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Salud y Bienestar

Vitrificación de ovocitos, la solución efectiva para prevenir la infertilidad asociada a la edad

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Uno de los cambios sociales más constatados en los últimos años es el del aumento de la esperanza de vida, y con ello, de la longevidad. Un deseo hecho realidad para muchos que, sin embargo, también presenta algunos condicionantes y factores de riesgo a tener en cuenta como las enfermedades asociadas a la edad.

Todos estos aspectos se han abordado en el ‘Longevity World Forum’, el primer encuentro sobre longevidad y Genómica de Europa, que se ha celebrado en València, con la finalidad de mejorar la calidad de vida y prevención de las enfermedades asociadas al envejecimiento.

Estas jornadas, que han servido para presentar los últimos avances en medicina de precisión, han contado con la presencia de líderes mundiales de la comunidad científica, cuyas sesiones se han centrado en profundizar en la genómica de la longevidad, en el papel de la dieta y el ejercicio físico para mejorar la calidad de vida, así como en la medicina preventiva de enfermedades relacionadas con la longevidad.

Arancha Galán Rivas, embrióloga y subdirectora del Laboratorio FIV de IVI Valencia, ha sido una de las responsables en exponer una de las técnicas de reproducción asistida como una de las formas de prevenir la infertilidad asociada a la edad: la vitrificación de ovocitos.

Estudios recientes confirman la maternidad tardía como una de las consecuencias del cambio social, pero cabe tener en cuenta que, a mayor edad, menor es la tasa de fecundidad, cuyo porcentaje de éxito de embarazo natural decae de manera exponencial a partir de los 35 años.

La vitrificación de ovocitos es una de las soluciones más efectivas que dan respuesta no solo a ese deseo de ser madre a una edad más avanzada, sino, tal como ha explicado la embrióloga Arancha Galán, también sirve de garantía para aquellas mujeres que se someten a esta técnica por “razones médicas como puede ser sufrir un cáncer, o enfermedades que requieren de quimioterapia, o bien, aquellas que padecen endometriosis o tienen una reserva ovárica baja”.

Galán ha especificado que estudios llevados a cabo por la Fundación IVI señalan que “el perfil de mujer que opta por la vitrificación es, en su mayoría, soltera, heterosexual, con formación universitaria y con una edad comprendida entre los 36 y 39 años. Hoy en día, con la preserva de la fertilidad por motivos sociales, conseguimos un alto porcentaje de supervivencia de los ovocitos vitrificados en pacientes de hasta 35 años, con una tasa que supera el 90%, un resultado muy en línea con la necesidad de adelantar la edad a la que se preserva la fertilidad”. Y es que “el riesgo de no poder tener hijos cuando se desean aumenta hasta un 35% a partir de los 40 años”, ha recalcado Galán.

Por tanto, la vitrificación se presenta como una de las opciones “más seguras, eficaces, rentables económicamente y éticamente aceptables” para asegurar un embarazo a una edad más tardía. Galán ha remarcado que el coste de congelar ovocitos es más ventajoso que los procesos de Fecundación In Vitro (FIV), “especialmente en aquellas mujeres de 35 años que posponen su maternidad hasta los 40 años”. Esto se debe a la posibilidad de emplear óvulos que mantienen la misma calidad que tenían antes de su vitrificación.

Con la rapidez con que avanza la ciencia, la embrióloga de IVI Valencia ha señalado el trasplante ovárico de células madre (ASCOT) como otra de las técnicas que en un futuro próximo cobrarán protagonismo para potenciar la fertilidad, especialmente en aquellas pacientes con baja reserva ovárica. De hecho, se han conseguido cinco embarazos y ya han nacido tres bebés fruto del uso de esta innovadora técnica, en el que IVI es pionero.

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Salud y Bienestar

Cómo detectar que alguien es ludópata: las siete señales de alerta

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La ludopatía, también conocida como adicción al juego o juego patológico, es un trastorno adictivo relacionado con la pérdida de control sobre las conductas de juego. Aunque durante mucho tiempo fue considerada un problema menor o un simple «vicio», hoy se reconoce como una enfermedad psicológica compleja que puede destruir vidas si no se detecta a tiempo.

¿Qué es la ludopatía o juego patológico?

La ludopatía es un trastorno de control de los impulsos, en el que la persona se ve obligada a jugar de forma compulsiva y progresiva. Es decir, necesita apostar cada vez más, durante más tiempo y con mayores cantidades de dinero, lo que genera un círculo vicioso que termina afectando su entorno familiar, laboral, económico y emocional.

Esta problemática se ha visto agravada en los últimos años por el acceso masivo a juegos de azar online y plataformas de apuestas deportivas, que están disponibles las 24 horas y sin supervisión. Esto ha provocado un aumento de casos de adicción al juego online, especialmente entre jóvenes y adultos jóvenes.

Síntomas más habituales de la ludopatía

Detectar los síntomas de la adicción al juego en una etapa temprana puede marcar la diferencia. Estas son algunas de las señales más frecuentes:

  • Manipulación de familiares o amigos para conseguir dinero

  • Conducta huidiza o evasiva sobre el tiempo o el dinero gastado

  • Gasto excesivo de dinero sin justificación

  • Asistencia frecuente a lugares de apuestas o conexión continua a plataformas de juego

  • Desapariciones repentinas o falta de explicaciones sobre ausencias

  • Cambios de humor bruscos sin motivo aparente

  • Búsqueda de microcréditos o préstamos para seguir apostando

Fases de la adicción al juego

Según el psicólogo Enrique Becoña, el proceso de la ludopatía suele atravesar tres fases:

  1. Etapa dorada: El jugador se enfoca en las ganancias y minimiza las pérdidas. La emoción y la euforia dominan.

  2. Etapa de desesperación: El jugador ha perdido grandes cantidades de dinero, acumula deudas y siente que ha perdido el control.

  3. Etapa de aceptación: Reconoce que tiene un problema y, en muchos casos, busca ayuda.

La adicción puede iniciarse a edades tempranas. En los hombres suele comenzar en la adolescencia, mientras que en las mujeres tiende a aparecer entre los 20 y los 40 años.

¿Cómo se trata la ludopatía?

El tratamiento de la ludopatía es fundamental. A diferencia de otras adicciones, no requiere una desintoxicación física, pero sí un proceso profundo de deshabituación psicológica. Este proceso incluye:

  • Terapia cognitivo-conductual

  • Posible uso temporal de medicación para frenar la impulsividad

  • Apoyo grupal o terapia familiar

  • Técnicas para gestionar emociones y evitar recaídas

El objetivo es que la persona recupere el control sobre su conducta y pueda reconstruir su vida personal, profesional y emocional.

¿Cómo ayudar a un ludópata?

Si sospechas que alguien cercano sufre una adicción al juego, es vital no juzgarlo, sino escucharlo y acompañarlo. Estos son algunos pasos útiles:

  • Habla con honestidad y sin reproches.

  • Sugiere acudir a un profesional de la salud mental.

  • Contacta con asociaciones especializadas, como FEJAR (Federación Española de Jugadores de Azar Rehabilitados).

  • Evita facilitar dinero si sospechas que será usado para jugar.

Un problema que no se puede ignorar

La ludopatía es una enfermedad silenciosa que avanza rápidamente si no se trata. Además, si no se aborda a tiempo, puede derivar en otras adicciones como el consumo de alcohol, drogas u otras sustancias, generando una patología dual.

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