Síguenos

Salud y Bienestar

10 dolores físicos con origen emocional que avisan de que algo no va bien

Publicado

en

dolores físicos con origen emocional
PEXELS

El cuerpo avisa y es que hay dolores físicos con origen emocional que son los que nos avisan de que algo no va bien en nuestro cuerpo. Son dolores habituales, no excesivamente preocupantes pero que seguro que si padeces alguno de ellos, lo enlazarás con alguna situación emocional que estés viviendo en este moemnto.

Algo que solemos escuchar habitualmente y según Guía Médica es precisamente el  malestar emocional el que tiene diferentes formas de manifestarse, y una de ellas puede ser a través del color corporal. Estos son algunos de los significados que pueden tener diferentes dolores físicos que se padecen muy a menudo.

Dolores físicos con origen emocional:

1. Dolor de cabeza. Alerta de que el cuerpo necesita descansar. Puede estar causado por situaciones de estrés y presión. La relajación ayuda a solucionarlo.

2. Dolor de hombro. Cargar con problemas ajenos y acumular malos sentimientos puede manifestarse a través del dolor de hombros.

3. Dolor de espalda superior. Este dolor puede aparecer por la soledad que la persona esté sintiendo y también por la confusión ante diferentes hechos.

4. Dolor de cuello. Puede estar provocado por la acumulación de rencor y malos deseos hacia otras personas. Esa rigidez ante los demás puede manifestarse en el cuello. El perdón y la expulsión de los malos sentimientos puede ayudar a curarlo.

5. Dolor de codo. Dolores injustificados de codo pueden alertarnos de una excesiva resistencia al cambio o a un hecho que esté marcando nuestra vida.

6. Dolor lumbar. Advierte del estrés provocado por problemas económicos.

7. Dolor de estómago. Estos dolores crónicos pueden estar manifestando que no somos capaces de asimilar o enfrentar determinados problemas. Los trastornos gastrointestinales frecuentes están vinculados a situaciones de difícil aceptación.

8. Dolor de cadera. Puede ser síntoma del miedo a enfrentar nuevos retos.

9. Dolor de rodillas. Suele vincularse a un exceso de exigencia con uno mismo.

10. Dolor de pies. Puede significar un estado de desánimo e incluso de depresión.

Es importante destacar que estos síntomas físicos pueden tener múltiples causas, y es fundamental abordar tanto los aspectos emocionales como los físicos para obtener un tratamiento integral. La conexión mente-cuerpo es compleja, y un enfoque multidisciplinario que incluya atención médica y psicológica puede ser beneficioso para abordar tanto los síntomas físicos como los emocionales. Si experimentas dolor persistente u otros síntomas, es recomendable buscar la orientación de profesionales de la salud.

Advertisement
Click para comentar

Tienes que estar registrado para comentar Acceder

Deja un comentario

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.

PORTADA OFFICIAL PRESS

Betabloqueantes tras un infarto: un estudio español demuestra que ya no son necesarios en la mayoría de pacientes

Publicado

en

Betabloqueantes infarto
FREEPICK

Un estudio internacional coordinado por el Centro Nacional de Investigaciones Cardiovasculares (CNIC) ha revolucionado el abordaje del tratamiento del infarto de miocardio. La investigación concluye que los betabloqueantes, recetados de forma rutinaria desde hace más de 40 años, no aportan beneficios en pacientes que han sufrido un infarto no complicado, es decir, cuando la función contráctil del corazón se mantiene conservada.

El estudio Reboot cambia las guías clínicas del infarto

Los resultados proceden del ensayo clínico Reboot, en el que han participado 8.505 pacientes de 109 hospitales en España e Italia. El trabajo, publicado en dos de las revistas médicas más prestigiosas —The New England Journal of Medicine y The Lancet—, se ha presentado en el Congreso de la Sociedad Europea de Cardiología en Madrid.

“Nuestro trabajo va a cambiar el tratamiento del infarto en todo el mundo. Más del 80% de los pacientes con infarto no complicado reciben betabloqueantes al alta, pero no hay evidencia de que les aporten beneficio”, explica Borja Ibáñez, director científico del CNIC e investigador principal del estudio.

Por qué se recetaban betabloqueantes tras un infarto

Desde los años 80, los betabloqueantes se recetaban tras un infarto porque reducen la frecuencia cardíaca, la presión arterial y el consumo de oxígeno del corazón, protegiéndolo frente a arritmias y complicaciones.

Sin embargo, con la llegada de tratamientos más efectivos como la angioplastia coronaria y la colocación de stents, que abren la arteria obstruida en cuestión de minutos, el papel protector de estos fármacos ha quedado obsoleto en muchos casos.

El CNIC ya lo adelantó en su polipíldora cardiovascular (que combina aspirina, un antihipertensivo y un medicamento para el colesterol), de la que se excluyeron los betabloqueantes por su cuestionada utilidad.

Beneficios de eliminar los betabloqueantes

Según el estudio Reboot, dejar de prescribir betabloqueantes de forma rutinaria tras un infarto no complicado supondrá:

  • Menos efectos secundarios: cansancio, bradicardia (ritmo cardíaco bajo) y disfunción sexual.

  • Mayor adherencia al tratamiento, al reducirse el número de pastillas diarias.

  • Ahorro económico para el sistema sanitario, al disminuir la prescripción innecesaria.

Un riesgo especial para las mujeres

Uno de los hallazgos más relevantes del ensayo es la diferencia en el efecto de los betabloqueantes según el sexo.

  • En las mujeres, el estudio encontró un mayor riesgo de muerte, reinfarto y hospitalización por insuficiencia cardiaca cuando recibían betabloqueantes en comparación con aquellas que no los tomaban.

  • En los varones, en cambio, no se detectaron estos efectos adversos significativos.

Este resultado pone de manifiesto la importancia de tener en cuenta el sesgo de género en las enfermedades cardiovasculares, algo históricamente poco considerado en la investigación clínica.

Una advertencia para los pacientes que ya los toman

A pesar de los resultados, los cardiólogos insisten en que nadie debe suspender por su cuenta la medicación.

“Si un paciente está leyendo esta información y toma betabloqueantes, no debe interrumpirlos sin hablar antes con su médico. Es el especialista quien debe decidir si mantenerlos o no en cada caso”, advierte Ibáñez.

El infarto en España: cifras y contexto

  • Cada año, alrededor de 70.000 personas sufren un infarto en España.

  • El 70% de los pacientes sobreviven con la función cardíaca intacta, el grupo donde los betabloqueantes no ofrecen beneficio.

  • Hasta ahora, más del 80% de los pacientes eran dados de alta con esta medicación.

Con los nuevos datos, se espera una actualización de las guías clínicas internacionales de cardiología, lo que cambiará la práctica médica en hospitales de todo el mundo.


Conclusión: un cambio histórico en el tratamiento del infarto

El ensayo Reboot marca un antes y un después en la cardiología. Los betabloqueantes dejan de ser necesarios para la mayoría de los pacientes que superan un infarto sin complicaciones, reduciendo riesgos, efectos adversos y costes.

Se trata de un cambio de paradigma comparable al que supuso en su día la introducción de los stents coronarios, y que impactará en la vida de miles de pacientes cada año.

 

 

Continuar leyendo