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Salud y Bienestar

Alimentación para la artrosis: qué comer y qué no

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Alimentación para la artrosis
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La alimentación para la artrosis es clave para su evolución. Hablamos de una enfermedad degenerativa que consiste en el desgaste del cartílago articular y que puede ser progresivo. Puede afectar a cualquier articulación, pero las más frecuentes son las de columna cervical, lumbar, rodilla, cadera y manos, siendo la de la columna lumbar la más prevalente en España, según las estadísticas que aparecen en el estudio de la Sociedad Española de Reumatología.

Al envejecer, las posibilidades de padecerla aumentan porque la masa ósea desciende, siendo más frecuente en las mujeres a partir de los 55 años. Y aunque en la actualidad no existe una cura para dicha enfermedad, existen determinadas acciones para prevenirla o retrasar su evolución.

Realizar ejercicio de manera regular y llevar una alimentación para la artrosis son clave para conseguirlo. Te contamos qué alimentos son recomendados para prevenir su aparición y cuáles están prohibidos al padecer artrosis.

Alimentos saludables para combatir la artrosis

La alimentación es esencial para prevenir la artrosis, por lo que es fundamental que sigas un plan de alimentación equilibrado para asegurar al organismo los nutrientes necesarios para los huesos. Los alimentos tienen que poseer propiedades antiinflamatorias.

  • Alimentos ricos en antioxidantes. El consumo de alimentos que contienen antioxidantes, así como vitamina A, C y E es beneficioso, puesto que combaten con otros agentes que circulan por el organismo y son capaces de desgastar el cartílago. Las calabazas, boniatos, frutas cítricas, kiwis, pimientos rojos destacan por su vitamina C. Los frutos secos y semillas por su alto contenido en vitamina E.
  • Alimentos ricos en omega-3. Los alimentos de origen animal como los pescados grasos como el salmón, la caballa o las sardinas, así como los de origen vegetal como las nueces y las semillas de chía, son la principal fuente de omega-3 de la dieta. Tiene propiedades antiinflamatorias y es bueno incluirlos regularmente en la alimentación.
  • Aceite de oliva virgen extra. Un alimento de los más beneficiosos gracias a su alto contenido en ácidos grasos monoinsaturados y fenólicos, ya que consigue reducir el dolor por sus propiedades antiinflamatorias.
  • Brócoli. Este alimento contiene un compuesto conocido como sulforafano, es rico en vitaminas K y C, por lo que, al igual que el calcio, es capaz de fortalecer los huesos.

Alimentos prohibidos cuando se tiene artrosis

La alimentación no puede curar la artrosis, pero sí puede hacer que la enfermedad sea más llevadera y evitar que avance de forma rápida.

Es recomendable evitar alimentos proinflamatorios cuándo se padece artrosis, como carnes rojas, embutidos, fiambres y azúcares presentes en dulces. Además, el consumo excesivo de alcohol tampoco es aconsejado, ya que produce un aumento del ácido úrico en el organismo, lo que agrava los problemas articulares.

Fuente: CATALANA OCCIDENTE

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Salud y Bienestar

Si tienes estos síntomas, podrías sufrir diabetes

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síntomas diabetes

El 14 de noviembre se celebra el Día Mundial de la diabetes. Una enfermedad que sólo en España afecta a más de 5,3 millones de personas, según datos de la Federación de Diabéticos Españoles.

La diabetes es una enfermedad crónica provocada cuando el organismo no es capaz de regular la cantidad de azúcar en sangre, provocando una falta parcial o total del efecto de una hormona llamada insulina y que se caracteriza por un aumento de la glucosa (azúcar) en sangre.

Hay dos tipos de diabetes:

La tipo 1, cuyo origen está en los genes y factores ambientales, como los virus, que pueden desencadenar la enfermedad. Y está la más común: la tipo 2. Viene motivada por un estilo de vida poco saludable, ya que el sobrepeso y el sedentarismo aumentan el riesgo. El exceso de peso y la grasa abdominal se relacionan con la resistencia a la insulina.

Mientras que los síntomas de la diabetes tipo 1 se diagnostican de inicio, los del tipo 2 avanzan más despacio, llegando a manifestarse a edades más adultas, e incluso puede que el paciente desconozca que sufra esta enfermedad, dado que son tan habituales que pueden dar lugar a confusión.

Síntomas de la diabetes:

-Aumento de la sed y de las ganas de orinar
-Aumento del apetito
-Fatiga
-Visión borrosa
-Entumecimiento u hormigueo en las manos o los pies
-Úlceras que no cicatrizan
-Pérdida de peso sin razón aparente

Esta enfermedad también puede aparecer durante el embarazo. Es lo que se conoce como ‘diabetes gestacional’ y viene marcada por cambios hormonales, factores genéticos y factores del estilo de vida.

La Fundación para la Diabetes da algunas pautas para reducir el riesgo de diabetes tipo 2:

-Mantener el peso normal o perder más de un 5% si existe sobrepeso
-Adherirse a la dieta mediterránea
-Realizar un consumo de grasa inferior al 30% de las calorías diarias. De ese porcentaje, menos de un 10% debe provenir de la grasa animal (saturada)
-Incluir más de 15 gramos de fibra natural por cada mil calorías ingeridas al día
-Practicar actividad física regular durante más de 30 minutos al día, al menos 5 días a la semana
-Dejar el tabaco y limitar el consumo de alcohol

Los médicos de la dirección general de Salud de DKV, alertan sobre la importancia de que las personas que padecen diabetes realicen controles periódicos del nivel de azúcar y lleven un exhaustivo control de los alimentos que ingieren.

Enfermedades futuras

La diabetes, a largo plazo, puede presentar las siguientes complicaciones: retinopatía (una enfermedad de la retina que puede ocasionar ceguera); neuropatía diabética, que puede provocar alteraciones en la sensibilidad, dolores, úlceras e infecciones en los pies; nefropatía diabética (lesión renal por la diabetes), que puede degenerar en insuficiencia renal; y arterioesclerosis, particularmente en fumadores y en las personas que tienen una presión sanguínea alta.

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