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Salud y Bienestar

El 90% de los ictus se pueden prevenir

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prevención Ictus

La Conselleria de Sanidad Universal y Salud Pública, con motivo del Día Mundial del Ictus, ha incidido en la importancia de la prevención primaria para prevenirlo y de desarrollar hábitos de vida saludables para evitar su aparición. De hecho, un 90% de los ictus que se diagnostican se pueden prevenir.

Desde enero a octubre de 2020, los centros de atención primaria de la Comunitat Valenciana han atendido 83.181 consultas con diagnóstico de ictus, de las cuales el 70,3% corresponde a personas mayores de 65 años, el 29,4% a pacientes entre 20 y 65 años y un 0,19% a menores de 20 años.

En cuanto a los ingresos hospitalarios, durante el año 2019 los hospitales valencianos registraron 9.993 ingresos a causa de un ictus frente a los 9.980 del año anterior.

El ictus es una patología producida por alteraciones bruscas de la circulación sanguínea cerebral de aparición súbita e imprevista. Los síntomas más frecuentes son el entumecimiento o debilidad de la cara, brazo o pierna en un lado del cuerpo. Además, el paciente puede padecer signos de confusión o dificultades para hablar o tragar.

Otros de los síntomas son la dificultad para ver correctamente con uno o ambos ojos, problemas para caminar, mareos, pérdida de equilibrio, problemas de coordinación o dolor de cabeza severo sin causa conocida.

En España, cerca de unas 120.000 personas al año sufren un ictus, y en la Comunitat Valenciana una de cada seis personas. Por lo tanto, desde Sanidad se insiste en la importancia de la prevención, el autocuidado y conocer la sintomatología, ya que cuanto más rápido se diagnostica un ictus y se realiza el tratamiento menores son las secuelas.

La Conselleria de Sanidad tiene en marcha el Código Ictus para el diagnóstico y tratamiento precoz del ictus agudo, un mecanismo que se activa a través del 112 y permite trasladar al paciente al centro sanitario más adecuado.

Seis hospitales valencianos cuentan con unidades de referencia para el abordaje multidisciplinar del paciente en la fase aguda del ictus. Los hospitales son el Hospital General de Castelló, el Hospital Clínico de València, Hospital La Fe, Hospital General de València, Hospital General de Alicante y el Hospital General de Elche.

 

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La muerte de la niña de Alzira reabre el debate sobre los riesgos de la anestesia: ¿cuáles son los peligros reales?

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riesgos anestesia
PEXELS

La Sociedad Española de Anestesiología, Reanimación y Terapéutica del Dolor (SEDAR) ha trasladado sus condolencias a la familia de la niña de 6 años fallecida tras haber sido atendida previamente esa misma mañana en una clínica dental privada en Alzira. Además, ha insistido en la importancia de que las sedaciones sean “realizadas exclusivamente por médicos especialistas en Anestesiología y Reanimación”. Estos son los riesgos reales de la anestesia.

Llamamiento a la prudencia y advertencia sobre la falta de información clínica

La SEDAR, en un comunicado, ha hecho un llamamiento a la “prudencia, respeto y responsabilidad institucional”, subrayando que actualmente “se desconocen los datos clínicos y las circunstancias exactas” del suceso. Por ello, remarcan que no pueden valorar causas ni responsabilidades hasta que avance la investigación.

La sedación con fármacos anestésicos generales: un procedimiento de alto riesgo

El organismo científico ha insistido en que las sedaciones que emplean fármacos anestésicos generales son “procedimientos con riesgos potencialmente graves, incluso vitales”. Por ello, recalcan que deben realizarse únicamente por especialistas en Anestesiología y Reanimación, los únicos con formación avanzada en farmacología, fisiología, manejo de la vía aérea, ventilación mecánica y reanimación avanzada.

La SEDAR recuerda que, en los últimos años, ha advertido reiteradamente de un “problema muy serio”: la autorización de sedaciones profundas para ser administradas por profesionales que no son anestesistas. Esto incluye médicos de otras especialidades como neumología, cardiología, digestivo o urgencias, e incluso enfermería, mediante cursos que no equivalen a una especialidad médica completa.

Normativas que permiten sedaciones sin anestesistas: un riesgo para el paciente

Según la SEDAR, estas normativas autonómicas generan un riesgo añadido porque los anestésicos generales pueden provocar “apnea, depresión respiratoria y colapso cardiovascular en cuestión de segundos”. Para la entidad, la administración de estos fármacos “exige la formación avanzada específica” de los anestesiólogos.

“El anestesista es el único profesional con la capacitación completa para realizar sedaciones de forma segura y responder de manera inmediata ante cualquier complicación”, remarcan.

Recomendaciones a los pacientes y mensaje del presidente de SEDAR

La SEDAR recomienda a la ciudadanía que, antes de someterse a una sedación, “pregunten siempre quién la va a realizar y verifiquen que se trata de un médico especialista en Anestesiología y Reanimación”.

El presidente de la sociedad, el doctor Javier García Fernández, ha destacado que “la seguridad del paciente es el compromiso central e irrenunciable de la SEDAR”. Ha subrayado también que “la sedación profunda no es un procedimiento menor” y que toda la comunidad sanitaria debe reflexionar tras un suceso tan grave.

La anestesia siempre conlleva riesgo, incluso en manos expertas

SEDAR recuerda que la anestesiología es una disciplina compleja que requiere vigilancia constante y experiencia. “Incluso realizada por profesionales plenamente cualificados, nunca está completamente exenta de riesgo”, advierten.

Por ello, insisten en que estos procedimientos deben realizarse “bajo los estándares máximos de seguridad” y con equipamiento adecuado.

Compromiso de la SEDAR con la seguridad y la evidencia científica

La entidad afirma que seguirá defendiendo que la seguridad del paciente esté “por encima de cualquier otro factor” y trabajará con evidencia científica para evitar que normativas o decisiones organizativas permitan prácticas que puedan comprometer la salud de los ciudadanos.

 

 

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