Síguenos

Otros Temas

Nunca mezcles estos productos de limpieza

Publicado

en

mezcla productos de limpieza

La mezcla de algunos productos de limpieza puede ser una bomba. Algunos son químicos muy potentes y por norma general no se deben mezclar productos de limpieza entre sí, pero existe la errónea creencia de que al mezclar distintas sustancias se pueden obtener mejores resultados.

Hoy en día, hay infinidad de productos en el supermercado que garantizan la máxima calidad y no son nocivos.

El problema es que puede ser dañino para la salud, porque pueden producirse reacciones químicas. Por ello, la web Good Housekeeping ha preguntado a expertos del Instituto Americano de la Limpieza, por los productos que no se pueden mezclar. Las combinaciones desaprobadas son, curiosamente, algunas de las más recomendadas por usuarios en Internet.

Mezcla de productos de limpieza: estos son los riesgos

Lejía y Vinagre

Al mezclar lejía con vinagre, que no es más que una disolución de ácido acético, se produce gas cloro. Este gas produce quemaduras en las mucosas, los ojos y las vías respiratorias.

Lejía y Amoníaco

Estos dos productos mezclados producen un gas tóxico llamado cloramina, el cual irrita los ojos, puede causar quemazón en el pecho, y problemas respiratorios. Esta es una de las mezclas domésticas más peligrosas y que más vidas ha costado.

Agua oxigenada y vinagre

Al combinar el peróxido de hidrógeno del agua oxigenada y el hipoclorito de sodio de la lejía pueden reaccionar formando ácido peracético, que es una sustancia oxidante e irritante que puede dañar la piel, los ojos y el sistema respiratorio.

Vinagre y bicarbonato

Esta combinación es muy común, y, aunque no es peligrosa en sí misma, sí es bastante ineficiente. Mezclar bicarbonato con vinagre produce esencialmente agua y acetato de sodio, además de mucha espuma. No tiene poder de desinfección, ya que las dos sustancias se neutralizan entre sí.

Lejía y agua oxigenada

El agua oxigenada puede reaccionar con la lejía, da lugar a una serie de reacciones químicas exotérmicas, es decir, que desprenden calor. El aumento de la temperatura y la formación de estos compuestos acarrea un elevado riesgo de explosión.

Advertisement
Click para comentar

Tienes que estar registrado para comentar Acceder

Deja un comentario

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.

Otros Temas

Día de acción de gracias: historia y curiosidades detrás de una de las celebraciones más arraigadas de Estados Unidos

Publicado

en

Cada cuarto jueves de noviembre, Estados Unidos celebra Acción de Gracias (Thanksgiving), una de las festividades más importantes y emocionantes del país. Considerada por muchos más relevante que la propia Navidad, esta cita reúne a millones de personas en torno a un mismo propósito: agradecer, compartir y reencontrarse con la familia. Tanto es así, que es la semana con más desplazamientos del año en todo el territorio estadounidense.

Aunque hoy la imagen de esta jornada se asocia al pavo asado, las largas sobremesas, el fútbol americano y el desfile de Macy’s, Acción de Gracias tiene una historia fascinante que se remonta al siglo XVII, además de múltiples tradiciones modernas que no todo el mundo conoce.

A continuación, repasamos sus orígenes, el porqué del menú y cinco curiosidades sorprendentes sobre esta centenaria celebración.


🌽 Origen y evolución de una tradición de gratitud y unión

El origen más extendido sitúa la primera celebración de Acción de Gracias en 1621, cuando los colonos ingleses de Plymouth (Massachusetts) y los nativos Wampanoag festejaron la primera cosecha exitosa tras un invierno devastador. Aquella reunión, que duró tres días, incluyó pavo, calabaza y frutas secas, aunque también había maíz, venado y marisco.

Sin embargo, existen otros precedentes:

  • El primer servicio de Acción de Gracias europeo documentado en Norteamérica se celebró en 1578 en Terranova.

  • Es muy probable que los españoles realizaran ceremonias de agradecimiento incluso antes en Florida.

  • Mucho antes de la llegada europea, los pueblos indígenas celebraban rituales para asegurar buenas cosechas, como la Danza del Maíz Verde de los cherokee.

A lo largo de los siglos, las celebraciones locales fueron dando paso a una festividad nacional. Tras una propuesta de 1789 para dar gracias por la Constitución, George Washington estableció una primera fecha. Más tarde, la incansable editora Sarah Josepha Hale promovió durante décadas la unificación del festivo, hasta que en 1863 Abraham Lincoln declaró Acción de Gracias como celebración nacional el último jueves de noviembre.
El Congreso fijó definitivamente la fecha en 1941, tal y como se celebra hoy.


Por qué se come pavo en Acción de Gracias

El pavo no se convirtió en protagonista por tradición simbólica, sino por practicidad. Para los primeros colonos, el pavo salvaje:

  • era abundante en la región,

  • tenía un gran tamaño, ideal para alimentar a grupos numerosos,

  • no aportaba otros recursos como huevos o leche, por lo que sacrificarlo no afectaba a la economía doméstica.

Con el tiempo, la preparación del pavo se convirtió en un símbolo de abundancia y unión familiar, hasta convertirse en el plato más icónico del día.

Además, cada año el presidente de Estados Unidos indulta un pavo en una ceremonia televisada. Aunque la tradición se formalizó en 1989, surgió de forma espontánea cuando George H. W. Bush, ante el nerviosismo del ave, bromeó con que no terminaría en la mesa de nadie. Desde entonces, los pavos indultados viven en granjas y parques agrícolas convertidos en auténticas “celebridades”.


5 curiosidades sobre Acción de Gracias que no todo el mundo conoce

1. El primer banquete duró tres días y tenía un menú muy diferente

En 1621, colonos y nativos celebraron durante tres días un banquete de agradecimiento. Aunque se suele relacionar esta fecha con el pavo, el menú incluía venado, pescado, marisco, maíz, calabaza y frutas secas, más cercano a un festín de supervivencia que al típico menú actual.


2. Thanksgiving era originalmente un día de oración y ayuno

Mucho antes del banquete familiar, Acción de Gracias era una jornada de reflexión religiosa entre los colonos ingleses. Se trataba de un día para ayunar, rezar y agradecer cosechas o pedir protección. Con el tiempo, el ayuno se convirtió en abundancia y la fiesta tomó un carácter más comunitario y festivo.


3. Solo dos presidentes cambiaron la fecha oficial

Aunque hoy es inmovible, en 1939 y 1940 Franklin D. Roosevelt adelantó la celebración al tercer jueves de noviembre. ¿El motivo? Dar más días de compras a los comerciantes en plena Gran Depresión. La polémica fue tal que en 1941 se fijó definitivamente la fecha actual.


4. El National Day of Mourning: otra cara de la celebración

Desde 1970, algunas comunidades indígenas celebran, en paralelo, el National Day of Mourning (Día Nacional de Luto). En vez de dar gracias, denuncian que la llegada de los colonos supuso violencia, epidemias, desplazamientos y pérdida de tierras para los pueblos nativos.


5. Macy’s, fútbol americano y “turkey trots”: las tradiciones modernas

Thanksgiving no sería lo mismo sin:

  • El desfile de Macy’s, que desde 1924 llena Nueva York de carrozas, globos gigantes y bandas musicales, marcando el inicio de la Navidad.

  • El fútbol americano, tradición desde 1934, con los Detroit Lions y los Dallas Cowboys como protagonistas.

  • Las “turkey trots”, carreras populares que se celebran por la mañana en cientos de ciudades para “ganarse la cena”. La más antigua data de 1896 en Buffalo.


Una fiesta que combina historia, cultura y tradición

Acción de Gracias es mucho más que una gran comida: es una reunión nacional que mezcla historia, familia, memoria y agradecimiento. Cuatro siglos después de aquel primer banquete, sigue siendo una de las celebraciones más queridas y arraigadas de Estados Unidos.

Puedes seguir toda la actualidad visitando Official Press o en nuestras redes sociales: Facebook, Twitter o Instagram y también puedes suscribirte a nuestro canal de WhatsApp.

Continuar leyendo