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Salud y Bienestar

Las vesículas extracelulares podrían ayudar a mejorar las tasas de éxito de la reproducción asistida

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MALLORCA, 4 de Abril – Desde los inicios de la medicina reproductiva, se ha tomado como verdad incuestionable el pensamiento de “mejor embrión equivale a mejores resultados de embarazo”. Consecuentemente, se ha puesto un especial foco en los laboratorios de embriología para mejorar los métodos de selección embrionaria y optar por aquellos embriones que presentan mayor potencial de implantación. En este sentido, el póster que presenta IVI en el 8th International IVIRMA Congress acerca de las vesículas extracelulares abre una nueva vía para la mejora de dicha selección y, por ende, el aumento de las tasas de éxito en los tratamientos reproductivos.

El trabajo, titulado “Extracellular vesicles can be isolated from culture media with and without exposure to human preimplantation embryos”, liderado por Diego Marín, doctorando de IVIRMA en la sede que el grupo tiene ubicada en New Jersey, y por el Dr. Richard T. Scott, CEO de IVIRMA y mentor del proyecto, nace con el objetivo de buscar un biomarcador que permita optimizar el proceso de selección embrionaria mediante un método no invasivo, y aumentar así las tasas de implantación de los embriones, en este caso euploides –aquellos que contienen 46 cromosomas normales –, que actualmente se sitúa en un 70%.

“Las vesículas extracelulares son partículas derivadas de células con una membrana de dos capas que secretan moléculas y, según se ha podido demostrar, desempeñan un papel fundamental en la comunicación intercelular. Dado que el diálogo entre el embrión y el endometrio es crucial para una correcta implantación y un embarazo normal a término, queremos demostrar que estas vesículas extracelulares secretadas por el embrión antes de su implantación tienen una función central en esta comunicación y, por tanto, pueden convertirse en biomarcadores potenciales para la competencia reproductiva embrionaria”, comenta el Dr. Juan Antonio García Velasco, director científico del 8th International IVIRMA Congress.

Se trata de un tema de investigación bastante novedoso –apenas lleva dos años de estudio –, por lo que, a largo plazo, se pretende identificar estas vesículas, aislarlas del medio de cultivo y analizarlas para ver los efectos que pueden tener sobre el embrión, en este caso, euploide, optimizando así el potencial de estas vesículas en el campo de la reproducción asistida.

“Aunque existen estudios sobre la relación entre estas vesículas y su aplicación en el tratamiento de enfermedades renales o afecciones tumorales, no se había aplicado en el campo de la medicina reproductiva hasta hace poco tiempo. Las vesículas extracelulares embrionarias ofrecen una oportunidad alentadora y no invasiva para evaluar la viabilidad del embrión que podría ayudar a mejorar la selección embrionaria y a entender el diálogo molecular entre embrión y endometrio, aumentando significativamente los resultados de embarazo, al combinar esta prometedora herramienta con otras tecnologías de diagnóstico. No obstante, son necesarios estudios más complejos para implementar su perfil como una prueba de diagnóstico para la selección de embriones”, añade el Dr. García Velasco.

Buscando la panacea reproductiva

Debido a su inmediata accesibilidad, la morfología del embrión se ha convertido en el método estándar para la selección embrionaria. Más adelante, las pruebas genéticas de preimplantación para la aneuploidía (PGT-A) revolucionaron el campo al tomar la selección de embriones más allá de su apariencia y enfocarse en su constitución genética. Así, pudo demostrarse que la transferencia de embriones cromosómicamente normales conduce a mayores tasas de implantación, menores tasas de aborto involuntario y tiempos más cortos para lograr el embarazo.

En consecuencia, se han realizado varios intentos con el fin de encontrar variables sólidas y medibles que puedan establecerse como biomarcadores de la competencia embrionaria y seguir mejorando así los resultados reproductivos. En este punto se sitúa la implementación de dispositivos como el EmbryoScope, que ha permitido el estudio de parámetros morfocinéticos.

Morfología, constitución genética y parámetros morfocinéticos, a pesar de la notable mejora evolutiva que han ido ofreciendo, perfilan el escenario actual de tasa de implantación: Alrededor de un tercio de los embriones cromosómicamente normales todavía no logran implantar en el útero.

“Ahora, damos un paso más y apostamos por el estudio de las vesículas extracelulares con el objetivo principal de aumentar la tasa de implantación embrionaria con un conocimiento detallado de las posibilidades de estas partículas y su influencia en el proceso reproductivo”, concluye el Dr. García Velasco.

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Salud y Bienestar

Cuidado, así afecta el calor del verano a los medicamentos

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Cuidado, así afecta el calor del verano a los medicamentos

Especialistas del Departamento de Salud de la Ribera alertan de que una incorrecta conservación de los medicamentos en verano puede provocar importantes problemas de salud en el organismo al verse alteradas las características de calidad y eficacia de los fármacos.

Efectos nocivos que el calor puede provocar en los medicamentos

Teniendo en cuenta las altas temperaturas que suelen alcanzarse en estos meses, el personal especializado advierte de la necesidad de llevar a cabo una correcta utilización de los fármacos, con especial atención a aquellos medicamentos que deben conservarse en frío o deben utilizarse tan pronto se hayan sacado de la nevera.

Según los farmacéuticos de Atención Primaria del Departamento de Salud de la Ribera, Miguel Murcia y Rocío Broseta, “las condiciones de conservación que indica un medicamento, se establecen según los ensayos realizados antes de ser comercializados, por lo que deben respetarse para no perder su eficacia y seguridad”.

Por ello, antes de consumir cualquier medicamento, se debe comprobar su estado y su apariencia exterior, sobre todo en cremas, colirios, supositorios u óvulos, ya que por su aspecto se puede conocer su estabilidad.

Cuando nunca debes consumirlos

Si no se ha conservado correctamente o el producto ha cambiado al abrirlo, el medicamento no debe ser consumido bajo ningún concepto, ya que podrían estar alteradas las propiedades del fármaco.

Por lo que respecta a la conservación en casa, es aconsejable mantener los medicamentos en sitios frescos y secos, evitando la exposición directa a la luz solar.

Por ello, el personal experto recomienda no guardarlos en la cocina o el baño, estancias de la casa que, por lo general, suelen acumular más calor a lo largo del día, y siempre lejos del alcance de los niños.

En cualquier caso, es importante que antes de tomar un medicamento se consulte con  profesionales sanitarios y se evite la automedicación.

Igualmente, cuando se adquiera por primera vez, se recomienda leer el envase y el prospecto para conocer la temperatura a la que debe conservarse.

Viajar con medicamentos

En los trayectos por carretera, es recomendable no llevar los medicamentos en el maletero o la guantera del coche, ya que pueden llegar a alcanzar altas temperaturas.

Es imprescindible mantener las condiciones de transporte específicas para cada medicamento; es decir, los fármacos a conservar entre los 2ºC y 8ºC, deben conservarse siempre en nevera y, por tanto, transportarse en embalaje isotérmico refrigerado (sin llegar a congelar); por su parte, los fármacos que deben permanecer a una temperatura de entre 25ºC y 30ºC, han de transportarse en un embalaje isotérmico no refrigerado para evitar que puedan alcanzar temperaturas mayores.

Síndrome de agotamiento y golpe de calor

Por otro lado,  el personal especializado advierte de que algunos medicamentos pueden acentuar los efectos de las altas temperaturas, agravar el síndrome de agotamiento-deshidratación, propiciar los golpes de calor o inducir una hipertermia.

En este grupo de medicamentos se encuentran los diuréticos, los antiinflamatorios no esteroideos, los antihipertensivos, algunos antibióticos y antivirales, los antiarrítimicos, algunos antidiabéticos, los hipolipemiantes (empleados para regular el colesterol), los antidepresivos, los antihistamínicos y los antipsicóticos.

“Hay que estar atentos al estado general de aquellos pacientes que toman este tipo de medicamentos, así como propiciar una serie de medidas que ayude a controlar su temperatura corporal: ambiente fresco, buena ventilación y aireación, y continua hidratación.

Es importante resaltar que, a pesar de las altas temperaturas, en ningún caso se deben suspender los tratamientos establecidos por los facultativos”, concluyen Murcia y Broseta.

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