Tenemos nuevo lío y escándalo mayúsculo en el fútbol español, y mucho más de lo que supone ya la detención de la cúpula dirigente de la Real Federación Española de Fútbol, con su presidente, Angel María Villar a la cabeza. En una semana de grandes acontecimientos en la RFEF, entre ellos la Asamblea General, en la que se iba a sortear el calendario de la próxima edición de la LaLiga, tanto en primera (Liga Santander) como en Segunda División (Liga123), la noticia ha saltado a media tarde de este martes, cuando el máximo órgano federativo, en guerra con la Liga de Fútbol Profesional que dirige Javier Tebas, anuncia la suspensión de toda la actividad federativa «hasta nueva orden».
«Las reuniones de los órganos señaladas para los días 19, 20 y 21 de julio de 2017 quedan aplazadas hasta nueva fecha», dice el escueto comunicado, resumido en un ‘tuit’, publicado en la página oficial de la federacion de Villar.
La noticia, más allá del interés de los aficionados, está también vista con asombro por los clubes, que no pueden organizar la temporada y los viajes, cuando la liga comienza en poco más de un mes (el inicio está previsto para el 19 de agosto). La Federación, responsable de los calendarios (y no así la liga) pone una piedra más en el camino del fútbol profesional y queda, por tanto, descabezado, con su cúpula, reelegida el pasado mes de mayo como candidatura única, después de las denuncias de la oposición a Villar de manipulación y ejercer un control sobre
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