Concha Márquez Piquer ha muerto hoy en Madrid a los 75 años. La hija de la cantante valenciana Concha Piquer, la auténtica «más grande» para muchos, y el torero Antonio Márquez no ha podido superar el delicado estado de salud que arrastraba desde hace años.

Nacida en Buenos Aires en 1945, la cantante quiso seguir los pasos de su madre, que siempre cuidó de su carrera. Debutó en el Teatro Calderón de Madrid con 24 años arropada por una gran orquesta, pero nunca llegó a hacerle sombra a la carrera de «la Piquer». Fue muy popular en la prensa rosa de los años 70 por su matrimonio con el torero Curro Romero, con quien tuvo 2 hijas.

Con el matador andaluz se casó con sólo 17 años, y se acabó separando en el año 1979. Consintió en el divorcio, pero nunca en la nulidad eclesiástica del matrimonio. Después, contrajo nupcias por lo civil con el actor Ramiro Oliveros, uno de los galanes de la época, con quien tuvo una hija.

Concha Márquez Piquer atravesó el peor momento de su vida en 1986, cuando su hija Coral, de tan solo 19 años, murió en un accidente de tráfico.