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Cómo evitar que los niños se muerdan las uñas

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como evitar que los niños se muerdan las uñas

Cómo evitar que los niños se muerdan las uñas es una de las cosas que lleva de cabeza a los padres, por evitar que ingieran toda la suciedad.

Cómo evitar que los niños se muerdan las uñas:

1. Mayor riesgo de infecciones

Las uñas, como parte distal de las manos con espacio para albergar suciedad, se convierten en un posible foco de infecciones varias si acaban en la boca. Algunos niños, acostumbrados a morderse las uñas de las manos, acaban viendo también como una opción válida morderse las uñas de los pies, en un evento que a pocos padres les mantiene el estómago en su sitio.

2. Riesgo de infección junto a las mismas uñas

Si en el irregular proceso de morderse las uñas se dejan algún piquito que se les pueda clavar en la piel a medida que crece la uña, o se hacen alguna herida, aumenta el riesgo de que se produzca una paroniquia. Esta condición consiste en el enrojecimiento e hinchazón de una zona junto a la uña, que puede llegar a llenarse de pus, siendo muy doloroso y molesto.

3. Riesgo de afectación dental

Si se muerden las uñas durante poco tiempo es poco probable que suceda, pero si se convierte en un hábito repetitivo y constante en el tiempo, puede suceder que los dientes se desplacen de lugar e incluso que alguno de los dientes se erosione en la zona que repetidamente entra en contacto con las uñas.

4. Dolor si muerden más de lo que deben

En el caso de que se muerdan las uñas como hábito repetitivo, puede suceder que muerdan incluso cuando ya no tengan nada que morder. Una vez han acabado con el borde de la uña (lo blando), sólo les queda la placa ungueal (la parte que está adherida al dedo), y hay niños que siguen por ahí hasta hacerse daño, dejando el dedo sin esa parte de protección y estando unos días (hasta que vuelve a crecer la uña) con dolor al hacer según qué cosas con las manos.

¿Y qué hacer si se muerden las uñas?

Si se quiere poner remedio a esta situación deben seguirse una serie de consejos para conseguirlo, o como mínimo para intentarlo:

  • Explicar por qué es mejor no morderlas: lo primero es que sepa por qué vas a incidir en que deje de morderse las uñas, así que hay que explicarle los riesgos que conlleva morderse las uñas.
  • Intentar conocer la razón de que se las muerda: si es por ansiedad, si es por aburrimiento, si es por… para ir a la raíz del problema y tratar de darle solución. Si conseguimos que un niño tenga un ambiente más tranquilo, quizás se las muerda menos; si está ocupado, quizás no piense en ellas; etc.
  • No ser muy severos: morderse las uñas es un acto voluntario que a menudo se transforma en una rutina casi involuntaria (muchas veces les recordaremos que se las están mordiendo y se sorprenderán ellos mismos al darse cuenta de que lo están haciendo). Dado que lo suelen hacer por ansiedad, es mejor no regañar ni castigar, porque eso los pondría aún más nerviosos. Vale la pena que el proceso sea tranquilo y que ellos sean partícipes de la decisión de dejar el hábito.
  • Evitar poner líquidos o tiritas: a menos que nos lo pidan ellos para ayudarles en el proceso. Si ellos sienten aún la necesidad de hacerlo y les ponemos algo, pueden pensar que les estamos castigando y de nuevo aumentar su nerviosismo. Hay que intentar reconducir este modo de canalizar su ansiedad modificando el ambiente: eliminando los factores estresantes, ayudándoles a que duerman bien para que por el día no tengan sueño, permitiéndoles que jueguen y corran para que no estén en casa con energía por quemar, etc., y si aún están nerviosos, ver con ellos qué actividad podría ayudarles a recobrar un poco la calma.
  • Dejar crecer una uña: si la cosa se alarga mucho, o si cuesta demasiado, se puede intentar llegar a un pacto intermedio, como dejar una uña sin morder, hasta que crezca. Una vez lo consiga, valorar el esfuerzo que le ha supuesto, hacerle saber que estamos orgullosos de ellos, y dejarle elegir cuál será la próxima uña que dejará crecer.

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Fentanilo: Qué es y por qué es tan peligroso

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El fentanilo, un opioide sintético extremadamente potente, se ha convertido en una de las drogas más mortales y peligrosas en el mercado de sustancias ilícitas. El gran problema de esta droga se ha hecho viral después de ver cómo está afectando a la población de Estados Unidos.

En Philadelphia, el ‘youtuber’ Zazza El Italiano daba buena cuenta de los efectos devastadores de esta droga que domina en cada una de las esquinas del barrio de Kensington. En las imágenes del vídeo se aprecian a personas sufriendo espasmos en las aceras, multitud de jeringuillas y gente consumiendo en las mismas calles.

Su llegada ha causado estragos en comunidades de todo el mundo, desatando una crisis de salud pública con consecuencias devastadoras.

Conocido por su efecto narcótico extremadamente rápido y potente, el fentanilo es una amenaza creciente que pone en riesgo la vida de quienes lo consumen y de aquellos que se enfrentan a su tráfico y distribución. Además, el miedo cada vez crece más, pues ya ha llegado a España.

¿Qué es el fentanilo y cómo actúa?

El fentanilo es un poderoso analgésico sintético utilizado originalmente para el tratamiento del dolor intenso, como en el caso de pacientes con cáncer o sometidos a cirugías mayores. Se conoce que es, incluso, hasta 100 veces más potente que la morfina e incluso que la heroína.

Cuando es ingerido, el fentanilo opera en los receptores opioides presentes en el sistema nervioso central, disminuyendo la sensibilidad hacia el dolor y creando una sensación de euforia que guarda similitudes con otros opioides. No obstante, debido a su excepcional potencia, incluso una ínfima dosis de fentanilo puede ocasionar efectos perjudiciales en el organismo, lo que eleva de manera considerable el peligro de sufrir una sobredosis fatal.

La dificultad para detectar el fentanilo en las drogas se agrava por el hecho de que no tiene sabor ni olor, lo que hace que su presencia sea prácticamente imperceptible para los consumidores. Como resultado, aquellos que buscan drogas recreativas corren el riesgo de consumir inadvertidamente el opioide sintético, lo que puede llevar a una sobredosis mortal.

¿Cómo es la sobredosis?

Uno de los factores que ha hecho que esta droga se propague de una manera tan rápida en el país americano  es su coste, entre 3 y 5 euros por dosis. Así como por los efectos inducidos por la sensación de euforia, como la felicidad y una profunda relajación. Sin embargo, los efectos perjudiciales son más numerosos, incluyendo somnolencia, desorientación, sedación, dificultades respiratorias, pérdida de consciencia y ralentización del ritmo cardíaco.

 

De acuerdo con información detallada por la BBC, según un estudio realizado por investigadores del Hospital General de Massachusetts, el fentanilo ocasiona problemas respiratorios hasta cuatro minutos antes de que se manifiesten otros cambios perceptibles o se experimente pérdida de consciencia. Esta es una de las razones que explican por qué el consumo de esta sustancia puede resultar mortal: «Provoca un cese en la respiración en las personas incluso antes de que lo perciban», señaló Patrick L. Purdon, líder de la investigación, según reportó la mencionada fuente.

Las sobredosis de fentanilo son extremadamente peligrosas y pueden ser fatales en cuestión de minutos. Los síntomas de una sobredosis de fentanilo incluyen depresión respiratoria, piel fría y húmeda, confusión, pupilas pequeñas, pérdida de la conciencia e incluso coma. En muchos casos, la persona que ha sufrido la sobredosis puede requerir dosis múltiples de naloxona, un antídoto para opioides, para poder revertir los efectos de la droga y salvar su vida.

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