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Fallas

Espolín ‘Encarnación’ para Sofía Vich Remohí como Fallera Mayor Infantil del Negrito

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“Es un gran sueño hecho realidad”. Con estas palabras, Sofía Vich Remohí resumía su deseo de convertirse en Fallera Mayor Infantil 2019 de su querida comisión de la Plaza del Negrito. Este sábado su sueño se materializaba al celebrarse, con todos los honores, su exaltación como la máxima representante de los infantiles de esta conocida comisión del barrio de El Carmen.

A sus 8 años, la pequeña Sofía vive con gran intensidad las fallas. Un amor por la fiesta que ha heredado de su madre, Sonia Remohí, que perteneció a la Corte de Honor de la Fallera Mayor de València 2001, y de su tía, Susana Remohí, quien en 1998 ocupó la Cadira D’Or de la ciutat.

Para un momento tan especial para una Fallera Mayor como es la exaltación, Sofía y su familia han preparado al detalle todo los detalles de su indumentaria de valenciana. La pequeña lucía un espolín de cartonaje antiguo que recibe el nombre de ‘Encarnación’ y que  Compañía Valenciana de la Seda ha recuperado para esta ocasión del archivo histórico de espolines de Rafael Catalá y para el que se han empleado 2 personas trabajando en dos turnos durante dos meses. Tejido en color ‘Rosa Cuarzo’, con 15 colores de trama y cinco metales, destaca el oro viejo que lleva en los centros.

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El traje ha sido confeccionado al estilo del siglo XIX por José Polit de ‘En Hilos de Seda Indumentaria Valenciana’. Combinaba el traje con manteletas de Hijas de Carmen Esteve con bordado oro y lentejuela oro. El aderezo de racimo es obra de Peris Roca y las peinetas las firma Flor D’Aigua.

Emocionada y sin querer perder detalle de todo cuanto su comisión y familia le habían preparado a Sofía para hacer de este momento, aún más especial si cabe. Su hermano Nicolás era el encargado de portar la banda que la acreditaría como Fallera Mayor Infantil de la Plaza del Negrito, mientras que María, de apenas 3 años, e hija de Amparo Requena, compañera de Corte de Sonia Remohí, le entregaba el ramo de flores.

Otro de los momentos más esperados lo protagonizaba Sofía junto a su tía Susana, cuya complicidad y cariño se dejaba ver en las emotivas palabras que la Fallera Mayor de València 1998 realizaba para exaltar a la homenajeada de la tarde. Un discurso breve y emotivo en el que recorrió con Sofía la diferencia de nacer en una familia tan fallera o porqué son de la Plaza del Negrito. Explicó a los niños cómo es Sofía y le recordó la importante misión que tiene este año y que no es otra que la de cuidar a su comisión infantil, mimarles, quererles ya hacer que se lo pasen muy bien. La familia también estuvo presente en un discurso que emocionó a los presentes.

Entre los asistentes, no faltaron las componentes de la Corte de Honor de la Fallera Mayor de València 2001 junto a sus familias. En un día tan especial para Sonia Remohí, quisieron estar a su lado.

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Fallas

Fallece Carmen Bueso, alma de «Flor» y referente histórico de la indumentaria valenciana

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Fallece Carmen Bueso
Carmen Bueso

La indumentarista que marcó una época deja un legado imborrable en el arte de vestir a las falleras mayores y cortes de honor de València

VALÈNCIA, 29 MARZO 2025 – La indumentaria tradicional valenciana está de luto. Carmen Bueso, conocida por todos como Carmen “Flor”, ha fallecido dejando un vacío imposible de llenar en el corazón de las Fallas. Su nombre ha estado unido durante décadas a la elegancia, la excelencia artesanal y el profundo respeto por la tradición. Con su partida, València pierde a una de las figuras más queridas y relevantes del mundo fallero.

Aunque recientemente se había jubilado tras cerrar su tienda de la calle Conde Altea, su legado sigue vivo en cientos de trajes que continúan desfilando por la ciudad cada mes de marzo. Su marca, “Flor. Carmen Bueso”, fue sinónimo de calidad, estilo y cariño por los detalles.

De una paquetería de barrio a vestir a las falleras mayores de València

El germen de su trayectoria profesional nació en la Paquetería Flor, un pequeño comercio junto al Mercado de Colón gestionado por la familia de su esposo, Manuel Flor. En su acogedora esquina de Conde Salvatierra, Carmen comenzó haciendo composturas y arreglos, hasta que un día decidió ir más allá: empezó a confeccionar trajes a medida con un pequeño equipo en Benimàmet, mucho antes de que el concepto de “tienda de indumentaria fallera” estuviese consolidado.

Su trabajo pronto se hizo conocido entre clientas exigentes del Pla del Remei y la Gran Vía, y su habilidad con el hilo y la aguja la catapultó a lo más alto del sector.

El espolín «Soto» y un momento para la historia

Uno de los momentos más emblemáticos de su carrera llegó en 1999, cuando su sobrina, Lola Flor Bustos, fue proclamada fallera mayor de València del año 2000. Fue Carmen quien la vistió de arriba a abajo, confeccionando con su equipo en Benimàmet el histórico espolín “Soto” de color paja, tejido por Garín. Fue, además, el último traje de exaltación no entregado por el Ayuntamiento, en una época en la que las falleras mayores aún vestían trajes confeccionados por familiares o indumentaristas de confianza.

Ese momento marcó el paso de Carmen Bueso de modista a icono.

Lola Flor

El salto a su tienda en Conde Altea y una clientela de élite fallera

Con el nuevo milenio, Carmen decidió dar un paso más y abrir su propia tienda bajo su nombre: “Flor. Carmen Bueso”. Durante más de dos décadas, este espacio fue referente indiscutible en el sector de la indumentaria valenciana, por donde pasaron falleras mayores como Sara Martín, Lucía Gil, Gloria Martínez, Marta Reglero, Nela Ayora o Inmaculada Asensi, así como decenas de componentes de las cortes de honor.

Incluso fue pionera en diseñar los primeros justillos para la “dansà” en el año 2008, cuando esa prenda no era aún habitual.

La tradición familiar también continuó con las nuevas generaciones: su sobrina nieta, Lola López Flor, hija de la fallera mayor del año 2000, fue componentede la corte de honor infantil de 2024. Un legado que se ha transmitido con orgullo y pasión.

Una jubilación que no pudo disfrutar

En 2024, Carmen bajó la persiana de su tienda con la satisfacción del deber cumplido. Se retiraba para disfrutar de una merecida jubilación, traspasando el negocio y cerrando un capítulo brillante de su vida. Lamentablemente, su fallecimiento prematuro ha impedido que disfrute plenamente de esa nueva etapa.

GALERÍA| La espectacular indumentaria de los hijos de Lola Flor

Reconocimiento en vida: premio Joia del Gremio de Sastres y Modistas

En junio de 2023, Carmen Bueso recibió uno de los galardones más emotivos: el premio Joia del Gremio de Sastres y Modistas de la Comunitat Valenciana, en reconocimiento a una vida entera dedicada al arte textil.

“Nunca hubiera imaginado un final así a mi trayectoria profesional, rodeada de tanta gente que quiero, de personas maravillosas que me he encontrado a lo largo de este camino”, escribió entonces, visiblemente emocionada por el homenaje.

Un legado que se viste, no se olvida

A diferencia de otras disciplinas efímeras de la fiesta, como la pirotecnia o la creación de monumentos falleros, el arte de la indumentaria permanece. Los trajes de valenciana confeccionados por Carmen seguirán vivos en cada desfile, cada exaltación y cada “mascletà”, recordándonos que fue ella quien los hizo posibles.

Cada vez que uno de sus espolines salga del armario, alguien recordará: «Esto es un Flor».

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