A partir de este sábado va a tener lugar un fenómeno astronómico sin igual. La alineación planetaria de Júpiter, Mercurio, Venus, Urano y Marte se producirá en formación de arco del 25 al 30 de marzo, en acompañamiento con la luna.
No obstante, Júpiter podría ocultarse tras la puesta del Sol después del 28 de marzo, por lo que es recomendable aprovechar antes de esa fecha para observar esta insólita maravilla en su máxima expresión. Para divisar los cinco planetas en una sola noche se van a combinar numerosos factores. Principalmente, la sincronización, los cielos despejados y una vista despejada del horizonte.
Previsiones para el desfile planetario
Algunos de estos planetas podrían ser visibles desde zonas urbanas. Es el caso de Venus por su deslumbrante brillantez, o incluso Urano y Mercurio. Aun así, para aumentar la probabilidad de observación y, por ende, la plenitud de la experiencia, es fundamental alejarse de la contaminación lumínica y encontrar lugares con cielos oscuros antes del atardecer. Esto suele implicar que haya que evadirse de los grandes núcleos urbanos.
Por otra parte, también sería útil consultar el pronóstico del tiempo para elegir con tino una noche sin apenas nubosidad. El lugar tendría que contar con vistas despejadas hacia el horizonte oeste y carecer de montañas o edificios descomunales que impidan la visión del atardecer. Júpiter y Mercurio serán más apreciables mirando hacia abajo en el horizonte.
Aunque la mayoría de los planetas serán visibles a simple vista, posiblemente sean necesarios binoculares o incluso un telescopio para observar Urano y, de esta forma, completar el recorrido por los cinco planetas. Existen aplicaciones de astronomía realmente aprovechables para quienes sean novatos en la materia. Sky Tonight o SkySafari son los más populares y sencillos, e indican la ubicación exacta de cada planeta en el cielo nocturno.
Cómo ver la alineación planetaria
Justo después de que el Sol se oculte en el horizonte, hay que mantener fija la mirada en el oeste. En la parte baja del cielo, donde el Sol acaba de ponerse, Júpiter y Mercurio aparecerán juntos. La menguante luz solar podría dificultar su avistamiento a simple vista, así que en ese punto pueden usarse binoculares o prismáticos para que sean detectadas. En todo caso, hay que asegurarse de que el Sol esté por debajo del horizonte para evitar daños en los ojos.
Se prevé que ambos planetas sean visibles durante alrededor de una hora después del atardecer. Luego, ambos desaparecerán bajo el horizonte. A continuación, es Venus el planeta que aparece en escena. El objeto más brillante en el cielo nocturno, un tanto similar a una estrella. Mientras que Urano seguramente exija de binoculares o prismáticos. Estará arriba y a la izquierda de Venus, en una posición relativamente cercana. La mejor oportunidad para advertir este planeta más débil será cuando toda la luz solar haya desaparecido del cielo, llevándose consigo a Júpiter y Mercurio. La visibilización de Urano se extenderá entre 1 y 2 horas, antes de que se oculte bajo el horizonte.
Finalmente, habrá mucho más tiempo para observar Marte. El planeta rojo, vecino de la Tierra, aparecerá alto en el cielo del suroeste. Se podrá localizar sobre la Luna creciente y ligeramente a su izquierda del 25 al 27. El 28 continuaría siendo visible, pero ya más por debajo de la luna.
Así pues, esto significa una oportunidad única para ver el cosmos haciendo gala de su inefable capacidad y belleza. El cielo nocturno quedará copado por un arco del firmamento en señal de inmensidad. Será un espectáculo astronómico del que conviene disfrutar, siempre siguiendo las recomendaciones óptimas para este tipo de experiencias.
Tienes que estar registrado para comentar Acceder