Síguenos

Otros Temas

Los conductores valencianos son los sextos con mejor nota al volante, un 97,2 sobre 100

Publicado

en

VALÈNCIA/MADRID, 8 Ene. (EUROPA PRESS) – Los conductores de la Comunitat Valenciana son los sextos con mejor nota al volante de España al registrar una nota de 97,21 sobre 100, ligeramente por encima de la media de un 87,13, según se desprende de un estudio elaborado por DriveSmart que analiza cómo han conducido los españoles en 2018,

En el conjunto del país, uno de cada tres españoles (33%) se considera muy buen conductor, mientras que otro tercio (32%) se describe como bueno y un 23% se valora como excelente. Por contra, el 12% no sabe cómo calificarse, un 3% se considera regular y solo uno de cada 200 españoles (0,5%) cree ser malo al volante.

Según el informe, la nota media de los conductores españoles asciende a 97,13 sobre 100, tras haber mejorado desde el 95,52 que alcanzaban en 2017 y el 94,66 de 2016.

Por encima de la puntuación de 2018 se sitúan Baleares (con 98,24), Canarias (98,19), Asturias (97,94), Cantabria (97,64), Extremadura (97,54) y la Comunitat (97,21). Por debajo, Murcia se convierte en la comunidad con la peor puntuación al volante (96,23), seguida de Castilla La Mancha (96,32), Andalucía (96,36) y Galicia (96,61).

Con una puntuación de 98,23, Santa Cruz de Tenerife es la provincia con mejor nota al volante de España, seguida de Huesca con 97,69. En el extremo opuesto se sitúa Girona, que con una puntuación media de 93,66, es la provincia con la peor nota, seguida de Ávila con un 94,31.

De media, el estudio recoge que cada conductor español acumula 31 incidencias al volante por cada 100 kilómetros recorridos con el coche, menos de la mitad que en 2015, cuando la cifra era de 68, y menor también que en 2016, cuando bajaba hasta 52, y que en 2017, con 56.

Los datos han sufrido una mejora progresiva desde inicio de año, pasando de una cifra media de 43 incidencias por cada 100 kilómetros recorridos por cada conductor en enero, a 32 en noviembre, una media que ha subido en diciembre hasta las 36.

Por comunidades, el número disminuye notablemente en Asturias y Canarias, con una media de 20 y 21 incidencias respectivamente, seguidas de Castilla y León y Extremadura, con 28. Por el contrario, las comunidades con más incidencias al volante son Galicia (42), Andalucía (39) y Madrid (36).

El 80% de las incidencias que se registran al volante corresponden a excesos de velocidad. Así, de la media de 43 incidencias acumuladas en enero, 35 son excesos de velocidad, un porcentaje que se mantiene proporcional a lo largo del año, disminuyendo desde el mes de julio hasta noviembre, que alcanza las cifras más bajas (32 incidencias totales por cada conductor, de las que 25 corresponden a excesos de velocidad).

Advertisement
Click para comentar

Tienes que estar registrado para comentar Acceder

Deja un comentario

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.

Otros Temas

Rosas: El lenguaje de las flores y las declaraciones románticas

Publicado

en

Rosas: El lenguaje de las flores y las declaraciones románticas

El lenguaje de las rosas: cuando el alma florece en silencio

Hay palabras que no necesitan pronunciarse. A veces, basta con el roce de unos pétalos o el aroma dulce de una rosa para decir lo que el corazón calla. Así nació el lenguaje de las rosas, un idioma silencioso donde cada color, cada tallo y cada espina cuentan una historia de amor, deseo, perdón o esperanza.

El lenguaje de las flores, también conocido como floriografía, se popularizó en la época victoriana, cuando los gestos eran más elocuentes que las palabras. En los salones y jardines de la alta sociedad, un simple ramo podía expresar lo que una carta jamás se atrevía a escribir. Entre todas las flores, la rosa reinó como símbolo supremo del amor, la belleza y la pasión.


La historia del lenguaje de las rosas

Aunque su apogeo se dio en el siglo XIX, el simbolismo de las rosas tiene raíces más antiguas. En la mitología griega, se decía que la rosa roja nació de las lágrimas de Afrodita al llorar por su amado Adonis. En Roma, las rosas decoraban los banquetes del amor y el secreto: de ahí la expresión sub rosa, “bajo la rosa”, que significaba confidencialidad.

Durante la Edad Media, los caballeros ofrecían rosas a sus damas como promesa de fidelidad. Con el tiempo, este gesto evolucionó hasta convertirse en un lenguaje universal, capaz de expresar emociones con solo un color o una combinación de pétalos.


El significado de los colores en el lenguaje de las rosas

Cada color de rosa es un mensaje distinto, una emoción que florece con su propio matiz.

Rosa roja: el amor eterno y la pasión ardiente
La rosa roja es el emblema del amor profundo. Representa la entrega total, la admiración y el deseo. Una sola rosa roja puede decir “te amo” con una fuerza que ninguna palabra iguala.

Rosa blanca: pureza, sinceridad y nuevos comienzos
Símbolo de inocencia, la rosa blanca habla de amores puros, de promesas verdaderas y de corazones que comienzan un nuevo camino juntos. Es la favorita en bodas y reconciliaciones, donde el alma busca un renacer.

Rosa rosada: dulzura, gratitud y ternura
El rosa transmite delicadeza y cariño. Una rosa rosada expresa admiración, aprecio y gratitud. Es el detalle perfecto para agradecer un gesto o celebrar una amistad que florece con el tiempo.

Rosa amarilla: amistad, alegría y energía
Vibrante y luminosa, la rosa amarilla simboliza la alegría de compartir la vida. Representa la amistad sincera, el optimismo y la celebración. Sin embargo, en tiempos antiguos también evocaba celos o amores no correspondidos, lo que le añade un matiz de misterio y dualidad.

Rosa azul: misterio y deseo imposible
No crece de forma natural, y quizás por eso la rosa azul es símbolo de lo inalcanzable. Habla del amor idealizado, de los sueños imposibles y de la belleza de aquello que no puede tenerse. Regalar una rosa azul es decir: “Eres única, un misterio que no deseo resolver”.

Rosa negra: despedida, transformación y renacimiento
Aunque suele asociarse a la muerte o el adiós, la rosa negra también encierra poder y renacimiento. Representa los finales que abren paso a nuevas etapas, el cierre de un ciclo y la fuerza para comenzar de nuevo.

Rosa naranja: fascinación y deseo
Entre el rojo y el amarillo, la rosa naranja arde con pasión y entusiasmo. Es la flor del deseo, la admiración intensa y la energía de un amor que está naciendo.

Rosa lavanda o violeta: amor a primera vista y encanto místico
Su tono delicado evoca el amor instantáneo, la atracción inexplicable y los vínculos espirituales. Una rosa lavanda dice: “Desde que te vi, supe que eras tú”.


Combinaciones y mensajes en el lenguaje de las rosas

El verdadero arte está en combinar colores para crear mensajes más profundos:

  • Roja + blanca: unión y amor eterno.
  • Rosada + amarilla: gratitud y felicidad compartida.
  • Blanca + azul: sinceridad y admiración por lo enigmático.
  • Naranja + roja: deseo y pasión que crece.
  • Negra + blanca: final y nuevo comienzo, como el ciclo de la vida.

Cada ramo es una carta silenciosa. Cada color, una palabra escrita con pétalos.


El lenguaje oculto de los gestos

En el lenguaje de las rosas, incluso el modo en que se regalan tiene significado:

  • Una rosa sola expresa devoción o amor verdadero.
  • Un ramo de doce rosas representa gratitud o una declaración formal.
  • Entregar una rosa con la mano derecha significa aceptación; con la izquierda, rechazo o duda.
  • Colocar una rosa boca abajo comunica el final de un sentimiento.

Estos pequeños gestos convierten cada entrega en un diálogo íntimo entre corazones.


Curiosidades sobre el lenguaje de las rosas

  • En la cultura japonesa, regalar tres rosas rojas significa “te amo”.
  • En Rusia, los ramos con número par se reservan para funerales, mientras que los impares son para celebraciones.
  • En la literatura, la rosa ha simbolizado tanto el amor divino (en Dante) como la pasión humana (en Shakespeare).

El poder de esta flor trasciende lenguas y fronteras: todos entienden su mensaje, aunque nadie lo diga en voz alta.


Conclusión: deja que las flores hablen tu verdad

El lenguaje de las rosas no pertenece solo al pasado; sigue vivo en cada gesto, en cada regalo que busca decir algo más que “me gustas”. Es el idioma del alma, el susurro del amor cuando las palabras sobran.

La próxima vez que elijas una rosa, no lo hagas solo por su belleza: hazlo por lo que deseas comunicar. Porque cuando el corazón no encuentra las palabras, una rosa puede hablar por ti. 🌹

 

Puedes seguir toda la actualidad visitando Official Press o en nuestras redes sociales: Facebook, Twitter o Instagram y también puedes suscribirte a nuestro canal de WhatsApp.

Continuar leyendo