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Cultura

Vuelve la música al Jardín Botánico con seis conciertos indie en acústico

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Cartel promocional de la cita. EFE

València, 4 may (EFE).- Saltarinas y AndSons Producciones organizan, junto al Jardí Botánic de la Universitat de València, una nueva edición de «Sons al Botánic» que, tras el parón en 2020 por la pandemia, vuelve con seis conciertos de música indie en acústico del 21 de mayo al 1 de octubre.

La sexta edición de este ciclo de conciertos en la naturaleza vuelve con aforo limitado y las medidas sanitarias para garantizar la seguridad de los grupos y de la asistencia, según han informado en un comunicado.

El público permanecerá sentado en sillas distribuidas con la distancia de seguridad obligatoria entre ellas y los asientos se reservarán en el momento de la compra.

Este año todos los pagos serán telemáticos, los pasillos tendrán un sentido único, y habrá dispensadores de gel hidroalcohólico en diferentes puntos del recinto, para cumplir con la normativa vigente.

La CEO de Saltarinas, Rocío Benavent, ha valorado que en València hay «muchos días de sol, lo que nos permite disfrutar de música en espacios naturales la mayor parte del año, algo que debe aprovecharse más».

«Aunque ha supuesto un esfuerzo extra adaptar el ciclo a todas las medidas, pensamos que es necesario insistir en que la cultura es segura y que el público valenciano vuelva a disfrutar de la experiencia de los conciertos con tranquilidad», ha añadido.

Otra novedad es el cambio en el horario, ya que los conciertos de este año se celebrarán a partir de las 20:45 horas, y la apertura de puertas será a las 20 horas para permitir entrar de forma escalonada.

La programación de «Sons al Botànic» contempla seis conciertos de artistas nacionales e incluye, como es habitual, una banda de representación local, Tardor, que celebrará sus diez años de trayectoria en el Botànic, en su vuelta a los escenarios en la ciudad de València, el 1 de octubre.

El 21 de mayo será el turno de Suu, mientras que el 11 de junio se subirá al escenario Los Hermanos Cubero; el 23 de julio actuará Enric Montefusco, el 20 de agosto Alice Wonder y el 17 de septiembre Guiu Cortés (El Niño de la Hipoteca).

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Cultura

Los secretos de la Casa Judía de València

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casa judia valencia,
Foto: Hugo Román
Los secretos de la Casa Judía de València-Fotos: Hugo Román-OFFICIAL PRESS

Entre los años 20 y 30 del siglo pasado el art déco dominaba en todas las artes decorativas a nivel mundial.

Había nacido en París y pronto Hollywood lo popularizó como símbolo de glamour.

Y esos aires y aquella esencia de aquella Belle Époque o los llamados Años Locos quedaron inmortalizados en una de las edificaciones más asombrosas de València.

El art déco bebía de todas las culturas, reutilizando de manera libre los elementos arquitectónicos de otras épocas.

Plasmaban los asombrosos hallazgos de aquellos tiempos.

En Egipto como el  descubrimiento de la tumba de Tutankamón, así como de culturas mesopotámica, africana, azteca, maya, hindú que fueron dotándole de un exotismo y una belleza única.

Los secretos de la Casa Judía de València

Caminando por la calle Castellón, en el número 20 nos encontramos con toda una joya que aguarda la mirada de los curiosos que se detienen para admirar un amalgama de formas y colores único.

Entre Germanías y la Estación del Norte está la conocida como Casa Judía de València, que fue construida hacia 1930 por el arquitecto valenciano Juan Francisco Guardiola Martínez.

Nacido en Sueca en 1895 en el seno de una familia de clase media, se trasladó a Barcelona en 1917 para estudiar arquitectura.

Allí fue premiado en  1922  por el proyecto de la estación de metro de la Plaza de Cataluña.

Según cuentan, los diversos viajes que realizó el arquitecto por Asia pudo influir en él a la hora de diseñar el estilo del edificio levantado en el ensanche de la capital valenciana a petición de Yosef Shalóm.

Su apellido nos da la pista del sobrenombre de Casa Judía.

Casa Judía.- Años treinta.- Archivo Ana María Ferrín.

La fachada de la Casa Judía

Un detalle de sus orígenes nos recibe en el dintel de la puerta principal, en el frontón curvilíneo.

Ahí se aprecia una estrella de seis puntas rematado por dos volutas y una hoja de acanto en el arco final.

Su fachada dividida en tres cuerpos, basamental, central y superior, nos transporta sin movernos de la calle a escenarios babilónicos y egipcios por su colorido y las formas de sus columnas, capiteles, remates con forma de pagoda y ventanas ojivales.

Si levantamos la vista podemos admirar el impresionante remate del edificio de inspiración oriental, árabe e hindú.

Foto: Hugo Román

Según cuentan ​en el edificio se reunía de manera discreta la reducida comunidad judía de la época que residía en València para realizar sus celebraciones religiosas.

¿Cómo es en la actualidad?

En la actualidad en el edificio de siete alturas viven familias particulares.

Las viviendas tienen unos 100 m2 cada una, y originalmente contarían con tres habitaciones, un baño, una cocina y un comedor.

Tan solo su fachada, su zaguán y la decoración exterior e interior mantienen la esencia de aquellos años en los que el arte iba asociado a la construcción, en el que cada ladrillo tenía una misión estética.

Años en los que los edificios eran monumentos esperando ser habitados.

Muchos comentan que su fachada parece salida del decorado de la película del Mago de Oz o tal vez de la mente de Tim Burton.

La Casa Judía no es un edificio protegido

Inspiradora y evocadora permanece allí pese a la bomba que cayó cerca durante la guerra y a pesar de que en alguna ocasión haya sufrido modificaciones debido a que, incomprensiblemente, no está protegida.

De hecho los remates del edificio de estilo hindú que lo coronaban fueron retirados en el pasado y su plantas baja han alterado su estilo original.

Guardiola falleció en Alzira en 1962.

Su trayectoria como arquitecto fue amplia con proyectos de viviendas residenciales, fábricas, almacenes, iglesias, teatros y cines, una estación y un banco.

Entre las más destacadas están el Ateneu del Socors en Sueca (1927) y la Casa Xina o Casa Ferran Guardiola en Barcelona (1929) que muestran su talento y originalidad.

Pero sin duda, la Casa Judía es su gran obra maestra.

Una obra que contempla el pasar de los años desde su espectacular fachada, una fachada que nos hace viajar a lugares remotos sin salir de la ciudad.

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