El Ayuntamiento ampliará el área de juegos infantiles, instalará mobiliario urbano y aparatos biosaludables, y plantará más árboles en el área que rodea el complejo cultural-deportivo de Abastos, en Arrancapins. El vicealcalde y concejal de Ecología Urbana, Sergi Campillo, ha presentado este mediodía el proyecto de remodelación del espacio a la asociación vecinal del barrio y a las personas proponentes del proyecto a Decidim València. La actuación cuenta con un presupuesto de 128.000 euros.

Mejorar las dotaciones de las zonas comunes del barrio para dar respuesta a las reivindicaciones del vecindario del barrio, ese es el objetivo del proyecto que se llevará adelante en Arrancapins y del que el vicealcalde, Sergi Campillo, ha presentado un esbozo a la asociación de vecinos y vecinas del barrio y a las personas que propusieron la idea mediante el proceso participativo Decidim València.

La remodelación del recinto que rodea el antiguo mercado de Abastos consistirá en la ampliación del área de juegos infantiles, “puesto que está muy concurrida” y “queremos mejorar la calidad de la instalación para las niñas y niños”, ha explicado el vicealcalde. Además, se creará una zona de estancia para los usuarios y usuarias, “para que puedan tener un espacio adecuado y amable”. Por otro lado, “hemos hecho un esfuerzo para introducir más árboles, de forma que haya más zonas de sombra y aumentar así la infraestructura verde en el barrio con todos los beneficios que esto supone”, también se colocará nuevo mobiliario urbano y aparatos biosaludables para acondicionar la zona.

El vicealcalde se ha reunido con representantes de la asociación de vecinos y vecinas Abastos-Finca Roja y con las personas que hicieron las propuestas en los presupuestos participativos para “explicarles cuál es la propuesta inicial del servicio de Jardinería Sostenible y del equipo redactor de la obra para que puedan dar su opinión, y decir si quieren cambiar o introducir algún elemento nuevo, tal y como se ha hecho en el resto de proyectos surgidos de los procesos participativos”, para que las personas que han hecho la propuesta basándose en las necesidades del barrio, puedan tener conocimiento y aportar su punto de vista sobre el proyecto. De hecho las personas que han asistido a la reunión han hecho algunas sugerencias que se recogerán en el proyecto final. “Una vez terminado habrá que aprobarlo y licitarlo inmediatamente para que a lo largo de 2022 ya sea una realidad”. En todo caso, ha señalado Campillo, al estar dentro de un edificio protegido, se debe contar con el dictamen favorable de la Comisión de Patrimonio.