: premio Joia del Gremio de Sastres y Modistas

En junio de 2023, Carmen Bueso recibió uno de los galardones más emotivos: el premio Joia del Gremio de Sastres y Modistas de la Comunitat Valenciana, en reconocimiento a una vida entera dedicada al arte textil.

“Nunca hubiera imaginado un final así a mi trayectoria profesional, rodeada de tanta gente que quiero, de personas maravillosas que me he encontrado a lo largo de este camino”, escribió entonces, visiblemente emocionada por el homenaje.

Un legado que se viste, no se olvida

A diferencia de otras disciplinas efímeras de la fiesta, como la pirotecnia o la creación de monumentos falleros, el arte de la indumentaria permanece. Los trajes de valenciana confeccionados por Carmen seguirán vivos en cada desfile, cada exaltación y cada “mascletà”, recordándonos que fue ella quien los hizo posibles.

Cada vez que uno de sus espolines salga del armario, alguien recordará: «Esto es un Flor».

Puedes seguir toda la actualidad visitando Official Press o en nuestras redes sociales: Facebook, Twitter o Instagram y también puedes suscribirte a nuestro canal de WhatsApp.

Advertisement
Click para comentar

Tienes que estar registrado para comentar Acceder

Deja un comentario

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.

Fallas

GALERÍA| Carmen Sancho y su corte, anfitrionas de la Cena de Cortes 2025: la gran cita solidaria

Publicado

en

La Cena de Cortes, la gran convención anual que reúne a las falleras históricas, antiguas Falleras Mayores de València y sus cortes de honor. Este 2025, la esperada cita alcanza su 30ª edición y estará organizada por la Corte de Honor de 2014, encabezada por la entonces Fallera Mayor de València, Carmen Sancho de Rosa, que este año actúa como anfitriona.

En esta edición, el carácter solidario del evento toma un protagonismo especial, ya que la recaudación se destinará a la Asociación de Enfermos de Alzheimer y Otras Demencias de Catarroja, una entidad que trabaja para mejorar la calidad de vida de pacientes y familias afectadas por estas enfermedades neurodegenerativas.

 


Un encuentro histórico que celebra su 30 aniversario

La Cena de Cortes nació en 1994 como una reunión entre las “doce falleras”, que invitaban a sus Falleras Mayores para compartir una jornada festiva. Con el tiempo, el encuentro evolucionó hasta convertirse en una fiesta global que agrupa a todas aquellas mujeres que han ostentado el cargo de fallera mayor o han formado parte de alguna corte de honor.

Pese a interrupciones puntuales —como las provocadas por la pandemia o cambios de fecha por causas de fuerza mayor— la celebración llega a su trigésima edición como un referente emocional y festivo dentro del mundo fallero.


Un evento muy esperado en el calendario de otoño

La Cena de Cortes suele celebrarse en otoño, coincidiendo con la llegada de la nueva Fallera Mayor de València y su corte de honor. Aunque estas no pueden participar plenamente en el evento hasta convertirse en “históricas”, sí acuden al acto para ser recibidas y participar en la tradicional rifa y el baile final.

Este año, Carmen Prades y las doce componentes de la nueva corte compartirán ese simbólico momento de bienvenida, tal como ocurrió el año anterior con Berta Peiró.

 


Una noche solidaria para el recuerdo y el apoyo social

Este año, la cena canalizará su labor benéfica en favor de la Asociación de Enfermos de Alzheimer y Otras Demencias de Catarroja, contribuyendo así a programas y servicios que ofrecen atención, acompañamiento y recursos tanto a los afectados como a sus familias.

La Cena de Cortes 2025 se presenta, por tanto, como un punto de encuentro para celebrar la hermandad fallera, recordar experiencias compartidas y, sobre todo, apoyar una causa de gran impacto social.

GALERÍA| Carmen Sancho y su corte, anfitrionas de la Cena de Cortes 2025: la gran cita solidaria

Continuar leyendo