Otros Temas
Análisis Horizon: Zero Dawn para PS4
Guerrilla Games vuelve a PlayStation 4 con un potente videojuego llamado Horizon Dawn y las aventuras de Aloy, su protagonista.
Comparte esto:
- Haz clic para compartir en WhatsApp (Se abre en una ventana nueva)
- Haz clic para compartir en Facebook (Se abre en una ventana nueva)
- Haz clic para compartir en Twitter (Se abre en una ventana nueva)
- Haz clic para enviar un enlace por correo electrónico a un amigo (Se abre en una ventana nueva)
- Haz clic para compartir en Telegram (Se abre en una ventana nueva)
- Haz clic para compartir en LinkedIn (Se abre en una ventana nueva)
Publicado
hace 9 añosen
Texto por Ramón Bixquert
Horizon: Zero Dawn es un juego que los propios chicos de Guerrilla Games clasificaron como el proyecto más arriesgado que habían hecho nunca. Y no es para menos ya que no solo se trata de una nueva IP, que quieras o no nunca sabes cómo va a funcionar cara al público, sino porque el estudio holandés estaba más acostumbrado a hacer FPS como Killzone, siendo ésta una de sus franquicias más conocidas. Pero con Horizon: Zero Dawn se han salido totalmente de su zona de confort y sinceramente, para ser su primera vez, han superado con creces toda expectativa creando un inmenso mundo abierto, combates con componentes tácticos, elementos clásicos de los RPG y una historia con un guión muy bien trabajado. Por no mencionar que hay Dinobots, que eso siempre es bien.
La magia de Guerrilla Games

En Horizon: Zero Dawn encarnamos a Aloy, una cazadora paria de los Nora que luchará por encontrar sus orígenes y su lugar en un mundo donde todavía se puede palpar el rencor provocado por una guerra entre las diferentes tribus de la zona y poblado por unas violentas máquinas que año tras año se han vuelto más grandes, mejor armadas y más agresivas. La historia de Aloy nos sirve para ir desentrañando los misterios del cómo y por qué la civilización humana se fue al traste y su resurgimiento de las cenizas cual ave Fénix. Para ello están las ruinas, restos de ciudades o de laboratorios en los que han quedado guardados registros y mensajes, tanto de texto como de audio y de vídeo de personas que explican todo lo que aconteció así como los habitantes de nuestro mundo.
Paralelamente está la historia de las tribus, los restos de una post-guerra entre éstas y un malestar general que amenaza con una nueva. Para la ocasión, Guerrilla ha dotado a Horizon: Zero Dawn de un sistema de conversación en el que nuestras preguntas tienen su respuesta, o lo que es lo mismo, podemos descubrir algo de la historia con nuestras preguntas a los habitantes de la zona. Durante el transcurso de la historia habrá conversaciones que importen más que otras, pero éstas se diferencian en que tienes tres opciones a cómo reaccionar; una agresiva, otra racional y finalmente una sentimental. Algunas de estas opciones dan lugar a distintos tipos de reacciones dentro del juego.
Como ya he mencionado antes, Horizon: Zero Dawn es un juego de acción con tintes de RPG y esto se nota mucho por ejemplo en lo que puedes equipar a Aloy o cómo puedes modificar su atuendo para mejorar su rendimiento en combate, en ir recogiendo materiales para fabricar diversos utensilios como son las pociones, trampas o munición, e incluso mejorando su árbol de habilidades a la par que subes de nivel a la protagonista. Esto permitirá a Aloy que sea más eficiente en un tipo de acciones u otras dependiendo de las ramas de habilidades por las que vayas descendiendo. Donde más se nota el tinte de rol es en el combate, sobre todo contra las máquinas, ya que cada una es débil a algún tipo de elemento, tienen puntos débiles ocultos tras su cuerpo de metal e incluso hay algunas que poseen tanques donde almacenan combustible que al asestarle golpe certero explotan dañando a todo lo que haya alrededor. A parte del combate directo, si te encuentras con muchos enemigos o son muy poderosos, puedes optar por el sigilo. Y algo que da mucho juego es cómo utilizar el entorno para ocultarte, poner trampas o llamar la atención de los enemigos silbando o lanzando piedras para que se dirijan hacia un sitio u otro.

Además de la historia principal y como en la mayoría de juegos de éste género, hay un montón de misiones secundarias, recados, misiones de cacería y un sinfín de tareas más que todas ellas ayudan a crear un mundo muy vivo, algo que está claramente inspirado en títulos de otras empresas como Ubisoft o CD Projekt por ejemplo, lo que no quita que sea un juego fascinante y único en el que si intentas completarlo todo el marcador de tiempo puede ascender hasta las 40 o 45 horas fácilmente. También hay que añadir que durante las misiones te encontrarás con algo de plataformeo, rompecabezas e investigaciones que hacen que el juego sea mucho más ameno y variado. Una de estas misiones secundarias son los llamados “calderos”, lugares que al entrar en ellos y finalizarlos irán aumentando la variedad de máquinas que puedes hackear, haciendo así máquinas aliadas que pueden serte muy útiles a la hora de ciertos enfrentamientos o para utilizarlas de montura al recorrer largas distancias.
Ahondando un poco más en la parte del crafteo y el comercio, he de decir que a mi parecer el juego facilita mucho las cosas ya que en ambos casos cuando te hace falta algún ingrediente para crear munición o trampas y te falta algún material con el que comerciar con mercaderes, el juego tiene una opción llamada “Crear tarea” que al marcarla te otorga una misión en el que el propio mapa te indica la ruta más corta hacia el lugar más cercano donde encontrar los materiales que necesites para finalizar tu tarea. Estos ingredientes pueden conseguirse también fácilmente de la vegetación, en las ruinas o al matar máquinas.

Gráficamente el juego es de lo mejor que hay actualmente. Desde las junglas hasta las montañas nevadas, pasando por los desiertos rocosos, no hay lugar que no sea una demostración de maestría gráfica, y si a los paisajes le añadimos esas inmensas máquinas pastando, volando e interactuando entre ellas, en conjunto crea unas estampas que no dejarán indiferente. El juego fluye a unos increíbles y rocosos 30 frames por segundo tanto en PlayStation 4 como en su versión Pro. Sin embargo sí hemos notado en algunas ocasiones algo de popping, algo casi normal viendo el impresionante trabajo que ha creado Guerrilla Games. Como curiosidad y muestra del magnífico motor gráfico creado por el equipo, Hideo Kojima (Metal Gear Solid) ha comprado los derechos para utilizar este engine de nombre Decima para su nuevo videojuego, Death Stranding.
La banda sonora de Horizon: Zero Dawn es realmente hermosa y encaja a la perfección desde el minuto uno hasta el final de la historia. Además, una de las cosas que más me ha gustado personalmente son todos los comentarios que va haciendo Aloy cada vez que ve un lugar nuevo, recoge material o hay un cambio de clima. A mi parecer es algo que le da mucha personalidad y viveza a la protagonista así como al mundo en general
Dicho todo esto, hay un par de cosas que no me han acabado de convencer. La primera es que el arma cuerpo a cuerpo no se puede cambiar ni mejorar voluntariamente, además de que solo hay dos ataques cuerpo a cuerpo, el básico y el poderoso, sin contar con los golpes del árbol de habilidades. Y la segunda es la cantidad de trampas que puedes poner en el terreno con la aturdidora. Hay un límite de cuerdas que puedes poner por el campo y conforme lo superas las primeras que has puesto van desapareciendo. Son tonterías pero cosas que me hubiera gustado que fueran de otra manera.

Para finalizar decir que el juego está totalmente traducido al castellano, tanto textos como diálogos, siendo Michelle Jenner, actriz española famosa por las series Isabel o Los hombres de Paco, la que da vida a Aloy en su doblaje al castellano. Sin embargo no es la única actriz española que pone su voz a un importante personaje del título, Dafne Fernández (Chiringuito de Pepe, Los Serrano) presta sus cuerdas vocales a Beladga, una de las mejores compañías de nuestra protagonista.
Conclusión
Horizon: Zero Dawn es un juego que ha marcado un antes y un después tanto para el mercado de los videojuegos como para Guerrilla Games. Estamos ante una obra de arte, un videojuego trabajado hasta la extenuación que cuenta con un imponente motor gráfico que deja en evidencia a más de un título de los de su talla, los llamados Triple A. Si las ventas lo avalan, que parece ser que así es, estamos quizás ante una nueva e importante franquicia para Sony y para el equipo holandés, culpables -para muchos- de haber estrenado nuestra consola con su estupendo Killzone: Shadowfall. Además es súper recomendable si os gustan los mundos post-apocalípticos ya que Horizon: Zero Dawn tiene ese rollito que tanto hemos visto en títulos de esta temática. ¡Y hay Dinobots! Espera… ¿esto ya lo he dicho antes, no?
Hemos podido hacer esta análisis gracias a una copia de prensa facilitada por Precision Spain.
Comparte esto:
- Haz clic para compartir en WhatsApp (Se abre en una ventana nueva)
- Haz clic para compartir en Facebook (Se abre en una ventana nueva)
- Haz clic para compartir en Twitter (Se abre en una ventana nueva)
- Haz clic para enviar un enlace por correo electrónico a un amigo (Se abre en una ventana nueva)
- Haz clic para compartir en Telegram (Se abre en una ventana nueva)
- Haz clic para compartir en LinkedIn (Se abre en una ventana nueva)
Relacionado
Otros Temas
¿Por qué tomamos uvas en Nochevieja? El origen del ritual más popular de Año Nuevo en España
Publicado
hace 16 horasen
16 diciembre, 2025
Cada 31 de diciembre, millones de personas en España repiten el mismo gesto: comer doce uvas al ritmo de las campanadas para dar la bienvenida al Año Nuevo. Es uno de los rituales más arraigados de la cultura española, pero ¿de dónde viene esta tradición?, ¿qué significado tiene realmente?, ¿y desde cuándo se practica?
El significado de las doce uvas de la suerte
La tradición marca que se deben comer doce uvas, una por cada campanada del reloj que anuncia el inicio del nuevo año. Cada uva representa un mes del año, y tomarlas sin atragantarse simboliza buena suerte, prosperidad y protección para los doce meses siguientes.
Más allá de la superstición, el ritual se ha convertido en un acto colectivo, casi ceremonial, que une a familias y amigos frente al reloj —especialmente el de la Puerta del Sol de Madrid— para cerrar el año y empezar otro con esperanza.
¿Desde cuándo se toman uvas en Nochevieja en España?
Aunque pueda parecer una costumbre ancestral, no es tan antigua como se cree. El origen de las uvas de la suerte se sitúa a finales del siglo XIX y principios del XX.
La versión más aceptada: Madrid, finales del siglo XIX
Según los historiadores, el ritual comenzó en Madrid en 1882, cuando algunos ciudadanos empezaron a reunirse en la Puerta del Sol para despedir el año comiendo uvas como acto burlesco. Era una forma irónica de imitar a la burguesía madrileña, que celebraba el Año Nuevo con uvas y champán siguiendo modas francesas.
El gesto, inicialmente provocador, fue ganando popularidad entre el pueblo.
El impulso definitivo: el excedente de uva de 1909
La tradición se consolidó definitivamente en 1909, cuando los viticultores del sureste español —especialmente de Alicante y Murcia— tuvieron una cosecha excepcional de uva. Para dar salida al excedente, lanzaron una campaña popularizando las “uvas de la suerte” como símbolo de prosperidad para el nuevo año.
La idea tuvo tanto éxito que el ritual se extendió rápidamente por toda España.
De costumbre popular a tradición nacional
Durante el siglo XX, la tradición de las uvas se afianzó gracias a la radio y, más tarde, a la televisión. Las campanadas retransmitidas desde la Puerta del Sol convirtieron el ritual en un evento colectivo seguido en todo el país.
Hoy, las uvas forman parte inseparable de la Nochevieja española y se exportan incluso a comunidades españolas en el extranjero.
¿Por qué exactamente uvas y no otro alimento?
La uva simboliza desde la Antigüedad abundancia, fertilidad y celebración. Además, es una fruta fácil de consumir, asociada al vino y a los brindis, lo que la convierte en el alimento perfecto para cerrar el año con un mensaje positivo.
Con el tiempo, se han adaptado versiones más prácticas, como uvas peladas, sin pepitas o sustituidas por gominolas, pero el simbolismo permanece intacto.
Un ritual que une pasado y presente
Más de un siglo después, comer uvas en Nochevieja sigue siendo un acto cargado de tradición, superstición y emoción. No importa si se hace en casa, en una plaza o frente al televisor: el gesto conecta generaciones y recuerda que el Año Nuevo empieza mejor compartido.
Andreu Buenafuente y Silvia Abril no presentarán las Campanadas de RTVE este 31 de diciembre
Andreu Buenafuente y Silvia Abril no presentarán las Campanadas de RTVE este 31 de diciembre
Puedes seguir toda la actualidad visitando Official Press o en nuestras redes sociales: Facebook, Twitter o Instagram y también puedes suscribirte a nuestro canal de WhatsApp.
Comparte esto:
- Haz clic para compartir en WhatsApp (Se abre en una ventana nueva)
- Haz clic para compartir en Facebook (Se abre en una ventana nueva)
- Haz clic para compartir en Twitter (Se abre en una ventana nueva)
- Haz clic para enviar un enlace por correo electrónico a un amigo (Se abre en una ventana nueva)
- Haz clic para compartir en Telegram (Se abre en una ventana nueva)
- Haz clic para compartir en LinkedIn (Se abre en una ventana nueva)


Tienes que estar registrado para comentar Acceder