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La Lotería de Navidad podría subir el precio del décimo

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Si me encuentro un décimo de Lotería de Navidad que resulta premiado, ¿puedo cobrarlo?
EFE/ Biel Aliño

La actual crisis energética que azota a España y al resto de Europa, así como el alto coste de la vida, podría afectar a una tradición muy arraigada en nuestro país como es tradicional Lotería de Navidad.

El precio de un décimo de lotería del sorteo extraordinario de Navidad es de 20 euros. Un precio que, desde la entrada en vigor del Euro —en 2002— se ha mantenido y que podría ser superior de cara al próximo 2023.

Una decisión que la mayoría de loteros no comparten, ya que supondría que muchos ciudadanos dejasen de jugar ‘El Gordo’, y otros tantos decidiesen adquirir menos cantidad de boletos para dicho sorteo.

Pero esto puede cambiar dentro de muy poco, según ha advertido el presidente de Loterías y Apuestas del Estado, Jesús Huerta Almendro.

Preguntado acerca de esta cuestión que se encuentra encima de la mesa, el presidente de Loterías y Apuestas del Estado, Jesús Huerta Almendro, ha afirmado que «en algún momento» subirá el precio del décimo de la lotería de Navidad. ¿Será el próximo 2023?

Huerta ha explicado que «es verdad que en los últimos 22 años lo único que no ha subido ha sido el precio de la Lotería, es posible que sea lo único, no sé si hay algún otro ejemplo, no solo de la Lotería de Navidad, sino de la Primitiva, etc….».

Además ha argumentado lo que puede pasar en el futuro: «En algunos momentos, y lo hemos hablado con las asociaciones de puntos de venta, hemos barajado la posibilidad de hacer una subida, aunque fuera testimonial, pero al final hemos intentado no gravar más las posibilidades de la sociedad, aunque en algún momento tendrá que subir», ha reiterado.

Aumento del precio

Hay que remontarse al año 1966 para observar que un décimo de lotería costaba 500 pesetas, según los datos publicados por Loterías y Apuestas del Estado.

Sin embargo, en el año 1967 el precio del billete se incrementó por primera vez hasta alcanzar las 1.000 pesetas. Una cifra que se mantuvo durante 13 años hasta que, en 1977 jugar un décimo de lotería costaba 2.000 pesetas.

Entre los años 1980 y 1990, apostar la décima parte de un billete del sorteo navideño supuso un gasto de 2.500 pesetas para el bolsillo de los españoles.

Ya en la década de los noventa, concretamente en el año 1991, el precio del décimo alcanzaba las 3.000 pesetas; lo cual supuso un nuevo aumento de 500 pesetas.

Un precio en el décimo que se mantuvo hasta el 2001, el último año en el que el sorteo de la Navidad se jugó con las antiguas pesetas.

El último incremento que ha sufrido el billete del sorteo de ‘El Gordo’ de Navidad fue en el año 2002 tras la llegada del Euro a nuestro país.

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Qué es el Plan Auto 2030 y cómo puedes optar a hasta 7.000 euros para comprar un coche

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Revisión coche y documentación

La industria española del automóvil atraviesa uno de los momentos más delicados de su historia reciente. Tras años ocupando una posición destacada en el panorama internacional como segundo fabricante europeo y octavo del mundo, España ha perdido parte de su peso industrial, superada ahora por Brasil. La caída de la demanda en Europa y el frenazo en la producción han llevado al sector a movilizarse como no lo hacía desde hace décadas.

Un sector en retroceso desde la pandemia

Antes del Covid, la automoción europea vendía alrededor de 19 millones de vehículos al año; actualmente apenas alcanza los 15 millones. Este desplome ha tenido un impacto directo en España: las fábricas nacionales producen dos millones de vehículos menos que hace unos años, una pérdida que equivaldría a mantener paradas las 16 plantas españolas durante un año completo.

Ante esta situación, las principales asociaciones del automóvil, encabezadas por Anfac, han logrado unir a fabricantes, concesionarios, agentes sociales, eléctricas, comunidades autónomas e instituciones para elaborar un diagnóstico común y una propuesta de actuación. El resultado es el Plan Auto 2030, un programa integral que cuenta con sintonía por parte del Ministerio de Industria, liderado por Jordi Hereu, y que busca frenar el deterioro del sector.

Por qué el sector reclama el Plan Auto 2030

El mensaje de la industria es claro:
si no se venden más coches en España, las fábricas no podrán mantener los volúmenes actuales de producción.

Para evitarlo, el sector pide al Gobierno un plan nacional que combine medidas de apoyo industrial y un nuevo impulso a la demanda mediante ayudas directas a la compra. Este paquete de estímulos deberá corregir los errores del actual Moves, que ha generado retrasos, incertidumbre y diferencias de aplicación entre comunidades autónomas.

Cómo funcionarían las ayudas: hasta 7.000 euros para vehículos electrificados

Aunque el Gobierno aún no ha presentado la versión definitiva del Plan Auto 2030, las líneas generales ya están consensuadas. Para los compradores particulares, las claves serían las siguientes:

Ayudas directas descontadas en la factura

El sector reclama que los incentivos se apliquen de forma inmediata, restándose del precio final del coche en el concesionario. Esto eliminaría la espera de meses o incluso años que actualmente sufren los beneficiarios del Moves.

Vehículos beneficiados

Las ayudas estarían enfocadas principalmente a:

  • Coches eléctricos 100 %

  • Híbridos enchufables

  • Posible inclusión de híbridos no enchufables, pero con cuantías inferiores

Cuantía estimada

La propuesta mantiene cifras similares a las del Moves, con ayudas que oscilarían entre 4.000 y 7.000 euros en función del vehículo y las condiciones de achatarramiento.

Exención en el IRPF

Uno de los objetivos del plan es que las ayudas no tributen en la declaración de la renta, eliminando así una de las principales barreras del Moves.

Gestión centralizada

El sector exige que los fondos se gestionen de forma estatal y no autonómica, para evitar desigualdades entre regiones y retrasos como los actuales, que han dejado a miles de compradores sin cobrar pese a tener aprobada la ayuda.

Los fallos del Moves que el Plan Auto 2030 quiere corregir

El Moves se ha visto afectado por diversos problemas:

  • Largas esperas para cobrar las ayudas, que en ocasiones superan los dos años.

  • Comunidades que aún no han puesto en marcha la convocatoria.

  • Otras regiones que se han quedado sin fondos meses atrás.

  • Incertidumbre para miles de compradores que no saben si cobrarán la subvención aprobada.

El Plan Auto 2030 se inspira en modelos regionales de éxito, como el Plan Reinicia Auto impulsado en la Comunitat Valenciana tras la dana, donde las ayudas fueron rápidas, directas y eficaces.

Un riesgo para miles de compradores del Moves

Las asociaciones del automóvil alertan de que el Moves actual corre el riesgo de quedar abandonado si no se habilita una nueva partida presupuestaria. Sin esos fondos, miles de beneficiarios podrían no llegar a recibir nunca las ayudas prometidas, incluso aunque ya estuvieran aprobadas.

Un plan decisivo para el futuro de la automoción en España

El Plan Auto 2030 se presenta como una herramienta clave para revitalizar la demanda, sostener la producción, acelerar la electrificación y asegurar la posición estratégica de España en el sector. En un momento de transición tecnológica y competencia global, la industria considera que el país se juega una parte esencial de su tejido económico.

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