Síguenos

Firmas

El sistema de financiación autonómica, ¿será justo?, por @frandisiz

Publicado

en

Paco Ferrandis

El pasado día 1 de febrero tuvo lugar la reunión entre el Presidente Puig y la Vicepresidenta Santamaría , donde se trató sobre el nuevo sistema de financiación autonómica. El encuentro fue calificado por Ambo como «fructífero» y que transcurrió en un clima de «lealtad institucional» (tal vez para remarcar la diferencia con el clima de «deslealtad constitucional» que se respira en Cataluña ), al tiempo que servir para estudiar cuestiones acordadas en la reciente Conferencia de Presidentes Autonómicos .

Precisamente, fue la finalización de dicha Conferencia (a la que no asistieron las máximas autoridades de Cataluña y Euskadi , dado que quieren comer aparte ) donde se constató que el eje del debate no iría en la dirección de acabar con las injusticias que provoca el actual sistema de financiación, fundamentalmente hacia la Comunidad Valenciana en cuanto que es la única con una renta per cápita inferior a la media estatal que debe aportar recursos a otras comunidades con un nivel de renta superior. No, el debate que transcedir a la opinión pública fue el iniciado por la Presidenta de Andalucía Susana Díaz , en cuanto a la necesidad de fijar unos límites a la potestad impositiva de las comunidades autónomas, a fin de evitar el dumping tributario.

Como no, el guante fue recogido por la Presidenta madrileña Cristina Cifuentes que, con la ayuda inestimable de los medios de comunicación con sede en Madrid , se dedicó a alabar las virtudes del sistema tributario de la capital de España , pasando por alto el gran privilegio que supone para esa comunidad tener en su territorio la capitalidad del Estado (sede de Ministerios, medios de comunicación, empresas más importantes, museos y servicios culturales, aeropuerto como plataforma intercontinental, con un sistema estatal de comunicaciones que confluyen en la capital …).

La preeminencia mediática del debate político entre las dirigentes de Andalucía y Madrid y la negativa del Gobierno a establecer la retroactividad del nuevo sistema de financiación en el año 2014, fueron el toque de alerta sobre la imposición de la dura realidad al juego político, donde la prioridad no pasa por los climas de «lealtad institucional» y la lucha heroica contra las desigualdades y las injusticias sociales. No, en política el primer objetivo es la conquista y el posterior mantenimiento del poder. Y, como sucede en la etapa actual del sistema político español -donde el Gobierno no dispone de una mayoría absoluta- lo que es prioritario pasa por atender las exigencias de las fuerzas políticas capaces de prestar su apoyo para gobernar, o de aquellas que plantean retos poderosos a la integridad del territorio español.

En ese sentido, Ciudadanos y Coalición Canaria ya votaron a favor de la investidura de Mariano Rajoy como Presidente del Gobierno, lo que fue posible con la abstención de un PSOE que se había deshecho de Pedro Sánchez y era controlado por la andaluza Susana Díaz. Como hemos dicho antes, el PNV desea establecer unas relaciones bilaterales con el Gobierno, al tiempo que se deja querer cuando se trata de la aprobación de los Presupuestos Generales del Estado para 2017. Es claro que los apoyos de unos y otros se deberá pagar con inversiones y privilegios hacia los territorios correspondientes. Además, habrá que hacer partícipes de esas inversiones y privilegios a las fuerzas soberanistas catalanas, porque desisten del despliegue del «proceso» hacia la independencia (más virtual que real). El nombramiento de Dolors Montserrat como cuota catalana en el Gobierno central y la apertura a Barcelona del palacete-residencia de la Virreina Soraya , son gestos que avanzan la predisposición de Madrid para contentar el Gobierno rebeldes de Cataluña.

En dicha reunión con Soraya Sáenz de Santamaría, Ximo Puig le trasladó la necesidad de que los Presupuestos Generales del Estado tuvieran sensibilidad con la Comunidad Valenciana y con los déficits acumulados durante años. No obstante, la correlación de fuerzas políticas nos lleva hacia un nuevo sistema de financiación similar al vigente, que fue aprobado por el Gobierno socialista de Rodríguez Zapatero ; es decir, una financiación favorable en Canarias (por el apoyo de Coalición Canaria), Andalucía (por los servicios prestados por Susana Díaz en la investidura de Rajoy) y Cataluña (para intentar la neutralización del «proceso»). Y no hablemos de Euskadi porque funciona de maravilla con el concierto económico.

Llegados a este punto, resulta manifiesta la incapacidad negociadora de las fuerzas firmantes del Acuerdo del Botánico que, aferradas al dogma fusteriano, tan sólo podrán ver como pasa delante de sus narices un nuevo sistema de financiación autonómica que, una vez más, sacrificará buena parte de los bienes de los valencianos para dar satisfacción a los intereses de los pueblos canario, andaluz, vasco y catalán. Quien no conoce la idiosincrasia del nacionalismo valenciano se sorprende al observar que los cuatro diputados de Compromís no se hagan valer a la hora de condicionar el sentido de las leyes aprobadas por el Congreso , hacia una mejora de las condiciones de vida del pueblo valenciano, así como para participar en el diseño de la nueva planta del sistema constitucional español.

Mas, como » lo que no puede ser, no puede ser, y además es imposible «, sólo la mejora de la economía, por la salida de la crisis, podrá mitigar los efectos nefandos del nuevo-viejo sistema de financiación. Eso sí, nos dejaremos las fuerzas denunciando las desigualdades y las injusticias sociales y, sobre todo, continuaremos hablando de la corrupción … De pena!

Advertisement
Click para comentar

Tienes que estar registrado para comentar Acceder

Deja un comentario

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.

Firmas

Qué pasó un 22 de julio

Publicado

en

Qué pasó un 22 de julio

José Luis Fortea

………….corría el verano de 1975, aquel en el que no cesaba de sonar en las radios el Bimbó de Georgie Dann, que acabaría siendo declarada oficialmente la canción del verano, aquel en el que Televisión Española emitía su series detectivescas de moda, las de “Tony Baretta” y “Kojak” y que amenizaba desde el pasado mes de abril, la noche de los sábados, con un nuevo programa llamado “Directísimo”, presentado por un joven bilbaíno de treinta y tres años, de grandes bigotes, llamado José María Íñigo Gómez.

Bernard Thévenet

Aquel verano, en el que ganaba el tour, contra todo pronóstico, el francés Bernard Thévenet, imponiéndose a un Eddy Merckx, líder desde la sexta jornada, que había sido golpeado por un espectador en su costado derecho en el ascenso al Puy de Dome, presentando desde entonces unas molestias que le harían perder a partir de aquella etapa, la decimocuarta, el maillot amarillo y que no lo volvería a recuperar, de un periodo estival más que sofocante y tórrido, en el que una caña en aquellos días costaba entonces diez pesetas, de aquel verano, el del 75, el último del jefe del Estado español, que fallecería cinco meses más tarde.

Qué pasó un 22 de julio

El martes 22 de julio, de un día como hoy, de hace más de cuarenta años , a unos cincuenta y tres kilómetros de Sevilla, en el término municipal de Paradas, iba a tener lugar uno de los sucesos más trágicos de los últimos tiempos, que acabaría por convulsionar la vida de sus cerca de ocho mil habitantes, de un terrible episodio que en los juzgados terminaría conociéndose como el expediente 20/75.

A unos cuatro kilómetros de la mencionada población de Paradas, se encuentra la finca de los Galindos, perteneciente, desde hace seis años, a Gonzalo Fernández de Córdoba y Topete, marqués de Grañina, donde suele acudir esporádicamente, en tiempo estival, sin la compañía de su mujer, María de las Mercedes Delgado Durán. Al frente del aludido inmueble, se encuentra Manuel Zapata Villanueva, de cincuenta y nueve años, antiguo legionario y miembro de la Guardia Civil, que allí vive junto a su mujer Juana Martín Macías, de cincuenta y tres años, desempeñando las tareas de capataz, en unos terrenos dedicados principalmente al cultivo de la aceituna.

En el cortijo trabajan siete personas, tres tractoristas y cuatro temporeros, que a eso de las ocho de la mañana, de aquel martes día 22, ya se encuentran allí para ponerse a bregar, antes de que el sol les ajusticie con esos 49 ºC que alcanzarán a lo largo de aquella misma mañana. Zapata, como de costumbre, es quien distribuye “la faena”, mandando a las alpacas, a medio kilometro de la finca, al tractorista José González Jiménez, a un segundo tractor, junto con tres braceros, a la parte posterior del cerro y al tercer tractorista Ramón Parrilla a regar garrotes (que son los troncos de los olivos metidos en bolsas con tierra) de una jornada laboral que se prolongará hasta la una, momento en el que harán un alto en el camino para almorzar, durante cerca de media hora, y proseguir hasta eso de las cuatro de la tarde, cuando el mercurio se encarame en lo más alto de los termómetros respondiendo al calor abrasivo de esos casi cincuenta grados.

Y es entonces, sobre esa hora de las cuatro de la tarde, cuando el grupo de los tres temporeros que se encuentran en la parte del cerro observan salir un humo negro y espeso del cortijo, dirigiéndose rápidamente hacia allí.

Al llegar al lado de la verja de la entrada, encuentran restos de lo que parece un reguero de sangre, que les hace presagiar que alguien pudiera haber resultado herido, de un rastro abundante que dibujando un movimiento sobre la tierra serpenteante poco a poco se va diluyendo hasta llegar a desaparecer, por lo que Antonio Escobar, uno de aquellos trabajadores, acude raudo hacia el cuartel de la Guardia Civil, para dar el pertinente aviso, mientras Antonio Fenet Pastor, que lleva cinco años trabajando las tierras de Los Galindos, divisa lo que le da la sensación son dos cuerpos mutilados en aquel fuego que acelerado con gasolina desprende un olor más que nauseabundo, decidiendo no indagar más, hasta la llegada de la Benemérita.

No tardan mucho en personarse en el cortijo el cabo Raúl Fernández acompañado de un número de la Guardia Civil, para realizar las primeras diligencias de investigación. Al entrar en la casa, observan, al lado de una mesa camilla, otro gran charco de sangre, cuyo rastro se dirige pasillo arriba, hacia donde se encuentra la puerta de una habitación cerrada con un candado, colocado en la parte exterior, que fuerzan para poder acceder a su interior, encontrándose una vez dentro, el cuerpo de Juana Martín, la mujer del capataz, con la cabeza destrozada, golpeada por algún objeto romo, no hallándose nada más reseñable en la vivienda.

En el exterior, donde todavía permanece encendido aquel fuego, aparecen los restos casi calcinados del tractorista José González, Pepe, de 27 años y su esposa Asunción Peralta, seis años mayor que él, de 34 años, a quien al parecer había ido a recoger al pueblo para traerla allí, en algún momento de aquel día, aparcando su seiscientos de color crema en la entrada del cortijo, desconociéndose los motivos.

En la cuneta del llamado Camino de Rodales, cubierto con un montón de paja, se descubre un cuarto cuerpo sin vida, el del jornalero Ramón Parrilla, de 40 años de edad, tractorista eventual de la finca, muerto de un disparo de escopeta.

De Zapata, el capataz de la finca de Los Galindos, no hay rastro alguno, por lo que las primeras sospechas recaen sobre este, emitiéndose incluso, a la mañana siguiente, por el recién llegado juez del juzgado de Écija (al estar el de Carmona de vacaciones) Andrés Márquez Aranda la pertinente orden de busca y captura.

Al parecer, en los mentideros del pueblo, se decía que las relaciones entre el capataz y el tractorista Pepe no eran todo lo buenamente deseables que podían ser, fruto de un intento de José González por cortejar a una de las hijas de Zapata, negándose este a dicha relación, enemistando en cierta manera a ambos. Lo cual fue considerado como un posible móvil de aquel crimen, aunque no resolvía las dudas existentes sobre las restantes muertes.

Y fue entonces cuando tres días más tarde, el 25 de julio apareció el cadáver del capataz, que tras la autopsia realizada determinaría que había resultado ser la primera de las víctimas de aquel crimen que ya sumaba con esta, cinco muertes, desarbolando la hipótesis que se había venido considerando como probable.

El sumario del caso, el denominado expediente número 20 de 1975, con más de mil trescientos folios, ha dado a lo largo de la historia numerosas elucubraciones y teorías que no han podido resultar finalmente probadas, recayendo durante años las sospechas, tras haber sido encontrado el cuerpo de Manuel Zapata, sobre José González Jiménez que juzgado y condenado por el pueblo tendría que esperar hasta la exhumación de los cadáveres mediante orden emitida por el juez Heriberto Asensio que acabaría determinando que el “sospechoso” era, de igual forma, triste víctima de este suceso, y que además en opinión del prestigioso médico forense Luis Frontela Carreras, estudiando aquellas manchas de sangre en el piso encontradas, concluiría que a –“Juana la arrastraron desde el comedor hasta el dormitorio entre dos personas por lo menos”- .

Transcurrido los plazos legales previstos sin encontrarse el culpable de estos hechos, la causa quedaría archivada en el año 1988, y siguiendo el principio que extingue la responsabilidad criminal por el transcurso del tiempo, siendo para este tipo de delitos el previsto de veinte años, fue por tanto declarado su prescripción en 1995, a los veinte años de haberse cometido.

Puedes seguir toda la actualidad visitando Official Press o en nuestras redes sociales: Facebook, Twitter o Instagram y también puedes suscribirte a nuestro canal de WhatsApp.

Continuar leyendo