Síguenos

Sucesos

Siguen buscando a Beatriz, la joven desaparecida en Oliva: claves de una desaparición sin respuestas desde el 9 de agosto

Publicado

en

La búsqueda de Beatriz G.A., una joven de 28 años desaparecida en Oliva (Valencia) el pasado 9 de agosto, continúa activa más de siete semanas después de que se perdiera todo rastro de ella. La Guardia Civil, a través de la Policía Judicial de Gandía, sigue investigando una desaparición considerada de alta vulnerabilidad, en colaboración con la asociación SOS Desaparecidos.

¿Qué se sabe de la desaparición de Beatriz?

Beatriz, madre de dos hijos de 8 y 6 años, fue vista por última vez la noche del 9 de agosto. Según las investigaciones, la joven se encontraba con su pareja, Juanjo, con quien se despidió tras pasar parte de la tarde. Varias cámaras de seguridad registraron el momento en el que regresó a casa de su madre para cambiarse de ropa y volver a salir poco después, sin dejar rastro.

Esta última salida sigue siendo uno de los grandes enigmas del caso. Su hermano y su cuñada la vieron en casa de la madre, y un amigo de Juanjo asegura haberla visto más tarde cerca del domicilio de un familiar. Desde ese instante, no ha vuelto a saberse nada de ella.

Descripción de Beatriz G.A.

Según el cartel difundido por SOS Desaparecidos, Beatriz mide 1,60 metros, tiene complexión normal, el pelo castaño y rizado, ojos marrones y lleva gafas graduadas. En el momento de su desaparición vestía un pantalón corto, un top de tirantes, llevaba el pelo recogido en una coleta y una mochila de Mickey Mouse.

La familia descarta que fuera una desaparición voluntaria

Desde el primer momento, su entorno ha rechazado que Beatriz se marchara por voluntad propia. «Nunca se habría separado de sus hijos», insisten familiares y amigos. El comportamiento de Beatriz la noche de su desaparición no fue extraño, según relata Juanjo, su pareja, quien asegura que «estaba totalmente normal».

La investigación sigue activa

La Guardia Civil continúa recabando información, reconstruyendo las últimas horas conocidas de Beatriz y revisando grabaciones y testimonios. Los investigadores trabajan con la hipótesis de una desaparición no voluntaria, sin descartar ninguna línea de investigación.

Cualquier persona que tenga información sobre Beatriz puede contactar de forma anónima con:

  • Emergencias: 112

  • Guardia Civil: 062

  • Policía Nacional: 091

  • SOS Desaparecidos:

Advertisement
Click para comentar

Tienes que estar registrado para comentar Acceder

Deja un comentario

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.

Sucesos

Dos jóvenes reducen a un acosador en un tren Valencia-Barcelona

Publicado

en

Avería trenes ave en Chamartín

Un acto de valentía marcó el trayecto de un tren de alta velocidad que cubría la ruta Valencia–Barcelona el pasado 26 de febrero. Marc y Carlos, dos jóvenes mallorquines de 27 años, intervinieron para detener a un hombre que presuntamente acosaba a varias pasajeras, llegando incluso a amenazar con apuñalar a quienes intentaron frenarlo.

El incidente pone de nuevo sobre la mesa el debate sobre la seguridad en el transporte público y la necesidad de fomentar una respuesta colectiva frente al acoso.


Un viaje que se convirtió en pesadilla para varias pasajeras

Todo comenzó como un trayecto más entre Valencia y Barcelona, hasta que un hombre, de unos 28 años, comenzó a lanzar comentarios inapropiados a mujeres de mediana edad en el vagón. Según relatan los testigos, el ambiente se volvió tenso e incómodo, con el agresor desplazándose por el tren para molestar a distintas pasajeras.

La situación escaló cuando se sentó junto a una joven turista de aproximadamente 25 años, que viajaba sola leyendo un libro con los auriculares puestos. «Estaba acorralada entre él y la ventana, sin posibilidad de moverse», cuenta Marc, uno de los jóvenes que presenció el acoso.


Acto de valentía frente al acoso

Preocupados por la actitud del individuo, Marc y Carlos decidieron actuar. En un primer intento por disuadirlo, se sentaron junto a la joven para protegerla, pero el agresor respondió con insultos, amenazas e intentos de intimidación. “Nos amenazó con apuñalarnos. No sabíamos si iba armado o no, pero había que actuar”, recuerda Carlos.

En ese momento, los dos amigos procedieron a reducirlo físicamente. Lo inmovilizaron durante casi una hora, evitando que pudiera agredir a nadie más hasta que el tren llegó a la estación de Sants, en Barcelona, donde agentes de seguridad ya esperaban alertados por la situación.


Una intervención ciudadana que evidencia la falta de seguridad

“La gente tenía verdadero pánico. Nosotros actuamos porque somos jóvenes y fuertes. Pero, ¿qué pasa con personas mayores o chicas que viajan solas?”, reflexiona Marc. Ambos coinciden en que lo ocurrido deja clara la insuficiente presencia de seguridad en este tipo de trayectos.

La preocupación no es menor: situaciones como esta, afirman, podrían tener consecuencias más graves si no se produce una reacción rápida por parte de pasajeros o personal del tren.


El agresor, puesto en libertad por falta de denuncia

Tras la llegada a Barcelona, el individuo fue identificado por los Mossos d’Esquadra, pero fue puesto en libertad al no existir una denuncia formal en su contra y no haberse producido agresiones físicas graves.

Este hecho ha generado críticas entre los testigos del incidente, quienes consideran que la impunidad con la que actúan algunos acosadores en el transporte público refleja una falla estructural del sistema legal y de vigilancia.


Llamado a una acción institucional frente al acoso

Marc y Carlos piden a las autoridades mayor control en trenes y estaciones, así como protocolos efectivos de actuación ante casos de acoso. “No puede ser que tengamos que jugarnos la vida para evitar algo así. Hay que cambiar la cultura de mirar hacia otro lado”, denuncian.

Este caso se suma a una larga lista de incidentes que evidencian la necesidad de medidas urgentes de prevención y reacción en los transportes públicos, no solo para garantizar la seguridad, sino para proteger la dignidad e integridad de todos los pasajeros.


Conclusión: héroes anónimos frente a la pasividad institucional

La intervención de estos dos jóvenes mallorquines demuestra que la acción ciudadana responsable puede marcar la diferencia. Sin embargo, no debería ser la única barrera frente al acoso. Lo ocurrido en el tren Valencia-Barcelona deja claro que se necesita una respuesta firme por parte de las instituciones, reforzar la seguridad y fomentar entornos libres de violencia para todos.

 

Puedes seguir toda la actualidad visitando Official Press o en nuestras redes sociales: Facebook, Twitter o Instagram y también puedes suscribirte a nuestro canal de WhatsApp.

Continuar leyendo