Miles de seguidores del Castellón vibraron esta tarde con los jugadores de la plantilla que este domingo certificó su ascenso a Segunda División en una celebración en la que una de las ‘estrellas’ fue Óscar, el perro del máximo accionista Bob Voulgaris.

Asomados a las gradas de Castalia que recaen sobre la plaza Teodoro Izquierdo, escenario habitual de las celebraciones albinegras, los jugadores, algunos acompañados de sus hijos, saludaron a los miles de seguidores que habían teñido de blanco y negro no solo esa zona sino las calles colindantes.

Al grito de ‘A Segunda, oé’, los seguidores festejaron el regreso al fútbol profesional de su equipo y vitorearon a los jugadores, al técnico neerlandés Dirk Schreuder, a Volugaris y también a su inseparable Óscar, el can que le ha acompañado casi en cada aparición desde su llegada al club.

El propietario, cuyo nombre fue también coreado, asomó al perro por la grada y los seguidores corearon al unísono su nombre, ya muy conocido en la ciudad.

Tras haber ganado al Murcia este sábado, el Castellón necesitaba que el Córdoba no lo hiciera en el campo del Recreativo Granada para asegurarse el primer puesto del grupo 2 de la Primera RFEF y con él el ascenso directo.

La contundente derrota cordobesa (3-0) permitió que decenas de seguidores acudieran antes incluso de que acabara ese choque a la plaza Teodoro Izquierdo, ubicada junto al estadio Castalia. El Ayuntamiento duplicó el dispositivo de seguridad y sanitario este domingo y volverá a desplegar uno similar este lunes para las celebraciones oficiales, que incluirán un paseo de la plantilla en autobús descapotable y la recepción por parte de la alcaldesa Begoña Carrasco antes de culminar los festejos con los seguidores que hayan acudido a la Plaza Mayor.

Según informó el consistorio, desde este domingo ondea una bandera albinegra en la azotea del Palacio Municipal y el lunes se desplegará una camiseta gigante del club en la fachada del Nuevo Ayuntamiento en la Plaza Mayor.