Tres de los ocho detenidos por los altercados de la Madrugá en Sevilla van a ingresar en prisión por un delito de «desórdenes» y otro «contra la libertad religiosa», lo que conllevaría penas de hasta seis años de prisión. El resto de detenidos ha quedado en libertad con cargos. Además, para el ciudadano de Senegal, detenido también durante los altercados al grita que «Alá es grande», el fiscal ha solicitado una pena de cuatro meses de multa en los que tendrá que pagar 6 euros al día. Según los investigadores, se descarta «una acción organizada» y califican de «actos vandálicos aislados graves» los para desórdenes.

Las seis procesiones que componen la famosa ‘Madrugá’ de Sevilla, las más populares de la ciudad, protagonizada por 10.000 nazarenos, vivieron en la madrugada del viernes escenas de pánico cuando los gritos y carreras de un grupo de personas gritando amenazas han provocado varias estampidas que han motivado que el cortejo se detuviera sobre las 04.10 horas de este Viernes aunque posteriormente se prosiguiera con la celebración.

En los hechos acaecidos en La Madrugá, según señalaron fuentes de emergencias de la capital andaluza, tres de esos detenidos gritaban y daban golpes, y todos ellos eran conocido como delincuentes comunes. «Uno de ellos acumula hasta 36 detenciones», señalaban las mismas fuentes, que apuntaron que es el dispositivo especial de Semana Santa en Sevilla el que ha realizado las investigaciones para esclarecer los hechos.