Cultura
“Me llamo Gennet”, un ejemplo real de superación llega a la gran pantalla
Publicado
hace 7 añosen
Madrid, 11 Mar.- Este martes 12 de marzo, a las 11:30 horas en Cinesa proyecciones, Madrid, se presenta la película “Me llamo Gennet”. “Vencí al silencio y a la oscuridad”. Así podría resumirse el intenso periplo vital de Gennet Corcuera, la primera persona sordociega europea que ha logrado un título universitario. “Me llamo Gennet” supone la primera incursión del cineasta y productor Miguel Ángel Tobías en el terreno de la ficción tras una larga trayectoria en el cine documental social y comprometido. El 5 de abril en cines de toda España.
Basada en una historia real, narra la vida de Gennet Corcuera, desde su infancia previa a ser abandonada en un centro de acogida de Adís Abeba, en Etiopía, hasta convertirse en la primera persona sordociega que consigue un título universitario en Europa. La cinta recoge sus especialices recuerdos, marcados por su difícil proceso de integración y aprendizaje en un mundo donde no había lugar para gente como ella.
“Desde que conocí la historia de Gennet en los medios cuando se licenció, supe que era una gran historia que merecía ser llevada a la gran pantalla”, confiesa Tobías. “En principio iba a ser una película documental, hasta que conocí a Gennet. Tras muchas horas de conversación, conociendo la historia de toda su vida, me di cuenta de que esta tenía que abordarse desde un gran proyecto de ficción. Lo consulté con Gennet, porque quería que fuese la actriz de toda la etapa adulta. Mi sorpresa fue que me dijo que sí. Su interpretación es espectacular”.

Imagen de la web oficial de Miguel Ángel Tobías
Rodada en España y Etiopía, está protagonizada por Gennet Corcuera, Miriam Díaz-Aroca, Ángela Molina, Miki Molina, Zewdu W. Mariam y el propio Miguel Ángel Tobías. Producida por Acca Media y coproducida por TVE. La distribución de la película en cines correrá a cargo de Versión Digital. Cuenta con la colaboración de la Fundación Telefónica y Fundación Historias Que Deben Ser Contadas.
Estreno solidario
El jueves 4 de abril se celebrará un pase solidario, un preestreno en formato eventcinema, en cines de toda España. Los beneficios de este prestreno irán destinados íntegramente a la Asociación de Sordociegos de España (ASOCIDE). Además, el 10% de los beneficios de la recaudación de la película irán destinados a la Federación de Asociaciones de Personas Sordociegas de España (FASOCIDE).
Sinopsis
La joven sordociega Gennet Corcuera comienza una nueva etapa de su vida en la que por primera vez vive sola e independiente, trabajando de maestra. Preparando una próxima conferencia, trata de reunir y dar forma escrita a sus especiales recuerdos: las fugaces visiones de su Etiopía natal durante la terrible hambruna de 1984 (donde captó la atención y los cuidados de Carmen Corcuera, suegra del embajador de España en Addis Abeba, que, para conseguir su adopción, pasó dos años trabajando en el centro de acogida donde Gennet fue abandonada); su difícil proceso de integración y aprendizaje en un mundo donde no había lugar para gente como ella; los recuerdos desvaneciéndose en la memoria de Carmen; y el gran logro de convertirse en la primera mujer sordociega europea que consigue un título universitario.
Cine comprometido
Sólo en Europa hay 3 millones de personas sordociegas; no existen datos fiables a nivel mundial. En España este colectivo lo conforman 100.000 personas. La sordoceguera es una de las grandes discapacidades de nuestros días y también la más desconocida. Las personas sordociegas tienen necesidades específicas y requieren de una atención personalizada para progresar. Sólo cuando se experimenta personalmente o cuando se vive de cerca con personas que tienen esta discapacidad uno puede entender el aislamiento y el sufrimiento que supone vivir sin enterarse de lo que pasa a tu alrededor, desconectado de ámbitos tan básicos como el acceso a la información, la educación, la capacitación profesional, el trabajo, las relaciones sociales o la actividad cultural.
“La labor principal, a la cual Me llamo Gennet va a contribuir, es sensibilizar a la sociedad sobre lo que supone la sordoceguera y todo lo que este colectivo es capaz de conseguir con los recursos necesarios”, explica Miguel Ángel Tobías.
Una historia real
Gennet Corcuera tiene 37 años. Es etíope. No ve, no oye, y no tiene olfato. Con tan sólo 3 años, tras quedarse sordociega debido a una infección, es abandonada en un orfanato. Era 1984, y Etiopía, un lugar azotado por el hambre y la miseria. Podía haber sido el final, pero el destino salva a Gennet.
Carmen Corcuera se cruza en su vida y decide adoptarla y traerla a España. Empieza a estudiar en un colegio de educación especial de la ONCE, donde por primera vez convive con personas como ella, donde aprende a comunicarse a través de la lengua de signos y donde se le permite desarrollarse. Saca un 7.2 en Selectividad y llega a la Universidad, donde estudia Educación Especial, convirtiéndose en la primera mujer sordociega europea que consigue un título universitario Actualmente trabaja como educadora especial en el único centro residencial especializado en sordoceguera que hay en España.

Imagen de la web oficial de Miguel Ángel Tobías
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Alfonso Ussía, uno de los escritores y periodistas más influyentes de la prensa española de las últimas décadas, ha fallecido en Ruiloba, Cantabria, a los 77 años. Su muerte pone fin a una trayectoria marcada por el ingenio, la sátira y una fidelidad absoluta a sus lectores, especialmente en ABC, La Razón y en sus últimos años en El Debate, donde siguió publicando hasta el final de su vida.
Alfonso de Ussía y Muñoz-Seca nació en Madrid el 12 de febrero de 1948 y falleció en Ruiloba, Cantabria, el 5 de diciembre de 2025. Fue escritor, periodista y una de las firmas más reconocidas de la prensa española durante más de cinco décadas. Su estilo satírico, su defensa de la monarquía y su mirada crítica marcaron a generaciones de lectores.
Durante su vida profesional brilló especialmente en ABC y, en los últimos años, en El Debate, donde publicó diariamente hasta sus últimos días. También trabajó en radio, televisión, semanarios y colaboró con diferentes medios. Era autor de la exitosa serie del marqués de Sotoancho, ilustrada por su amigo Barca, con quince volúmenes publicados.
Estaba casado con Pili Hornedo Muguiro, con quien tuvo tres hijos y ocho nietos. Su familia fue decisiva tanto en su vida personal como en su forma de trabajar, especialmente en sus últimos años, cuando ya no podía escribir físicamente y dictaba sus textos.
Su compromiso con la escritura hasta el final
La escritura fue su motor vital. Cuando su salud se debilitó, continuó dictando artículos a su hija Isabel hasta quedarse sin voz. Tras recibir la extremaunción aún siguió escribiendo, convencido de que su columna diaria era su forma de mantenerse en contacto con sus lectores. El último día en que dictó un artículo fue el martes anterior a su fallecimiento.
Su fidelidad a El Debate fue absoluta desde el 1 de octubre de 2021, fecha del relanzamiento del diario. Su audiencia digital demostraba diariamente el enorme seguimiento que conservaba, incluso en los nuevos formatos periodísticos.
Raíces familiares e influencias
Alfonso Ussía nació en una familia con identidad marcada y un legado literario. Su padre era vasco, y de él heredó la lealtad absoluta a la Corona y una profunda admiración por don Juan de Borbón, rey de derecho. Siempre estuvo a su lado, aunque nunca fue cortesano ante don Juan Carlos o don Felipe.
De su madre heredó la brillantez literaria y el espíritu satírico de su abuelo, don Pedro Muñoz Seca, figura clave del teatro español y asesinado en Paracuellos en 1936. Este vínculo marcó profundamente su personalidad, su estilo y su sentido de la responsabilidad cultural.
Formación y primeros pasos
Estudió en los colegios del Pilar y Alameda de Osuna, instituciones que moldearon su carácter. Inició las carreras de Derecho y Periodismo, aunque no llegó a terminarlas porque su vocación real era ser escritor. Esa profesión no tenía titulación oficial, pero sí le permitió vivir holgadamente y convertirse en un referente nacional.
Sus primeros trabajos fueron en los diarios Informaciones, Diario 16 y Ya, hasta que llegó a ABC, donde consolidó la etapa más sólida y reconocida de su carrera.
Poesía satírica y provocación inteligente
Su talento satírico destacaba tanto en prosa como en poesía. Era provocador, versátil y conocedor de los límites según el contexto. Una anécdota habitual recuerda una conferencia en Santander sobre poesía satírica española. Antes de iniciarla, preguntó si podía incluir unos versos polémicos sobre el marqués de Villaverde. Finalmente decidió no hacerlo, atendiendo a la prudencia solicitada.
También vivió una intensa pasión por el deporte, especialmente el Real Madrid, para el que llegó a presentarse como candidato a presidente. Perdió por escaso margen frente a Ramón Mendoza, y más tarde se conocería el escándalo de votos de socios fallecidos. Su ironía resumió aquello con una frase memorable: menos mal, qué follón ser presidente del Madrid.
Estrella indiscutible de ABC
Ussía fue una de las principales estrellas de ABC durante años. Sin embargo, cuando el periódico pasó a ser propiedad del grupo Vocento, su situación profesional se volvió más incómoda. La presión de amenazas terroristas le obligó a pedir seguridad, y él defendía que debía ser el diario quien asumiera esa responsabilidad, en coherencia con el riesgo generado por lo publicado.
Una de sus columnas más polémicas, El cerdo vasco, provocó su salida definitiva del periódico. Tras valorar diferentes propuestas, se incorporó a La Razón, donde volvió a convertirse en figura destacada. En aquella etapa se crearon los Premios Alfonso Ussía, con cinco categorías: Estudiante del año, Héroe del año, Conservación de la naturaleza, Personaje del año y Trayectoria profesional. Tras su marcha, los premios fueron suprimidos.
Su salida estuvo motivada por su negativa a formar parte de un grupo mediático que integraba tanto La Sexta como La Razón bajo la misma propiedad. Esa decisión reafirmó su independencia, pero lo dejó sin grandes apoyos empresariales, limitando sus colaboraciones a pequeños proyectos con los que apenas podía vivir.
El retiro en Ruiloba y una vida nueva
Apoyado siempre por su mujer Pili Hornedo, enfermera jubilada y compañera absoluta, la pareja decidió vender su casa en Madrid y mudarse a su vivienda en Ruiloba, junto a Comillas, en Cantabria. Allí vivían desde hacía años durante los veranos y, con el tiempo, encontraron un refugio definitivo para vivir con serenidad.
Regreso a El Debate en homenaje a su abuelo
El 29 de julio de 2021 fue invitado a almorzar en el Real Club Marítimo de Santander, donde recibió la propuesta de incorporarse al nuevo proyecto de El Debate. Su entusiasmo fue inmediato. La conexión familiar era profunda: don Pedro Muñoz Seca había sido una firma histórica del diario antes de su asesinato.
Aceptó con la única condición de evitar críticas directas al Papa, a lo que accedió sin problema. Su incorporación fue un impulso para el diario y consolidó el relanzamiento de El Debate dentro del panorama digital.
Principios inquebrantables
Alfonso Ussía fue un hombre de principios muy claros: la defensa de la Corona, la identidad nacional, el respeto a las Fuerzas Armadas y una visión cultural conservadora. Su trayectoria fue reconocida con distinciones como la Gran Cruz del Mérito Naval con distintivo blanco y la Cruz de Plata al Mérito de la Guardia Civil.
La última distinción y la despedida
A finales de agosto de 2025, Isabel Díaz Ayuso, presidenta de la Comunidad de Madrid, viajó hasta su casa en Ruiloba para entregarle el Premio de Cultura de la Comunidad de Madrid en Literatura. Era un reconocimiento íntimo, humano y muy emotivo, en un momento en el que ya sufría rotura de cadera y cáncer avanzado.
El encuentro fue breve, pero profundamente significativo. Era evidente que se trataba de su última gran distinción pública.
Semanas después conversó por última vez con amigos. Su voz era débil, pero todavía conservaba humor. La anécdota final que lo alegró especialmente fue la confesión del actor Antonio Resines, quien lo reconoció gracias a su retrato en El Debate y afirmó leerlo cada día. Aquello le emocionó profundamente.
Su muerte deja un vacío inmenso en el periodismo español, en la sátira contemporánea y en la literatura humorística. Para quienes lo siguieron durante décadas, Alfonso Ussía fue una compañía diaria cargada de ingenio, libertad y estilo.
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