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La jueza ordena buscar al hombre con quien contactó Antonio Anglés durante su fuga

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crímenes menores España

València, 26 feb (EFE).- La instructora del caso Alcàsser ha ordenado a la Policía que busque a un empleado de una agencia de transportes que, según algunos testigos, habló por teléfono con Antonio Anglés en marzo de 1993, cuando el fugitivo huía de la Justicia a bordo del barco «City of Playmouth», con rumbo a Irlanda.

La titular del Juzgado de Instrucción número 6 de Alzira, además, ha ordenado la unión a la causa judicial de una fotografía exhibida por la Policía a un marinero del citado barco mercante y el interrogatorio como testigo de este marinero y el de otros dos miembros más de la tripulación, igualmente en calidad de testigos.

Esta decisión se produce después de que la Audiencia de Valencia aceptara un recurso de la acusación popular en este caso, ejercida por la Asociación Clara Campoamor, solicitando dichas pruebas.

Fuentes del Tribunal Superior de Justicia de la Comunitat Valenciana han informado de la resolución, pero han precisado que las diligencias no suponen reactivar la investigación, que no ha sido nunca cerrada.

La instructora emitió hace un año una orden europea de investigación para solicitar la colaboración de las autoridades del Reino Unido sobre la supuesta huida en barco de Anglés. El juzgado había recibido un informe policial donde se solicitaban nuevos interrogatorios a testigos, concretamente a miembros de la tripulación del barco desde el que supuestamente huyó el fugitivo.

El capitán del barco «City of Playmouth», en el que supuestamente viajó como polizón el asesino de las tres adolescentes de Alcàsser, había dicho en un programa televisivo en La Sexta que un miembro de su tripulación pudo ayudar a Anglés a escapar, y la jueza ordenó tomar declaración al marinero.

De las declaraciones de marinero y del capitán se dedujo que Anglés mantuvo una conversación telefónica con un trabajador de una compañía de transportes desde el propio barco. Además, al parecer, un miembro de la tripulación le llegó a fotografiar.

La acción popular pidió a la juez la localización de esta fotografía y la identificación del empleado de la compañía de transportes, diligencias que la magistrada rechazó y que la Sección Tercera de la Audiencia Provincial ha considerado oportunas, a petición de la citada asociación.

Los magistrados de la Audiencia entienden, en un auto al que ha tenido acceso EFE, que esas diligencias «tienen una finalidad útil y pertinente para la continuación del procedimiento (la localización de investigado) y resultan proporcionadas a la evidente gravedad de los hechos delictivos objeto de investigación».

«Confirmar que el investigado era el polizón descubierto en el barco puede permitir sentar una nueva base desde la que continuar las pesquisas para determinar su ulterior itinerario y, en su caso, su actual paradero», añade la Audiencia.

Tras recibir el auto de la Audiencia, el citado Juzgado de Alzira ya ha acordado la práctica de esas nuevas diligencias.

El secuestro y asesinato en noviembre de 1992 de Miriam, Toñi y Desirée, las tres vecinas de Alcàsser (Valencia) de entre 14 y 15 años violadas y torturadas hasta la muerte por el prófugo Antonio Anglés y su compinche Miguel Ricart -en libertad desde 2013-, mantuvo en vilo a España durante más de dos meses, hasta que aparecieron sus cadáveres.

Investigaciones posteriores han seguido la pista del posible paradero de Anglés, en caso de seguir vivo, o la confirmación de su muerte, que pudo haberse producido al arrojarse al mar desde el citado barco rumbo a Dublín.

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Quién es Antonio Hernández y por qué Sánchez lo ha cesado tras el escándalo del caso Salazar

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Antonio Hernández
Antonio Hernández-Portal de Transparencia del Gobierno/ PSOE

Cese inminente en el Gobierno

El Consejo de Ministros aprobará este martes el cese de Antonio Hernández, hasta ahora director del Departamento de Coordinación Política en el Gabinete de la Presidencia del Gobierno, después de la gestión interna del caso Salazar, donde dos militantes socialistas denunciaron presunto acoso sexual por parte del exasesor Paco Salazar, colaborador estrecho del Gobierno en análisis electoral.

Moncloa asegura que el cese se toma “con contundencia” tras conocer los hechos denunciados y que la decisión ha sido compartida con Hernández, quien habría admitido que su continuidad en el cargo “no era sostenible” desde el momento en el que estalló el escándalo.

La vicepresidenta primera, María Jesús Montero, ha decidido también apartarlo de la Ejecutiva del PSOE de Andalucía, donde ejercía como responsable de la Secretaría de Datos.

Quién es Antonio Hernández

Hernández desempeñaba uno de los cargos más estratégicos dentro del núcleo presidencial: el director de Coordinación Política del Gabinete de Moncloa, encargado de asesoramiento, apoyo y refuerzo del programa político del Gobierno, según el Portal de Transparencia.

Formado como técnico especialista en Publicidad, ha trabajado en Presidencia del Gobierno, la Junta de Andalucía y el Ayuntamiento de Sevilla, y era una figura de confianza dentro de los equipos de análisis electoral.

Su vinculación con Paco Salazar —exmilitante socialista y asesor político— ha sido determinante en la decisión política. Varias trabajadoras que denunciaron internamente el comportamiento de Salazar mencionaron a Hernández como presunto “cómplice” o “encubridor”, extremos que él niega, aunque asegura que se aparta por responsabilidad y para proteger al Gobierno.

Malestar creciente en el PSOE

El cese no llega en un clima político sencillo. La militancia y cargos intermedios del PSOE critican la tardanza en la gestión de las denuncias internas, algo que ya ha reconocido públicamente el partido. El comunicado enviado el viernes a las federaciones admitía que “no se estuvo a la altura” con las denunciantes.

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, se refirió por primera vez al caso durante los actos del Día de la Constitución, asumiendo personalmente la responsabilidad por el retraso y reconociendo que no había hablado con las denunciantes en meses.

El malestar interno crece ahora en torno a la pregunta clave: ¿debe el PSOE llevar el caso a la Fiscalía o deben hacerlo exclusivamente las denunciantes?

Debate interno: Fiscalía, responsabilidades y gestión

Sánchez defiende que la decisión pertenece únicamente a las víctimas. Si presentan denuncia formal ante la Fiscalía, asegura que recibirán todo el apoyo jurídico, institucional y personal del partido.

Sin embargo, otras voces dentro del Gobierno y del partido consideran que el PSOE debería llevar el caso por iniciativa propia, sin esperar a las mujeres denunciantes. El mensaje no es uniforme: mientras la dirección se alinea con Sánchez, algunos altos cargos reclaman una posición más proactiva.

Desde el Ejecutivo admiten errores:

“El caso se ha gestionado muy mal. No hemos acompañado correctamente y no se puede tardar tanto tiempo. Ha faltado diligencia”.

Una alta fuente de Moncloa es aún más explícita:

“No hemos estado encima y no lo entiendo. La reunión telemática con las responsables de Igualdad no ha servido. Persisten división y ruido interno”.

Las palabras de Carmen Calvo

La exvicepresidenta del Gobierno Carmen Calvo, ahora presidenta del Consejo de Estado, apuntó este fin de semana en una entrevista a la existencia de “liderazgos testosterónicos e hiper-masculinizados” dentro de la política cuando se le preguntó por los escándalos que afectan al PSOE.

Calvo recuerda que ella misma trasladó al partido anteriormente denuncias sobre comportamientos machistas, lo que aumenta el debate interno sobre los protocolos y la cultura política en torno a igualdad, denunciantes y gestión de casos sensibles.

Último pleno del año y nuevas tensiones

El miércoles se celebrará la última sesión de control del año, con polémica añadida: el Gobierno ha informado que siete ministros no estarán disponibles para ser preguntados, entre ellos:

  • María Jesús Montero, señalada por haber blindado o protegido a Salazar en Ferraz y Moncloa

  • Pilar Alegría, que fue fotografiada en noviembre comiendo con Salazar cuando este ya había sido denunciado

Para el Partido Popular, las ausencias no están justificadas y su portavoz en el Congreso, Esther Muñoz, reclama un cambio reglamentario para evitar que los ministros puedan esquivar preguntas clave en una situación de crisis política.

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