Síguenos

PORTADA OFFICIAL PRESS

ERE de Telefónica: afectará a un máximo de 5.100 trabajadores

Publicado

en

ERE de Telefónica

Madrid/València, 4 dic (OFFICIAL PRESS-EFE).- Telefónica plantea un expediente de regulación de empleo (ERE) que afectará a un máximo de 5.100 trabajadores, 343 en la Comunitat Valenciana, en las tres sociedades que la compañía tiene en España, según han informado fuentes sindicales tras la primera reunión de constitución de las mesas de negociación.

Este lunes ha finalizado la constitución de las mesas de negociación de las tres entidades jurídicas de Telefónica en España -Telefónica Móviles, Telefónica Soluciones y Telefónica España-, donde trabajan unas 16.000 personas.

La empresa considera que existen 5.124 puestos de trabajos excedentes, que es la cifra máxima de trabajadores que podrían verse afectadas por el ERE.

Telefónica plantea este recorte de empleo por causas objetivas de carácter productivo, organizativo y técnico.

ERE de Telefónica

Fuentes sindicales estiman que las bajas serán «inevitablemente inferiores», ya que, a su juicio, el ajuste de estos puestos excedentes puede hacerse mediante distintas medidas como cambio de actividad, internalizaciones o recualificaciones, sin necesariamente salidas.

Desde UGT consideran que el volumen de bajas que plantea la compañía «aún no se ha hecho público».

De los 5.124 puestos de trabajo, 4.085 corresponden a Telefónica España, 81 a Soluciones y 958 a la división de móviles, han añadido las mismas fuentes.

Por comunidades autónomas, Madrid es la que acumula más puestos en el ERE, con 1.580 entre las tres sociedades (881 en Telefónica España, 624 en Telefónica Móviles y 75 en Soluciones).

Afectará hasta un máximo de 343 trabajadores en la Comunitat Valenciana

Entre las más afectadas se sitúan asimismo Cataluña, con 777 empleos en total; Andalucía, con 691; Comunitat Valenciana, con 343; Galicia, con 339; Castilla y León con 286; País Vasco, con 255, y Asturias, con 140, detallan fuentes sindicales.

Canarias suma 136 puestos de trabajo excedentes; Aragón 128; Castilla-La Mancha 119; Murcia 90; Islas Baleares 77; Extremadura 76; Cantabria 42; Navarra 36 y La Rioja 9.

El ERE, cuyo plazo se extenderá hasta 2026, está previsto para personas nacidas en 1968 y años anteriores (con 55 años de edad o más), con una antigüedad mínima de 15 años, según las mismas fuentes.

La siguiente reunión entre sindicatos y empresa será el próximo 11 de diciembre.

Estas negociaciones irán en paralelo a las del convenio colectivo de los empleados de las tres sociedades y, de hecho, los sindicatos ya han advertido de que no aceptarán un acuerdo sin el otro.

UGT ha reiterado su posición de que «no habrá acuerdo en el ERE si no hay acuerdo en el convenio que blinde garantías y estabilidad».

Una posición compartida por CCOO, que señala que buscará unos «resultados positivos» en todas las comisiones negociadoras de manera coordinada.

El último ERE que planteó Telefónica se produjo en 2011, cuando despidió a más de 6.000 empleados, una medida que provocó un cambio de legislación.

Desde entonces Telefónica ha optado por poner en marcha salidas de trabajadores mediante el conocido como PSI, las siglas que responden a Plan Suspensión Individual, por el que el empleado sigue vinculado a la empresa hasta su jubilación real, aunque esté suspendido de empleo, y mantiene los beneficios sociales, como el seguro médico y el plan de pensiones.

La empresa ha presentado tres planes de este tipo, en 2016, 2019 y 2021.

Advertisement
Click para comentar

Tienes que estar registrado para comentar Acceder

Deja un comentario

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.

PORTADA OFFICIAL PRESS

Maquillaje y contouring para aparentar derrota: la puesta en escena más cínica de Pedro Sánchez

Publicado

en

Maquillaje Pedro Sánchez
Pedro Sánchez visiblemente maquillado

El presidente del Gobierno apareció con un rostro visiblemente maquillado y gesto compungido en su comparecencia tras el informe de la UCO sobre corrupción en el PSOE.

La comparecencia de Pedro Sánchez el pasado jueves en la sede del PSOE en Ferraz no fue simplemente una rueda de prensa: fue una puesta en escena medida al milímetro. El presidente del Gobierno y secretario general de los socialistas apareció con semblante serio, voz apagada y un gesto que quería transmitir preocupación y abatimiento. Pero hubo un detalle que no pasó desapercibido para nadie: su rostro, visiblemente maquillado, usó técnicas de contouring propias del maquillaje profesional, con las que, lejos de embellecerse, buscaba aparentar desgaste, tristeza y preocupación.

Comunicación política o maquillaje emocional

En política, la imagen lo es todo. La forma en la que un líder comunica —ya sea con palabras, gestos o presencia escénica— puede ser tan poderosa como el contenido de su mensaje. En esta ocasión, Pedro Sánchez parecía haberlo entendido a la perfección. Frente a las cámaras, lució un tono de piel bronceado que contrastaba con el maquillaje oscuro aplicado en los pómulos, mandíbula y sienes, una técnica conocida como contouring, utilizada para dar profundidad y esculpir el rostro.

Pero, en lugar de proyectar una imagen cuidada, este maquillaje generó un efecto contraproducente: su rostro apareció demacrado, con rasgos marcados, ojeras acentuadas y un rictus dramático. Una imagen que, unida a su discurso en tono bajo y afectado, buscaba transmitir un mensaje muy concreto: soy una víctima más de la traición y la corrupción que me rodea.

El objetivo: generar empatía

El caso de Santos Cerdán, secretario de Organización del PSOE y señalado en un informe de la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil por su supuesta implicación en un cobro de comisiones, ha golpeado directamente al núcleo duro del sanchismo. Y Sánchez ha reaccionado con una estrategia que combina distanciamiento institucional y victimismo personal. Ha pedido perdón a los militantes del partido y a la ciudadanía, ha admitido que confiaba en Cerdán hasta el último momento y ha asegurado que no tenía conocimiento previo del informe policial.

Sin embargo, este mensaje no ha calado como él esperaba. Las redes sociales ardieron en críticas, memes y comentarios que denunciaban la artificialidad de su puesta en escena. El hashtag #MaquillajeDeFerraz se convirtió en tendencia, y usuarios y analistas coincidieron en señalar que el presidente había querido parecer más afectado de lo que realmente está.

El sudor del poder

Durante la intervención, otro detalle llamó especialmente la atención: la sudoración excesiva en el rostro de Sánchez. A medida que avanzaba la rueda de prensa, los brillos en la frente, el labio superior y los pómulos se hicieron más visibles. Un efecto que, lejos de humanizar su imagen, incrementó la sensación de nerviosismo y teatralidad. ¿Sudaba por tensión real o por un maquillaje mal aplicado bajo los focos?

El resultado fue una escena que muchos tildaron de “tanatorio político”, con un líder que quiso proyectar desolación, pero que terminó generando escepticismo. Incluso periodistas y profesionales del maquillaje han comentado en redes que la ejecución del contouring fue excesiva y poco natural, logrando el efecto contrario al deseado: una imagen artificiosa.

La estética al servicio de la estrategia

Esta no es la primera vez que la imagen de Pedro Sánchez es objeto de análisis. Desde su llegada a La Moncloa, ha mostrado un especial cuidado por su apariencia pública. De hecho, fuentes oficiales han reconocido que el gasto en peluquería, maquillaje y asesoría de imagen del presidente ha aumentado de forma notable desde 2020. Según datos publicados, el presupuesto de imagen se duplicó en esta legislatura, lo que evidencia que, para Sánchez, la estética también es política.

En esta ocasión, la puesta en escena fue más allá del maquillaje. La elección de Ferraz como escenario, el contraste del traje oscuro con la camisa blanca, el tono sombrío de su discurso y la decisión de comparecer sin el logo oficial del Gobierno buscaban un único propósito: salvar la figura institucional del presidente y dejar claro que lo que está en entredicho es el partido, no el Ejecutivo.

¿Víctima o estratega?

El debate está servido: ¿fue Pedro Sánchez víctima de la traición de su entorno o un estratega que quiso aprovechar la ocasión para reafirmar su liderazgo ante la tormenta? Lo cierto es que, al despedir a Cerdán, ha lanzado un mensaje claro de corte de cabezas, intentando transmitir que no le temblará el pulso frente a la corrupción. Pero al mismo tiempo, se aferra al poder y descarta cualquier cambio profundo o elecciones anticipadas. Su objetivo, como él mismo ha declarado, es gobernar hasta 2027.

A ojos de la ciudadanía, sin embargo, este movimiento puede resultar insuficiente. Las explicaciones dadas hasta ahora, tanto en lo político como en lo penal, siguen generando muchas dudas. Y la puesta en escena de Sánchez, con maquillaje dramático incluido, ha sido percibida por muchos como una maniobra de distracción más que como un gesto sincero.

Reacciones en redes: del meme al escándalo

En pocas horas, la imagen de Pedro Sánchez se convirtió en blanco de burlas y críticas. Usuarios como @manuel_llamas o @EL00LEON compararon su aspecto con personajes de ficción y criticaron duramente lo que consideran una farsa política: “El PSOE ha contratado al equipo de maquillaje de The Walking Dead para esta rueda de prensa”, ironizaba uno de ellos. Otros señalaban el uso del maquillaje como “una técnica manipuladora” para generar lástima.

Analistas políticos también han cuestionado el momento elegido para la comparecencia: justo después de que se conociera el informe de la UCO que implica al núcleo de confianza del presidente en posibles tramas de adjudicación de obras públicas a cambio de comisiones. En ese contexto, la imagen compungida de Sánchez parecía, para muchos, una cortina de humo.

Puedes seguir toda la actualidad visitando Official Press o en nuestras redes sociales: Facebook, Twitter o Instagram.

Continuar leyendo