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Valencia

Caos en Urgencias del Hospital Clínico: hasta dos días de espera

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València, 13 jun (OFFICIAL PRESS – EFE). El sindicato CSIF advierte de la «grave situación» en el servicio de Urgencias del Hospital Clínico.

Los sindicatos CSIF y Satse han denunciado este miércoles la «saturación» del servicio de Urgencias del hospital Clínico de València y exigido un plan de choque inmediato para atender con los medios adecuados a todos los pacientes y paliar el déficit de camas en planta.

Al respecto, fuentes de la Conselleria de Sanidad han informado a EFE de que hay momentos en los que en el hospital se producen situaciones de «picos», se intenta ir subiendo a los pacientes a planta según se van quedando las camas libres y, mientras, se encuentran en una zona de preingreso donde están atendidos.

Las mismas fuentes indican asimismo que hay una mayor actividad quirúrgica y más necesidad de camas y, por ello, se está acometiendo la ampliación del Clínico.

55 pacientes en Observación durante dos días

Según ha informado la Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF), se están produciendo situaciones de 55 pacientes en Observación hasta dos días.

El sindicato denuncia que en la sala de Observación A se hallaban esta mañana 13 pacientes, con una media de espera para ser ingresados en planta de 48 horas.

En Observación B, añade, la situación resulta similar, con 14 pacientes y 44 horas por término medio; mientras que en Observación C aguardaban 10 personas para tener cama, y ocho lo hacían en Preingreso 1.

CSIF informa además de que la elevada cifra de pacientes que necesitan ser ingresados y la falta de camas en planta provocan que, de nuevo, haya tenido que habilitarse la unidad técnico-quirúrgica (UTQ) como sala 2 de Preingreso.

Caos en Urgencias del Hospital Clínico

Este miércoles había en ella diez pacientes ingresados, con 42 horas de media de espera para ser trasladados a planta, asegura el sindicato, que lamenta que Sanidad «no haya adoptado medidas ante una situación que se repite» y exige un plan de choque inmediato para frenar la saturación que sufre el servicio de Urgencias y paliar el déficit de camas en planta.

Por su parte, el Sindicato de Enfermería Satse ha denunciado también en un comunicado que este hospital está «ocupado en su totalidad» y con un servicio de Urgencias «saturado, porque no hay ninguna cama libre en la que ingresar pacientes».

«En estos momentos, hay un paciente oncológico que lleva en Urgencias más de 50 horas esperando una cama en planta», advierte Satse.

Para sobrellevar la situación, añade, se han instalado en Urgencias camas provisionales donde se ha podido y la distancia entre dos camas es apenas la necesaria para que el paciente pueda levantarse, y no sería suficiente para acercar un carro de paradas y atender al paciente en caso de alguna urgencia vital.

«No existe intimidad ni cotas mínimas de dignidad», lamenta el sindicato.

Sin camas, los pacientes esperan en sillas de ruedas

Solo en las Salas de observación de Urgencias, con capacidad de 38 pacientes, ya hay 45 y se espera que, previsiblemente, sigan subiendo a lo largo del día. Mientras, en la Sala de observación B de Urgencias ya no hay espacio para más camas y los están poniendo en sillas de ruedas.

La sala de espera de Urgencias de Traumatología lleva varias semanas transformada en Sala de observación provisional, y es tal la acumulación de pacientes que dos camas provisionales están bloqueando una salida de emergencia de las Urgencias, mientras que algunas camas vacías provisionales y cajas con material sanitario están bloqueando otras salidas de emergencia, poniendo en riesgo importante la seguridad de los trabajadores y pacientes.

Las quejas de los pacientes al personal de Urgencias por las condiciones en las que están son continuas, advierte Satse, que reivindica la necesidad de ajustar la actividad quirúrgica a las posibilidades del hospital y la contratación de más enfermeras y más técnicos en cuidados auxiliares de enfermería para el servicio de Urgencias, de manera que se cumplan las propias recomendaciones del Ministerio.

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Salud y Bienestar

La muerte de la niña de Alzira reabre el debate sobre los riesgos de la anestesia: ¿cuáles son los peligros reales?

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La Sociedad Española de Anestesiología, Reanimación y Terapéutica del Dolor (SEDAR) ha trasladado sus condolencias a la familia de la niña de 6 años fallecida tras haber sido atendida previamente esa misma mañana en una clínica dental privada en Alzira. Además, ha insistido en la importancia de que las sedaciones sean “realizadas exclusivamente por médicos especialistas en Anestesiología y Reanimación”. Estos son los riesgos reales de la anestesia.

Llamamiento a la prudencia y advertencia sobre la falta de información clínica

La SEDAR, en un comunicado, ha hecho un llamamiento a la “prudencia, respeto y responsabilidad institucional”, subrayando que actualmente “se desconocen los datos clínicos y las circunstancias exactas” del suceso. Por ello, remarcan que no pueden valorar causas ni responsabilidades hasta que avance la investigación.

La sedación con fármacos anestésicos generales: un procedimiento de alto riesgo

El organismo científico ha insistido en que las sedaciones que emplean fármacos anestésicos generales son “procedimientos con riesgos potencialmente graves, incluso vitales”. Por ello, recalcan que deben realizarse únicamente por especialistas en Anestesiología y Reanimación, los únicos con formación avanzada en farmacología, fisiología, manejo de la vía aérea, ventilación mecánica y reanimación avanzada.

La SEDAR recuerda que, en los últimos años, ha advertido reiteradamente de un “problema muy serio”: la autorización de sedaciones profundas para ser administradas por profesionales que no son anestesistas. Esto incluye médicos de otras especialidades como neumología, cardiología, digestivo o urgencias, e incluso enfermería, mediante cursos que no equivalen a una especialidad médica completa.

Normativas que permiten sedaciones sin anestesistas: un riesgo para el paciente

Según la SEDAR, estas normativas autonómicas generan un riesgo añadido porque los anestésicos generales pueden provocar “apnea, depresión respiratoria y colapso cardiovascular en cuestión de segundos”. Para la entidad, la administración de estos fármacos “exige la formación avanzada específica” de los anestesiólogos.

“El anestesista es el único profesional con la capacitación completa para realizar sedaciones de forma segura y responder de manera inmediata ante cualquier complicación”, remarcan.

Recomendaciones a los pacientes y mensaje del presidente de SEDAR

La SEDAR recomienda a la ciudadanía que, antes de someterse a una sedación, “pregunten siempre quién la va a realizar y verifiquen que se trata de un médico especialista en Anestesiología y Reanimación”.

El presidente de la sociedad, el doctor Javier García Fernández, ha destacado que “la seguridad del paciente es el compromiso central e irrenunciable de la SEDAR”. Ha subrayado también que “la sedación profunda no es un procedimiento menor” y que toda la comunidad sanitaria debe reflexionar tras un suceso tan grave.

La anestesia siempre conlleva riesgo, incluso en manos expertas

SEDAR recuerda que la anestesiología es una disciplina compleja que requiere vigilancia constante y experiencia. “Incluso realizada por profesionales plenamente cualificados, nunca está completamente exenta de riesgo”, advierten.

Por ello, insisten en que estos procedimientos deben realizarse “bajo los estándares máximos de seguridad” y con equipamiento adecuado.

Compromiso de la SEDAR con la seguridad y la evidencia científica

La entidad afirma que seguirá defendiendo que la seguridad del paciente esté “por encima de cualquier otro factor” y trabajará con evidencia científica para evitar que normativas o decisiones organizativas permitan prácticas que puedan comprometer la salud de los ciudadanos.

 

 

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